En la recta final del campeonato todo detalle es importante. Ellos serán los que dictaminen quienes bajan a división de plata. Es por ello que el Real Valladolid deberá seguir en la línea de encajar los menos goles posibles. La meta blanquivioleta llevados partidos consecutivos quedando a cero, la anterior jornada gracias a una gran defensa y en el choque de hoy frente al Valencia, gracias a la gran actuación de Jaime, que ha sacado dos mano a mano para salvar a los suyos de recibir goles. El portero blanquivioleta ha sido de los mejores del encuentro.

Derivado de no recibir tantos, viene el ser fuertes en Zorrilla. El estadio pucelano lleva sin conocer la derrota una vuelta entera. Exactamente, la última derrota fue frente al rival de la próxima jornada, Osasuna. Aquel encuentro correspondiente a la jornada 14 de la competición terminó con 0-1 gracias a un tanto de Oier en la recta final del partido.

A raíz de este resultado el equipo dirigido por Juan Ignacio Martínez, ha cosechado triunfos, como el del F.C. Barcelona, pero sobre todo empates, el último frente al Valencia como hemos podido presenciar en la noche de hoy.

A estas alturas de la temporada se nota la ansiedad de los equipos y de los jugadores que se juegan el descenso porque cada vez quedan menos partidos. En estos casos hay que estar pendiente de cualquier  incidente con cualquiera de los futbolistas de la plantilla. En el punto de mira ha estado Larsson hoy, ya que la suerte no se ha aliado de su parte. Un pelotazo en la cara que le dejo tocado e hizo que tuviera ser sustituido en el minuto 22. Hasta esos momentos el sueco estaba siendo uno de los mejores del Real Valladolid, que tuvo en sus botas una ocasión para adelantar a los suyos.