El Real Valladolid continúa su semana de trabajo intenso, a pesar de no competir esta jornada. Esta vez, la sesión tuvo lugar sobre el césped de los Anexos, sin complicaciones y con una gran afluencia de público en las gradas del campo de entrenamiento pucelano. Gran mayoría del público fueron jóvenes aficionados, que al término de la sesión, se acercaron a sus ídolos para recibir una serigrafía y alguna que otra fotografía. 

En el entrenamiento no estuvo presente Rukavina, que sigue tocado. El grupo trabajó con intensidad con el objetivo de mantener el tono físico y no desconcentrarse. Juan Ignacio dirigió el trabajo, tras el partido amistoso de ayer, con la idea de continuar esta puesta a punto.

En el día de mañana, el conjunto pucelano regresará a los Anexos del José Zorrilla, a la misma hora, las 11:00 horas de la mañana, para ejercitarse una vez más. En el horizonte, aparece ya un nuevo choque amistoso ante el Burgos.