El próximo domingo tendrá lugar la segunda cita del campeonato doméstico en la categoría de bronce del deporte rey a nivel nacional. Los Anexos al José Zorrilla serán testigos de un derbi entre el Real Valladolid Promesas y el Zamora CF, un partido al que ambos conjuntos llegan con la necesidad de recuperar la confianza perdida en el anterior envite liguero tras caer derrotados por la mínima frente al Atlético Astorga y el Guijuelo, respectivamente. Ambos equipos se encuentran encuadrados en el Grupo 1 de Segunda División B, por lo que su objetivo es tratar de sumar el mayor número de puntos posibles durante todo el año para garantizar su permanencia.

Pero se puede afirmar que casi con total seguridad los focos de atención recaerán sobre dos jugadores en concreto, dos hombres que realizaron su etapa de formación en tierras zamoranas, que maduraron tanto a nivel personal como profesional y que en el periodo estival de fichajes que está a punto de expirar cambiaron la que había sido su casa a lo largo de los últimos años para arribar a orillas del Pisuerga. Pese a ello, la afición del Zamora siempre les llevará en el fondo de su corazón por el rendimiento, el sacrificio y el trabajo constante que demostraron en todo momento, lo que sin duda demuestra la gran profesionalidad de la que los dos hacen gala. Estamos hablando de Ramiro Mayor y de Jorge Hernández, dos futbolistas con un futuro realmente esperanzador.

Criado en La Romareda

Ramiro Mayor Ruiz (Zaragoza, 09/05/1991) es un central que cuenta con una serie de características que le hacen convertirse en un jugador bastante completo, un aspecto que a ciencia cierta le va a permitir hacerse un hueco en el panorama futbolístico nacional e internacional en un futuro no demasiado lejano. Su primera campaña en la élite fue la que disputó con el filial del conjunto maño en Segunda B, concretamente la 2011/2012, un curso en el que también fue convocado con la primera plantilla del Real Zaragoza pero en la que no llegó a debutar en la Liga BBVA.

Los registros que acumuló dicha temporada fueron los siguientes: 23 partidos jugados, 19 de ellos partiendo desde el once titular, de los cuales llegó a completar un total de 18 compromisos. Este aspecto se puede especificar en la suma de 1.679 minutos disputados defendiendo la elástica zaragocista, en los que a pesar de su vocación defensiva tuvo la convicción necesaria para transformar una diana de bella factura. Se puede afirmar con rotundidad que posee un poderoso juego aéreo, una faceta en la que se debe tener en consideración la estatura que posee el zaguero maño (1'85 metros).

Fantástico rendimiento en Zamora

El año siguiente recaló en las filas del Villarreal B, donde permaneció hasta el mercado invernal de incorporaciones al apenas contar con los minutos que andaba buscando en la cantera del cuadro castellonense. Únicamente pudo vestirse de corto en dos envites ligueros, así que pronto se dio cuenta de que su aventura en el Submarino Amarillo tenía que llegar a su fin. Así fue como puso rumbo directo a Castilla y León para unirse al Zamora CF, un plantel en el que en media temporada consiguió hacerse con la titularidad al jugar 15 duelos (1.295 minutos), todos ellos desde el once inicial, en los que anotó un gol y sufrió una expulsión.

En media temporada consiguió hacerse con la titularidad al jugar 15 duelos

El curso 2013/2014 supuso su consolidación al frente de la zaga de la escuadra zamorana, debido a que participó en un total de 32 contiendas, 31 de ellas como titular, lo que se puede traducir en la friolera de 2.663 minutos, aunque en esta ocasión no pudo aportar ninguna diana en su casillero particular. La única pega que se ha de destacar en relación con su actuación la pasada campaña en Segunda División B es el hecho de que fue expulsado en tres partidos, algo que deberá corregir si desea consolidarse en el eje central de la defensa del Promesas de la mano de Rubén de la Barrera. Por lo demás, es un jugador que va a aportar una enorme solidez y firmeza al entramado colectivo del filial blanquivioleta.

La joya de la corona

Por lo que respecta a Jorge Hernández (Zamora, 06/02/1992), hay que decir que se formó en las categorías inferiores del club rojiblanco, donde empezó a demostrar su valía desde el principio e hizo las delicias de sus aficionados durante todas las temporadas que se mantuvo en las filas del conjunto dirigido en la actualidad por Roberto Aguirre. Sus dos primeros años en el plantel viriato (2009-2011) le sirvieron para ir cogiendo experiencia y madurez como profesional, puesto que apenas participó en 15 encuentros en los que acumuló algo más de 500 minutos y pudo materializar dos tantos, ambos en la campaña 2010/2011.

La temporada venidera ya significó un salto importante en el papel que el talentoso mediapunta ejercía en el Zamora CF, dado que disputó 35 choques, la mitad de ellos como titular, un aspecto que se saldó con 1.897 minutos jugados y la suma de cinco goles anotados con la zamarra rojiblanca. En cuanto a su actuación en el curso futbolístico 2012/2013, su presencia disminuyó un poco en lo que hace alusión al número de partidos jugados (28 en total), en los que se convirtió en un hombre fundamental saliendo desde el banquillo, lo que le permitió ganarse con méritos propios la catalogación de auténtico revulsivo con 1.145 minutos disputados y perforando las mallas de la portería rival en dos ocasiones.

Aunque su verdadera confirmación como jugador capital en el esquema del club presidido por Segismundo Ferrero Sutil llegó en la campaña pasada, la 2013/2014, cuando se confirmó como una pieza imprescindible en la plantilla del equipo zamorano. 35 compromisos en los que saltó al terreno de juego en la categoría de bronce del balompié en España, todos ellos desde el once titular, lo que hizo que registrara un total de 2.849 minutos y la cifra de siete goles transformados, su mejor balance como anotador a título individual. Esto hizo que el Pucela se fijara en él y se comprometiera a hacerse con sus servicios, especialmente con la finalidad de que vaya alternando su presencia entre el cuadro de Rubi y el Real Valladolid B.

Domingo 31 de agosto, 12:00 horas, campo de los Anexos al Estadio José Zorrilla. Esos son los detalles principales que marcarán un auténtico cruce de sentimientos tanto para Jorge Hernández como para Ramiro Mayor, dos jugadores que tuvieron una trascendencia espectacular en el Zamora CF y que a partir de ahora desean alcanzar una repercusión prácticamente similar en el equipo presidido por Carlos Suárez. Ambos futbolistas tienen muchas papeletas para partir en el once titular del míster albivioleta este fin de semana, por lo que en el instante en el que el colegiado decrete el arranque de la confrontación se entremezclarán varias sensaciones que tan sólo sus protagonistas serán capaces de describir a la perfección.