El Pucela se mide el próximo domingo al Real Betis en el Benito Villamarín, un duelo que va a ser realmente importante para marcar el devenir de los dos equipos en la competición de la regularidad en Segunda, sobre todo para comprobar sus verdaderas aspiraciones a regresar lo antes posible a la máxima categoría del deporte rey a nivel nacional. La contienda disputada en la primera vuelta a orillas del Pisuerga finalizó con un insulso empate a cero, al igual que ocurriera el curso pasado en la capital de Castilla en la Liga BBVA, si bien es cierto que el último precedente en tierras sevillanas fue el que le costó prácticamente el descenso al Club presidido por Carlos Suárez.

No obstante, el recuerdo de aquel fatídico partido que se perdió exactamente en los últimos compases del choque está ya más que olvidado y superado tanto por la parroquia albivioleta como por los integrantes del conjunto liderado por Rubi. Es evidente que significó un verdadero mazazo a nivel anímico, sobre todo por el hecho de que los verdiblancos ya estaban matemáticamente descendidos a la Liga Adelante, pero aun así plantearon un encuentro muy serio y competitivo que les permitió hacerse con los tres puntos y condenar al Pucela al abismo. Aunque siendo justos, conviene recalcar que más bien fueron los pupilos entrenados por aquel entonces por Juan Ignacio Martínez, actualmente en las filas de la UD Almería, los que provocaron su pérdida de la categoría al firmar una temporada cuando menos mejorable.

Como muy bien señaló Javi Varas el pasado martes en rueda de prensa, "el pasado ya no cuenta, hay que mirar el presente y el futuro". El cancerbero andaluz está siendo uno de los principales baluartes del Real Valladolid en el presente curso futbolístico, debido a que se ha consolidado con solvencia bajos los palos de la meta pucelana. Y sin ningún atisbo de duda, el enfrentamiento de este fin de semana en territorio bético será realmente especial para el arquero sevillano, puesto que no se puede pasar por alto su trayectoria a lo largo de mucho tiempo en el eterno rival del cuadro dirigido por Pepe Mel. Sí, estamos hablando del Sevilla FC, un equipo en el que el '1' de los castellanos cuajó varios años a un nivel bastante meritorio.

¿Quién no se acuerda de la espectacular actuación de Varas en el Camp Nou frente al todopoderoso FC Barcelona de Pep Guardiola? Aquel partido fue su carta de presentación a nivel nacional y mundial, ya que lo detuvo absolutamente todo, incluida una pena máxima en el último minuto de partido a Leo Messi, el que es considerado por méritos propios el mejor futbolista del planeta. Sin embargo, existe un pequeño borrón (por así llamarlo) en el currículum del que es considerado como uno de los mejores porteros existentes en el panorama nacional. Y es que no ha sido capaz de derrotar al Real Betis en ningún duelo que ha disputado directamente contra los verdiblancos, algo que espera poder lograr el domingo defendiendo la zamarra blanquivioleta.

Su debut en un derbi sevillano

Se puede afirmar con claridad que este enfrentamiento va a significar una especie de derbi para Javi Varas, además de que lo va a afrontar con ganas de vendetta para resarcirse de una vez por todas de esa espinita que seguro que tiene guardada en lo más hondo de su corazón. La primera vez que se vio las caras contra el Real Betis, lo cual supondría su debut en un derbi entre béticos e hispalenses, fue en la temporada 2011/2012 de la mano de Marcelino García Toral, actual técnico del Villarreal CF. El envite tuvo lugar en el Benito Villamarín, un escenario que viviría un empate a uno entre ambas escuadras merced a las dianas transformadas por Beñat y Álvaro Negredo, jugadores que hoy se encuentran en Athletic Club de Bilbao y Valencia CF, respectivamente.

El segundo y último derbi sevillano que disputaría Javi Varas defendiendo el honor de la portería de Nervión sería el choque de la segunda vuelta de ese mismo curso futbolístico, una prueba que se produciría en el Ramón Sánchez Pizjuán bajo el amparo y el cariño de todos sus seguidores. El Sevilla, que por esas fechas había cambiado de míster y se decantó por Míchel, quien esta vez sonó con fuerza de verdad, se adelantó nada más empezar la pugna por medio de Negredo. Pero habría un jugador verdiblanco que no estaba dispuesto a que los locales reinaran aquella noche en la capital de Andalucía. Beñat se erigió en el héroe de los suyos al remontar el choque con dos magistrales lanzamientos de libre directo, lo que amargó en demasía el buen papel que había realizado Varas delante de su afición en dicha confrontación.

Javi Varas cambiaría el Sánchez Pizjuán por Balaídos para marcharse al Celta de Vigo, un conjunto que le abrió las puertas de su casa con los brazos abiertos al darse cuenta de que el cancerbero sevillano no tenía hueco en Nervión por la llegada de Beto y la segunda juventud que estaba viviendo Andrés Palop. El sevillano se ganó pronto la confianza de Paco Herrera para hacerse indiscutible en los onces del plantel celeste, por lo que se vería las caras con el Real Betis en la decimosexta jornada del campeonato doméstico en Primera de la campaña 2012/2013. El partido se desarrolló en tierras gallegas, donde ambos conjuntos plasmaron en el campo su filosofía y su estilo de juego, pero serían finalmente los verdiblancos los que se llevarían el triunfo de vuelta al sur de España gracias a un gol materializado por Jorge Molina.

Javi Varas cambiaría el Sánchez Pizjuán por Balaídos para marcharse al Celta de Vigo

La última batalla que ha librado el bueno de Varas frente al Real Betis partiendo desde la titularidad (sin contar la que jugó con el Pucela) fue el 12 de mayo del año 2013, una fecha que se correspondía con la trigesimoquinta cita del torneo liguero en Primera División entre andaluces y celtiñas en el Benito Villamarín. En esta ocasión, los vigueses estaban preparados por Abel Resino, un entrenador que a día de hoy está dirigiendo al Granada CF, dado que había tenido que sustituir a Paco Herrera después de que el actual míster de la UD Las Palmas fuera cesado de su cargo en el banquillo del Celta. Los visitantes le pusieron las cosas muy complicadas a los de Pepe Mel, aunque estos decantarían la balanza finalmente a su favor a través de una diana transformada por Rubén Castro.

Por tanto, Varas tiene ante sí el próximo domingo la oportunidad de derribar los muros y los obstáculos que se han ido cruzando en su camino para vencer de una vez por todas a los béticos, un oponente al que tiene muchas ganas de poder derrotar en un duelo directo. Con el Sevilla y el Celta de Vigo estuvo realmente cerca de conseguirlo, pero su balance hasta la fecha es de dos empates (uno con el Pucela) y tres derrotas en lo que hace alusión a los partidos que ha disputado contra el cuadro presidido por Juan Carlos Ollero. ¿Serán capaces el portero andaluz y el Real Valladolid de superar el difícil reto que les va a proponer el Real Betis esta jornada en el Benito Villamarín?