Corría el minuto 41 de partido en el Nuevo Arcángel. Eran los mejor minutos del conjunto de Gaizka Garitano sobre el césped del estadio cordobés. Los vallisoletanos disponían de una falta en la frontal del área, botada con inteligencia, una de esas "jugadas ensayadas". Juan Villar enfilaba la portería de Razak cuando fue literalmente atropellado por Nando dentro del área verdiblanca. Todo hacía presagiar que el colegiado del encuentro, Areces Franco, iba a señalar penalti pero nada más lejos de la realidad. El árbitro del comité asturiano mostró cartulina amarilla al siete del Real Valladolid por considerar que se había tirado a la piscina, o eso es lo que en un principio pensamos.
Desde el club esperan que el recurso prospere y la tarjeta pierda su validez
Tras ver los vídeos y corroborar que el contacto existe en una jugada en la que el extremo del Córdoba se desentiende totalmente del balón, el conjunto que preside Carlos Suárez ha decidido presentar alegaciones para que Competición deje sin validez esa tarjeta vista por el ex jugador del Cádiz como ha anunciado el club a través de Twitter el conjunto de la capital del Pisuerga.
La gota que ha colmado el vaso ha sido la redacción de la acción en el acta del partido. El juez de la contienda asegura que el jugador del equipo pucelano fue amonestado por "jugar el balón con la mano intentando colocarse en posición ventajosa para conseguir un gol". Lo que está lejos de la realidad de lo que aconteció en el partido.
Desde el club se espera que el recurso prospere y que dicha tarjeta, la primera que ve Juan Villar como jugador del Pucela, pierda toda la validez y llegue limpio al choque del próximo domingo ante el Alcorcón en el estadio José Zorrilla. El cuadro vallisoletano comenzará a preparar el encuentro mañana tras la jornada de descanso de hoy, lunes.
