La Copa del Rey ya está aquí. El Real Valladolid busca resarcirse del mal comienzo en liga consiguiendo el pase a la siguiente ronda y así disimular el mal juego realizado por el equipo pucelano en estas tres primeras jornadas. En frente un equipo sin ninguna obligación salvo de ilusionar a su afición con avanzar rondas en Copa y recibir a un equipo de los grandes de Primera.

Hablamos del Real Oviedo, el equipo del Carlos Tartiere que volvió a Segunda División tras muchos años en el pozo de la Segunda B ha conseguido volver al sitio que por historia les correspondía. En este equipo hay tres jugadores con pasado blanquivioleta.Toché, Hector Font y Carlos Peña han vestido la camiseta la del Real Valladolid. Este último ha estado vinculado al club pucelano hasta este verano en que puso rumbo a tierras asturianas.

Polivalente menos en Valladolid

Héctor Font llegó a Valladolid en la temporada 2009/10 libre procedente de Osasuna y se convirtió en el tercer refuerzo del Pucela para aquella temporada. Jugador comodín en el centro del campo, con apenas 25 años era el quinto equipo en el que jugaba el de Villarreal y firmaba por tres temporadas. Llegaba a Pucela para proporcionar posesión de balón, calidad para jugar el esférico y suficiente técnica para surtir de balones en profundidad a las líneas de más arriba, en el extremo derecho podía ser un futbolista con menor recorrido, pero era capaz de realizar diagonales e incorporarse al área cuando los laterales tenían el balón, sin olvidar un buen toque de balón. Por último, en la posición de media punta, el castellonense poseía suficiente visión de juego e inteligencia para realizar las funciones defensivas que pudiera necesitar Mendilibar, y a la vez llevar a cabo las transiciones con la punta del ataque y las bandas, siempre básicas para el preparador vasco.

Foto: Sportfactor.es

Font, un jugador de equipo, llegaba para sumar una cantidad importante de minutos a lo largo de la temporada aunque sus presencias en el once inicial no serían muy numerables, al menos en un principio. Finalmente, el papel y rendimiento del futbolista no fue para nada el esperado, en la única temporada que estuvo en el Real Valladolid solo jugó 10 partidos. Ni Mendilibar, ni Onésimo, ni Javi Clemente contaron con el jugador castellonense. Ante esto, el club decidió cederlo la siguiente temporada al Xérez y la siguiente se desvinculó como blanquivioleta.

Tras su paso por equipos como el Recreativo de Huelva, el Cartagena y el Lugo, Héctor Font inició una nueva etapa con el Real Oviedo la temporada pasada en Segunda B. Allí ha recuperado la ilusión por el fútbol y ha sido uno de los participes de que el equipo haya vuelto a Segunda División.

Trabajo y esfuerzo

Carlos Peña llegó al Real Valladolid tras el descenso, fue el primer fichaje para asentar el nuevo proyecto de Antonio Gómez con el objetivo de ascender. Tras cinco temporadas como blanquivioleta decidió dar por finalizada su etapa y marchar al Real Oviedo. Peña ha tenido que tomar galones dentro y fuera del campo. Con su marcha, el Pucela pierde a uno de los jugadores más utilizados en las dos últimas temporadas pero, sobre todo, a uno de sus líderes en el vestuario.

En sus comienzos no fue un jugador titular pero con el paso de los partidos se volvió un hombre fundamental en el 11 inicial del Real Valladolid. Fue una pieza fundamental en el ascenso de 2012 con Miroslav Djukic y en primera al principio le costó más ganarse el puesto porque por delante tenía a Balenziaga y Rukavina. Con trabajo diario, Carlos fue un profesional y un ejemplo para el vestuario. Con ello, Peña se marcha del Real Valladolid demostrando liderazgo.

Los dos últimos años como jugador pucelano ha sido pieza fundamental para los entrenadores que han estado en el club. En la temporada del descenso, con Juan Ignacio Martínez, Peña jugó 39 partidos y con Rubi la temporada pasada jugó 41 encuentros. En total 80 veces en dos temporadas ha vestido la camiseta pucelana.

Con el ascenso bajo el brazo

Toché fue el primero en pasar por las filas del Real Valladolid, con Mendilibar a las órdenes del equipo, llegó como cedido. Su papel no fue el de un jugador protagonista pero en los 15 encuentros que disputó consiguió anotar cuatro goles. Además ese mismo año el equipo conseguiría el ascenso y el récord de puntos. Delantero experimentado que, sin poseer una gran calidad, ha ido haciendo goles en todos los equipos en los que ha estado.