Malas, muy malas noticias para el Real Valladolid. Tras la reunión del Comité de Competición de la RFEF, el conjunto albivioleta ha concido la sanción de dos de sus jugadores. Por un lado, Juan Villar mantiene su segunda tarjeta amarilla, y a menos que el Comité de Apelación diga lo contrario, se perderá el encuentro ante el Nàstic de Tarragona de este próximo domingo. Y por otro, Samuel Llorca estará dos partidos fuera de los terrenos de juego. 

De esta forma, el central ex del Celta de Vigo se perderá el citado compromiso ante los catalanes, y el siguiente partido, en El Alcoraz ante el Huesca, del domingo 4 de octubre. El motivo de los dos partidos de suspensión es debido a la apliación del artículo 123 del Código Disciplinario de la RFEF, que hace referencia al juego violento sobre el campo. El artículo versa de la siguiente manera. 

1. Producirse de manera violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, siempre que la acción origine riesgo, pero no se produzcan consecuencias dañosas o lesivas, se sancionará con suspensión de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes.

2. Si la acción descrita en el párrafo anterior se produjera al margen del juego o estando el juego detenido, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 98 del presente Código. 

En el caso de Samuel, el Real Valladolid no ha confirmado que vaya a presentar una reclamación al Comité de Apelación, como sí hará con Juan Villar, pero sí ha indicado que su servicio jurídico estudiará la sentencia por si fuera correcto presentar una recurso en el siguiente comité, buscando rebajar la sanción del central. Sin embargo, esta vez puede no haber mucho que reclamar ya que en las imágenes se observa como Samuel agarra y agrede al rival en el área, causando el penalti y la siguiente expulsión.