Primera prueba de fuego para el Real Valladolid. El nuevo proyecto de Gaizka Garitano no ha empezado tal y como muchos hubiesen imaginado. Tras una notable pretemporada tanto a nivel de resultados, como de sensaciones, parece que al equipo lo de volver a competir en partidos oficiales le sigue sentando igual de mal que en las temporadas anteriores.

Bien es cierto que solo se llevan siete jornadas disputadas, pero este equipo hasta el momento no transmite nada y eso en un equipo que aspira a estar en la parte alta de la Clasificación empieza a ser preocupante. Algunos a estas fechas aún se siguen agarrando a lo de “equipo en construcción” para evadirse de la pura realidad, pero es innegable que el Pucela de Garitano no juega a nada. El Real Valladolid tan sólo ha ganado dos partidos de los ocho que lleva jugados en la 2015/16 (7 de Liga y 1 de Copa). A esto hay que sumarle que en este primer tramo de calendario, el Pucela se ha visto la cara con los 3 de los 4 equipos que hay ascendido este año (Bilbao Athletic, Nàstic y Huesca) y precisamente el domingo se medirá al cuarto, al Real Oviedo.

Cierto es, que se ha abierto una nueva etapa en el club. La llegada de Garitano ha supuesto una nueva filosofía sobre los terrenos de juego. A principios de verano, desde la parte alta del club se vendió que con el fichaje del ex técnico del Eibar se buscaba dar un salto en cuanto a carácter e intensidad -algo que desde la salida de Djúkic en 2013, aún ningún entrenador ha sabido dar con la tecla-. También la faceta defensiva iba a ser otro de los puntos fuertes del equipo y Gaizka iba a ser la clave, pues hasta el momento nada de nada. Y por no hablar de lo puramente ofensivo donde el Real Valladolid ha sido de los equipos de Segunda que menos disparos a puerta ha realizado en toda la campaña.

Un muro defensivo aún sin construir

Presumiblemente, con la llegada de Garitano, lo puramente defensivo iba a ser uno de los puntos fuertes del equipo. Siempre se ha dicho que un buen ataque es una buena defensa y hasta esta fecha, el Valladolid no ha sabido ponerlo en materia. Un total de nueve goles ha encajado el conjunto blanquivioleta, sumando los partidos de Liga junto al de Copa ante el Oviedo. En los ocho partidos que ha disputado el equipo, tan sólo en tres encuentros ha dejado la portería a cero, y en gran medida culpa de ello está teniendo Kepa Arrizabalaga. El portero cedido del Athletic de Bilbao ya se ha convertido en uno de los hombres claves tal y como demostró el pasado domingo en Huesca. A esto hay que sumarle las dos remontadas que ha sufrido el Pucela, ante el Numancia después de ir ganando por 0-2 y la de la pasada Jornada en el Alcoraz después de ponerse por delante con gol de Rodri en la primera mitad.

Muchos coinciden que la defensa ha sido una de las posiciones donde peor se ha reforzado el equipo durante el verano. La salida de tres de los pirales de las últimas temporadas como Valiente, Rueda y Peña han dejado un vacío inimaginable, teniendo en cuenta que su nivel en las últimas campañas no ha sido el más deseado. Marcelo Silva y Juanpe han sido los recambios para los dos primeros, mientras que Mario Hermoso ha sido la apuesta de Braulio para suplir al lateral izquierdo. También hay que sumar la incorporación de Javi Moyano en el lateral derecho.

Una línea defensiva totalmente renovada donde destacamos la entrada de los nuevos laterales. Javi Moyano ha sabido aprovechar la oportunidad que le ha dado el míster en la banda derecha ganándose un sitio en el once titular en detrimento de Chica que aún sigue renqueante de sus problemas físicos que arrastra desde la temporada pasada. Respecto al ex lateral del Tenerife, podemos decir que al igual que el equipo ha ido de más a menos cuajando grandes encuentros pero con algunas lagunas defensivas en el último encuentro ante el Huesca.

Algo similar sucede en el lateral izquierdo, aunque para su propio bien, Mario Hermoso no tiene la misma competencia que puede haber en la banda derecha. El lateral cedido del Real Madrid Castilla ha ido de más a menos dejando buenas sensaciones en los primeros encuentros ante Córdoba y Alcorcón demostrando ser un lateral de recorrido sumándose siempre en las jugadas ofensivas. Quizás su “pero” está en el aspecto defensivo donde como hemos podido comprobar sus rivales le buscan las cosquillas dejando serios problemas a sus espaldas. A esto se suma el poco trabajo defensivo que aporta Mojica provocando que la banda izquierda sea una autopista para los adversarios.

Para el próximo encuentro ante el Real Oviedo se viene especulando a lo largo de la semana con un posible cambio de laterales tras los problemas que viene cosechando el Pucela en lo defensivo. Garitano cuenta con diferentes alternativas para dar ese ‘plus’ que tanta falta hace al equipo. La mejoría de Chica puede llevar al técnico violeta a darle la titularidad después de no entrar en los planes iniciales del técnico prácticamente desde el inicio de temporada relegando de esta forma a Moyano al banquillo. Mientras, en la banda izquierda, todo hace indicar que Ángel podría tener su gran oportunidad de salir de la partida teniendo en cuenta las declaraciones del propio Gaizka en la previa del encuentro ya que no va convocado con el Promesas a Ferrol.