Los pupilos de Miguel Ángel Portugal se desplazan este fin de semana a tierras aragonesas para medir sus fuerzas con las del Real Zaragoza, uno de los equipos que se encuentran en un mejor estado de forma en la actualidad en el campeonato doméstico en la categoría de plata del deporte rey a nivel nacional. El conjunto maño atraviesa un gran momento en la Liga Adelante, lo que le ha permitido consolidarse y confirmarse en el inicio de la presente temporada como uno de los máximos candidatos a pelear por el ascenso al Olimpo del balompié español.

Todo lo contrario de lo que ocurre a orillas del Pisuerga, debido a que el Real Valladolid aún no ha sido capaz de enderezar el tormentoso rumbo que arrancó el pasado mes de agosto en su andadura en esta campaña, cuando cayó derrotado por la mínima en el fortín del Córdoba por una obra de arte realizada por Fidel. El cuadro pucelano fue naufragando a lo largo de las primeras semanas de competición de la mano de Gaizka Garitano, un hombre que asumió con decisión la responsabilidad y la misión de devolver al plantel blanquivioleta a la siempre ilusionante Primera División.

El paso de los encuentros sirvió para demostrar y evidenciar las múltiples carencias que padecía este Pucela en su plantilla, algo que parecía haberse paliado instantes antes del cierre del pasado periodo estival de fichajes, pero quedaba claro que faltaban efectivos en todas las líneas del terreno de juego, salvo en la portería. Kepa Arrizabalaga se está convirtiendo en un verdadero líder y héroe para todos los integrantes de la expedición albivioleta, tanto dentro como fuera del campo, pero hay que ser conscientes de que si el cancerbero es siempre el más notable del equipo, no cabe ninguna duda de que hay varias cosas pendientes por mejorar en el entramado colectivo del grupo.

(Foto: Real Valladolid).

Tras una serie de rumores, revuelos, idas y venidas en la ciudad que vio nacer a Miguel Delibes, Carlos Suárez y Braulio Vázquez tomaron una decisión complicada, aunque una buena parte de la parroquia castellana se mostró satisfecha con dicha elección. El presidente y el director deportivo del Real Valladolid consideraron que el tiempo de Garitano en el Nuevo José Zorrilla había llegado a su fin, por lo que le agradecieron los servicios prestados y anunciaron la contratación del siguiente patrón que debía encargarse de liderar el navío pucelano: Miguel Ángel Portugal.

Nuevo técnico, mismas sensaciones

Tres son los partidos que ha dirigido hasta la fecha el míster burgalés al frente del Pucela. Después del último duelo que el ex del Eibar tuvo la oportunidad de preparar desde el banquillo albivioleta, el cual supuso una dolorosa derrota en Palamós contra la UE Llagostera por tres dianas a una, llegaba la hora de que Portugal tomara las riendas y lograra que el camino de la escuadra castellana dejara de estar repleta de curvas bastante agresivas y peligrosas. El optimismo no reinaba precisamente en la capital del Pisuerga, si bien es cierto que la fiel afición vallisoletana no perdía todavía la esperanza y la ilusión de ver a los suyos compitiendo el curso que viene en campos tan emblemáticos como el Santiago Bernabéu, el Camp Nou, el Vicente Calderón, el Sánchez Pizjuán o Mestalla.

Rodri pondría la puntilla justo antes del descanso

La primera prueba de Miguel Ángel Portugal en este Real Valladolid fue un derbi regional castellano en el José Zorrilla contra el Mirandés, un rival que llegaba con la intención de darle un buen susto al ex de Racing de Santander y Real Madrid Castilla, entre otros, en su debut como técnico pucelano. No obstante, el equipo albivioleta cuajó un inicio de choque realmente bueno, de lo mejor que se ha visto hasta la fecha en tierras castellanas, lo que sirvió para encarrilar el envite con un tanto de Juan Villar tras una magnífica triangulación colectiva. Rodri pondría la puntilla justo antes del descanso, aunque el encuentro acabaría con 2-1 en el luminoso para los locales.

Superado el primer escollo de la era Portugal, llegaba el momento de afrontar la asignatura pendiente del Pucela en los últimos años en el panorama futbolístico nacional. Estamos hablando de los partidos que debe afrontar como forastero, donde su rendimiento se reduce de manera considerable en comparación con los partidos que disputa en su feudo. Pese a que el oponente no estaba en un momento anímico muy positivo, más bien todo lo contrario, el hecho de jugar en el Estadio de los Juegos Mediterráneos contra el Almería se antojaba muy difícil para los de blanco y violeta. Mojica fue héroe y villano para los pucelanos, ya que marcó un golazo y erró una pena máxima en los instantes finales de la contienda, al igual que Kepa, que erró en el tanto de Quique y detuvo un lanzamiento de penalti a Chuli. Empate a uno, reparto de puntos y a seguir peleando por acercarse a la zona de playoff en la tabla liguera.

Llegaba entonces el Leganés en el horizonte como próxima estación en la travesía que el burgalés y sus jugadores deberían afrontar en el campeonato doméstico en Segunda, un torneo de la regularidad que, curiosamente, era justo lo que estaba escaseando en territorio pucelano para lograr una mayor estabilidad en la clasificación. Una auténtica montaña rusa es este Real Valladolid, pero no se puede negar que no se vieran destellos positivos frente a los pepineros, aunque al final la suerte no le sonrió a los castellanos y tuvieron que conformarse con un solitario e insuficiente punto como premio. Tablas en el marcador contra los de Asier Garitano (1-1) en el Nuevo José Zorrilla, así que la mentalidad del plantel albivioleta es centrarse única y exclusivamente en la complicada cita de La Romareda frente al Real Zaragoza.

Solidez en casa, igualdad a domicilio

Si decíamos que la tesitura que afronta el Real Valladolid es complicada y poco esperanzadora, todo lo contrario podemos decir sobre el Real Zaragoza. Con un Ranko Popovic que estuvo en la cuerda floja en algún que otro instante de su recorrido en la CCAA de Aragón, el equipo maño se ha asentado, compenetrado y unido para situarse en la segunda posición de la tabla de la Liga Adelante, estando dos puntos por debajo del Córdoba, el líder de la Segunda División española. Los blanquillos se encuentran repletos de confianza y entusiasmo por su actual situación en el presente curso, por lo que va a ser muy difícil que el Pucela saque algo positivo de su visita a La Romareda.

El Real Zaragoza ha ganado cuatro de los seis duelos que ha disputado en su feudo

El Real Zaragoza ha ganado cuatro de los seis duelos que ha disputado en su feudo, además de haber logrado el triunfo en los tres últimos compromisos que ha jugado delante de su gran afición. Deportivo Alavés (1-0), Tenerife (2-0) y Elche (2-0) han sido las víctimas más recientes de los maños en tierras aragonesas, un aspecto que da claros síntomas de que los hombres encabezados por Popovic son un conjunto muy complejo de batir cuando se visten de corto en su prácticamente inexpugnable fortín. Y viendo que el Pucela es uno de los peores equipos que ejercen su condición de visitante, la lógica hace pensar que los tres puntos se quedarán a orillas del Ebro.

Por ponerle una pega al proyecto de Ranko Popovic, al menos en lo que alude a los partidos más recientes lejos de La Romareda, se puede afirmar que su rendimiento baja un poco si lo comparamos con los datos y estadísticas que se observan en su estadio. Aun así, los tres últimos partidos de los zaragocistas a domicilio se han saldado con una victoria y dos empates, ambos a cero, lo que demuestra que es muy complicado hacerle gol a este Real Zaragoza. Por algo es el equipo menos goleado de toda la categoría con siete dianas recibidas. Albacete Balompié (1-3), Girona (0-0) y Mallorca (0-0) han sido los últimos envites del cuadro blanquillo lejos de su hogar, así que, si sumamos los partidos citados anteriormente en casa, únicamente ha encajado un tanto en sus seis últimos compromisos en el campeonato doméstico en la Liga Adelante.

El ambiente sigue estando muy enrarecido en la capital de Castilla, sobre todo porque la situación del equipo no ha mejorado mucho con respecto a lo que podía verse en el comienzo de la campaña de la mano de Gaizka Garitano. Es cierto que el Pucela aún no conoce la derrota bajo la tutela de Miguel Ángel Portugal, aunque también conviene aclarar que el próximo domingo, a partir de las 12:00 horas, visita a uno de los rivales más complicados y competitivos de toda la Liga Adelante.

El Real Zaragoza lleva una racha estupenda como local, ya que ha ganado sus tres últimos partidos en La Romareda, a lo que se debe añadir que el Real Valladolid continúa sin saber lo que es vencer lejos del José Zorrilla. Misión difícil, pero no imposible, la que tiene el conjunto blanquivioleta por delante. La confianza de los maños pondrá a prueba la necesidad de los pucelanos. ¿Quién saldrá vencedor de este apasionante duelo?