Real Valladolid Promesas - Celta B: año nuevo, ¿vida nueva?

El filial albivioleta comenzará el 2016 con la visita del Celta B a los Anexos al Nuevo José Zorrilla, en el que será un duelo entre dos conjuntos que van a tener que pelear al máximo por mantener la categoría, dos equipos que llegan en horas bajas a la primera prueba del nuevo año. No es fácil la tesitura que atraviesan pucelanos y vigueses, pero no cabe duda de que sus aficionados van a mantener intacta la esperanza de llevar en volandas a los suyos a certificar un curso más la permanencia en el Grupo 1 de Segunda División B.

Los pupilos de Borja Jiménez llevan dos derrotas seguidas, cosechadas frente a Pontevedra y Somozas, además de haber perdido los últimos tres encuentros celebrados en la capital de Castilla. Bajo las órdenes del abulense, el Promesas ha disputado nueve envites de la competición de la regularidad, de los que ha vencido dos y ha perdido siete, por lo que es evidente que la subida de Rubén Albés al cuerpo técnico del primer plantel con Portugal se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para los jóvenes jugadores del segundo equipo albivioleta.

Por su parte, el filial celeste no conoce el triunfo desde la decimotercera cita del campeonato doméstico en la categoría de bronce del deporte rey a nivel nacional, momento en el que los gallegos se impusieron al Sporting de Gijón B por la mínima (1-0) en Barreiro. No obstante, los cuatro últimos choques de los pupilos de Torres Gómez, viejo conocido de la parroquia vallisoletana, se han saldado con tres empates y una dolorosa derrota en el fortín del Racing de Ferrol, por lo que los visitantes harán lo indecible para asaltar a su adversario en el campo de los Anexos.

Mala imagen en los Anexos

La escuadra liderada por Borja Jiménez está teniendo serios problemas para obtener algún botín de los encuentros que está disputando en las últimas semanas, una cuestión muy preocupante, sobre todo en aquellas contiendas que tienen lugar en la ciudad que vio nacer a Miguel Delibes. Un plantel como el blanquivioleta debe hacer lo necesario para hacerse fuerte en su guarida, un feudo que ha sido asaltado en más de una ocasión en lo que llevamos de campaña. Si todo sigue así, la tesitura en el filial del club presidido por Carlos Suárez podría ser muy preocupante, sobre todo si el Real Valladolid B se adentra en el pozo del descenso a Tercera.

El Promesas encaraba diciembre con la intención de dejar de lado un mes de noviembre muy complicado

Tras el revés que supuso claudicar en tierras pucelanas contra el Izarra, un rival directo en la pelea por la salvación, el Promesas encaraba el mes de diciembre con la intención de dejar de lado un noviembre realmente complicado, en el que solo había conocido el triunfo en el derbi ante el Atlético Astorga en la capital de Castilla. Borja Jiménez era muy consciente de la importancia de empezar a sumar de tres en tres o, al menos, de lograr algún que otro punto antes de que acabara el año, más que nada porque, de lo contrario, los de blanco y violeta podrían sufrir muchos problemas antes del parón navideño.

Diciembre arrancaría para el Real Valladolid con el desplazamiento a Mareo para medir sus fuerzas con las de otro filial de la competición, en concreto el del Sporting de Gijón, que también iba a estar inmerso en la batalla por eludir el descenso a la Tercera División española. El segundo conjunto albivioleta se llevaría un merecido triunfo después de cuajar un encuentro bastante serio, uno de los más completos de toda la temporada, en el que recuperó la seriedad defensiva que había implantado Albés y recuperó algo de la chispa perdida en su parcela ofensiva para doblegar a los rojiblancos por cero dianas a dos.

Sin embargo, la alegría para el Real Valladolid B por el triunfo frente a los asturianos le iba a durar menos que un caramelo en el patio de una escuela. Los dos últimos envites del año 2015 se iban a saldar con dos desilusiones para los castellanos antes de llegar a las festividades de Navidad, unas vacaciones que iban a ser amargas para el equipo de Borja Jiménez con motivo de los varapalos experimentados contra Pontevedra (1-3) y Somozas (3-0). Por tanto, el Promesas tiene los cinco sentidos puestos en arrancar 2016 con una victoria, tres puntos que le permitirían soñar con una segunda vuelta de la temporada repleta de éxitos y alegrías para sus intereses.

La vuelta del hijo pródigo

No se fue como se hubiera merecido, ya que el club de su vida le negó la posibilidad de disfrutar de la oportunidad que se había ganado con creces. Javier Torres Gómez, técnico del plantel celtiña, regresará a la que fue su casa durante mucho tiempo, tanto en su etapa de futbolista como en los comienzos de su periplo en los banquillos, y lo hará con otro viejo conocido en Pucela: Guille Andrés. Mucha gente de la afición blanquivioleta no entendió la salida del madrileño tras llevar al Promesas a Segunda B en junio de 2014, momento en el que se anunció su salida de la capital de Castilla para que fuera Rubén de la Barrera, actualmente en el Guijuelo, el responsable de coger el timón al frente del filial pucelano.

Pese a ello, Torres Gómez da la sensación de haber encontrado su sitio en el cuadro de Pontevedra, donde ha recalado después de su paso el curso anterior por las filas del Villarreal C. Aun así, el entrenador del Celta B está viviendo un momento complicado en el conjunto vigués, debido a que son cinco las citas del torneo de la regularidad de manera consecutiva que lleva sin lograr los tres puntos con los suyos. Dicha victoria tuvo lugar en Barreiro contra el Sporting de Gijón B, un duelo que se decidió por una diana a cero para el equipo gallego.

De los últimos cuatro encuentros de los vigueses, tres se han saldado con tablas en el marcador, siendo los tres disputados en el fortín de los celestes. El primero de ellos tuvo lugar en el derbi regional contra el Pontevedra, un rival que asaltó los Anexos al José Zorrilla hace relativamente poco por un gol a tres. Los de Torres Gómez consiguieron sacar un punto frente a sus vecinos, por lo que el empate no dejó insatisfecho al míster madrileño. Después vendría el doloroso revés acontecido en A Malata frente al Racing de Ferrol, dado que los locales golpearon con contundencia a su oponente por un apabullante 6-2.

Un empate y siete derrotas es el balance de los gallegos a domicilio

A continuación, llegaría el turno de recibir al Somozas en un nuevo derbi gallego por todo lo alto, aunque el partido no estuvo a la altura de las expectativas generadas. Choque tosco e incluso trabado, donde las ocasiones brillaron por su ausencia, al igual que la salsa del balompié, es decir, los tantos, ya que el resultado gafas campearía en el marcador tras el pitido definitivo del trencilla. En cuanto al último duelo del Celta B en 2015, que tuvo lugar contra el Coruxo en Barreiro, el empate volvería a ser el premio con el que tendría que conformarse el bando celeste al igualar a dos con su adversario del norte de España. Un empate y siete derrotas es el balance de los gallegos a domicilio, por lo que querrán cambiar su fortuna lejos de Vigo este fin de semana en los Anexos.

Convocatorias

Torres Gómez no podrá contar con Peña, ya que está sancionado, ni con Jordan, Fragapane, Samu y De Paz, que se encuentran recuperándose de sus respectivas molestias. Además, Ángel se ha quedado fuera de la convocatoria por decisión técnica, mientras que Borja Fernández ha sido citado por Berizzo para viajar con el primer plantel celeste a Málaga. Por su parte, Borja Jiménez recupera para esta jornada a Renzo y Mayoral, aunque no podrá contar con los lesionados Pelayo y Cristian, junto con la ausencia de Anuar por acumulación de cartulinas amarillas.

Real Valladolid B: pendiente de confirmación.

Celta B: Néstor, Iván Villar, Kevin, Goldar, Diego Alende, Jonathan de Amo, Lucas Olaza, Duclós, Brais Méndez, Pape Cheikh, Guille Andrés, Julio Delgado, Luis Rioja, Rubén Ramiro, Javi Que y Borja Iglesias.