Higinio Marín Escavy, nacido el 19 de octubre de 1993 en Calasparra (Murcia), se ha convertido en la segunda incorporación del Real Valladolid Promesas en el periodo invernal de fichajes, una vez que se confirmó también el traspaso de Jorge Juliá a orillas del Pisuerga tras su periplo por el Huracán Valencia. Por tanto, Borja Jiménez continúa reforzando su plantilla de cara a afrontar lo que todavía queda por delante en la competición de la regularidad en Segunda B, donde se enfrentará el próximo fin de semana al Guijuelo en tierras salmantinas.

De hecho, Higinio llega proveniente del UCAM Murcia, equipo que en la actualidad se encuentra en la tercera plaza del Grupo 4 de la división de bronce del deporte rey a nivel nacional. Se trata de un delantero que va a competir con Caye Quintana y Dani Espinar por hacerse con un hueco en el once inicial del míster abulense, un filial albivioleta que está inmerso de lleno en la pelea por eludir el descenso a Tercera División. Conviene recordar que el murciano llegó a jugar con el cuadro pepinero (Real Murcia) en la Liga Adelante, debido a que es un ariete que se formó en las categorías inferiores de un equipo que estuvo no hace tanto tiempo en el Olimpo del balompié en España.

El fichaje de Higinio Marín servirá para ampliar el elenco de posibilidades de Borja Jiménez en la parcela ofensiva del filial del club presidido por Carlos Suárez, un Real Valladolid B que se está moviendo bastante en el actual mercado de traspasos. El murciano y Juliá se han puesto ya a la entera disposición del míster del Real Valladolid B, mientras que Dani Espinar y Pelayo han protagonizado el capítulo de bajas en el segundo conjunto castellano. El primero llegó a un acuerdo con la entidad pucelana para rescindir su contrato, mientras que el segundo se ha marchado cedido al Cristo Atlético, todo ello con la intención de conseguir los minutos de los que carecían en la ciudad que vio nacer a Miguel Delibes.