Juan Villar y Roger dominan bajo la lluvia

Miguel Ángel Portugal se decantó una semana más por el 4-4-2, aunque introdujo varias novedades en su once inicial. Nikos le ganó la partida a Mario Hermoso, al igual que Borja Fernández y Roger a Pedro Tiba y Rodri, respectivamente. Además, Juan Villar regresaba a la titularidad después de haber estado sancionado durante el encuentro anterior, por lo que el máximo artillero de los castellanos en el presente curso confiaba en poder volver a ayudar a los suyos para sumar los tres puntos en San Mamés. De hecho, el onubense fue el artífice del triunfo de los pucelanos en la primera vuelta en el Nuevo José Zorrilla contra el Bilbao Athletic.

La primera llegada peligrosa del encuentro se produjo antes del minuto 10, momento en el que Santamaría, el pichichi del filial bilbaíno, se quedaría mano a mano con Kepa. No obstante, el remate del ariete vasco fue perfectamente repelido por Kepa, que volvía a casa para enfrentarse al segundo plantel del club al que pertenece. Poco tardaría en responder el Real Valladolid, debido a que Juan Villar, uno de los más talentosos jugadores de la escuadra albivioleta, se internó por el costado diestro, puso el esférico al área y acabó encontrando a Mojica. Aun así, el golpeo del colombiano se perdió muy desviado de la meta custodiada por Remiro.

Los pequeños cachorros seguían demostrando que practican una apuesta futbolística realmente interesante a la par que atractiva, una cuestión que intentarán hacer efectiva durante lo que resta de temporada para lograr la continuidad en la Liga Adelante. Aketxe abrió el cuero al flanco izquierdo, donde Saborit recibió el esférico y lo puso directamente al balcón del área. Juanpe estuvo muy atento y logró despejar la pelota, justo cuando Vesga estaba preparado con la caña para fusilar a Kepa. El propio cancerbero blanquivioleta se vio obligado a intervenir nuevamente minutos más tarde, debido a que realizó una gran intervención tras un zapatazo de Santamaría.

Los porteros se lucen en San Mamés

A pesar de todo, el conjunto presidido por Carlos Suárez no se amilanó e hizo alarde de lo que es capaz cuando se asocian sus integrantes de mayor potencial. Roger aguantó el cuero a la perfección, se giró y dio un taconazo para asociarse con Rennella, con quien ha reconocido en rueda de prensa que se entiende muy bien en los entrenamientos. El pase del valenciano fue muy preciso, al igual que la galopada del franco-italiano, aunque su chut sutil fue bien despejado por un Remiro que también quería unirse a la fiesta de paradas meritorias de los cancerberos en San Mamés.

El duelo se encontraba en una fase de igualdad e intensidad máximas, un aspecto que trataría de aprovechar el Bilbao Athletic por medio de Etxeberria. El futbolista del cuadro vizcaíno se zafó de los adversarios que le salieron a su paso, pero su disparo fue a parar mansamente a las manos de un Kepa que estaba estupendamente colocado. A continuación, sería Juan Villar el que, por enésima vez, se adentraría por el costado diestro para hacer gala de su profundidad y sus múltiples cualidades por dicha demarcación. Su envío fue directo a las botas de Mojica tras un fallo de la defensa, aunque el colombiano se topó con el lateral de la red.

El premio a la constancia le acabaría llegando al Pucela superada la media hora de juego

El premio a la constancia le acabaría llegando al Pucela superada la media hora de juego, instante en el que se asociaron Rennella, Juan Villar y Roger en una triangulación perfecta que pilló desprevenida y algo dormida a la zaga bilbaína. El pistolero de los castellanos se adentró en el área para encarar a Remiro, a quien batió con un disparo cruzado que se coló en el fondo de las mallas de la meta vasca. Los visitantes se soltaron y cogieron confianza con la diana del '23' de los suyos, como pudo verse en una acción que dispuso Villar por la diestra, si bien es cierto que su chut se perdió por encima del travesaño.

El Pucela empieza a gustarse

Los instantes finales del primer acto se caracterizaron por el dominio del equipo blanquivioleta en el terreno de juego, especialmente por la inyección de moral que había significado el gol transformado por Roger. Juan Villar, uno de los más destacados de los suyos en los 45 minutos iniciales, completó una pared extraordinaria con Mojica para permitir que el hombre cedido por el Rayo Vallecano se plantara en solitario con Remiro. Aun así, el cafetero fue incapaz de superar al arquero de los bilbaínos, aunque una buena parte de la marea vallisoletana reclamó una posible pena máxima sobre su jugador que no fue decretada por el trencilla.

El Cuco Ziganda decidió mover ficha en el descanso y apostó por realizar un doble cambio de cara a afrontar con garantías la segunda mitad. Saborit y Santamaría fueron los damnificados por la decisión del míster del filial rojiblanco, al tiempo que Seguín y Villalibre, respectivamente, fueron los encargados de ocupar sus puestos en el campo. Por desgracia, el Bilbao Athletic se vio obligado a quemar sus cartuchos en el minuto 50, debido a la lesión de Undabarrena después de un choque totalmente fortuito con Juan Villar. Jurgi fue el responsable de saltar al tapete verde para sustituir al '8' de los jóvenes leones.

Los cambios en el esquema de los bilbaínos provocaron que Ramalho tuviese que modificar su posición a la de lateral diestro, donde realizó alguna que otra arrancada que puso a los pucelanos con el corazón en un puño. En una de ellas, ninguno de sus contrincantes pudo arrebatarle el esférico, lo que permitió que el zaguero rojiblanco fuera ganando metros para aproximarse a los dominios de Kepa. Su esfuerzo le causó factura, debido a que llegó algo forzado, por lo que su tiro fue atajado sin demasiadas complicaciones por el cancerbero de los de blanco y violeta.

Para desgracia de los aficionados al mundo del deporte rey, el juego se fue trabando con el transcurso de los minutos en San Mamés. El cronómetro corría en contra de los locales, que tenían el hándicap de haberse quedado sin refuerzos desde el banquillo, mientras que Portugal todavía no había llevado a cabo ningún cambio en las filas del Pucela. Rennella disfrutaría de una buena oportunidad para haber intentado batir a Remiro y colocar el 0-2, pero Ramalho estuvo muy atento y pudo alejar el peligro del área vizcaína.

Roger y Juan Villar, dupla de oro albivioleta

El Real Valladolid seguía sin renunciar a buscar la portería bilbaína, todo ello a través de una serie de combinaciones de sus componentes de la parcela ofensiva, es decir, Juan Villar, Mojica, Roger y Rennella. Un envío del onubense desde el perfil diestro en busca de uno de los dos puntas de los castellanos fue interceptado por Remiro, quien estaba mostrándose muy seguro en todo momento, además de no haber podido hacer nada en la primera parte por evitar el tanto de los pucelanos. Posteriormente, sería Nikos el que realizaría un centro medido desde la izquierda, aunque la jugada no pudo acabar en buen puerto.

Por su parte, el filial del Athletic Club de Bilbao no quería tirar la toalla, especialmente porque quería dar una nueva alegría a su afición tras el triunfo de la pasada jornada en el archipiélago balear por dos tantos a tres ante el Mallorca. Villalibre, que fue el elegido por Ziganda para reemplazar a Santamaría en el entreacto, se zafó con mucha clase de la marca de los centrales de los castellanos, ambos con cartulina amarilla. De todos modos, su disparo desde fuera del área fue bien visto y tapado por Kepa, quien tan solo tuvo que dejar que el cuero se marchara directamente fuera.

La primera sustitución del conjunto albivioleta sería obligada por las molestias de Moyano

La primera sustitución del conjunto albivioleta sería obligada por las molestias de Moyano, que dejó su hueco en el césped a Chica para el tramo decisivo de la contienda. Igualmente, el técnico burgalés cambió un cromo por otro al poner a Rodri y Guzmán en detrimento de Rennella y Mojica, respectivamente, mientras que los bilbaínos pretendían llegar a los dominios de Kepa sin demasiado éxito. Un centro desde la izquierda concluyó con un testarazo de Ramalho, aunque no fue capaz de encontrar la portería de un Pucela que estaba un poco embotellado.

Los locales lo intentaron con más corazón que cabeza en los minutos finales, pero los tres puntos iban a parar al zurrón vallisoletano. El plantel encabezado por Miguel Ángel Portugal retomaba la senda del triunfo tras dos empates a cero consecutivos, una cuestión que le iba a dar mucha confianza para seguir luchando por hacerse con una de las plazas que permiten estar el próximo curso en el Olimpo del deporte rey a nivel nacional. En cuanto al Bilbao Athletic, acumula de esta manera su quinta derrota de la campaña en San Mamés, todas ellas por la mínima (0-1).

Puntuaciones del Real Valladolid