En la Junta de Accionistas del Real Zaragoza se reflejó un importante vacío de poder (se ausentaron tanto Agapito Iglesias, máximo accionista del club, como Fernando Molinos, presidente en funciones y también miembro del Consejo de Administración). Tuvo que ser Paco Checa el que ejerciera de presidente dada la situación. Algo insólito que nunca había ocurrido desde que el Real Zaragoza se transformara en Sociedad Anónima Deportiva en el año 1992.

Paco Checa se vio obligado a justificar la ausencia de Agapito Iglesias y de Fernando Molinos debido a “motivos personales”. La mesa del Consejo de Administración, finalmente, estuvo conformada por Paco Checa (secretario general), José Guerra (director financiero) y por Luis Carlos Cuartero (consejero). La asistencia fue de 1.837.168 acciones, lo que viene siendo el 91,83% de la masa social.

Pérdidas de casi un millón de euros

Antes de comenzar por los puntos del día, Paco Checa quiso agradecer a todos los abonados por el “gran esfuerzo realizado a lo largo de la pasada temporada”. “Los consejeros que aquí estamos nos hacemos partícipes del dolor que produce el descenso a Segunda División”, apostilló.

Guerra: "Estoy satisfecho con las cuentas; o cómodo, cuando menos" El primer punto del día correspondía a la aprobación de las cuentas. El director Ffinanciero, José Guerra, se mostró “satisfecho, cuando menos cómodo”, respecto a las cuentas presentadas ante los accionistas de la SAD.

En la temporada 2012/2013 se han producido unas pérdidas de 921.674 euros. En un principio, el club no esperaba entrar en números rojos en dicho ejercicio contable, pero en el mercado invernal se vio a obligado a reforzar la plantilla (fichó a José Fernández y logró las cesiones hasta junio de 2013 de Bienvenu, Rochina, Carmona y Rodri), lo que aumentó los gastos previstos.

En su totalidad, la cifra de negocios alcanzó los 33,2 millones de euros, siete más que en la temporada 2011/2012. De éstos, 24 millones pertenecen al contrato televisivo firmado con la plataforma televisiva PRISA.

 

Además, se redujeron los costes, tanto de la plantilla deportiva (casi un millón de euros), como la plantilla no deportiva (reducción de 3,6 millones gracias a la destitución de empleados del club como Pedro Herrera, Antonio Prieto, Luis Costa, Manolo Nieves y Juan Eduardo Esnáider). Además, aumentaron los ingresos de explotación por 1,9 millones de euros gracias a la venta de futbolistas (Aranda y Héctor Otín) y por el cobro de variables de los traspasos de Ander Herrera y de Pennant.

Pero los datos generales siguen arrojando pesimismo. Al  epígrafe de las pérdidas en casi un millón de euros, se le suma el aumento de la deuda neta a unos 113 millones de euros (de los cuales, 100 millones se encuentran regulados en los pagos derivados del concurso de acreedores), mientras que los gastos corrientes y los pagos de servicios exteriores (son los costes generados directa o indirectamente por el proceso concursal como los costes por asesoría, costes jurídicos, de gestión, etc) suponen unos 10 millones de euros. A pesar de todo, José Guerra aseguró que el Real Zaragoza es “viable”.

Respecto al polémico caso de la Finca de La Almunia, Guerrá comentó que “se está negociando un calendario de pagos con ADL Technology”, empresa que cedió dicha finca al Real Zaragoza como supuesto aval ante Hacienda por 1.225.000 euros. Hay que recordar que esa operación fue revocada por los administradores concursales.

Finalmente, las cuentas fueron aprobadas por 1.824.000 acciones a favor, 6.680 en contra y 320 abstenciones.

El Real Zaragoza B se llamará Real Zaragoza Deportivo Aragón

El segundo punto del día correspondió al cambio de denominación del filial del Real Zaragoza. Antes de la consulta a los accionistas, Paco Checa quiso aclarar que el nombre elegido debería ser Real Zaragoza Deportivo Aragón en lugar de solamente Deportivo Aragón por una cuestión de legalidad frente a la Federación, sobre todo para que sea dependiente del primer equipo del Real Zaragoza, ya que el Deportivo Aragón de antaño no era dependiente de la primera plantilla y era solamente un equipo filial (el Juventud).

Los accionistas dieron un respaldo absoluto a la propuesta. También se recogieron algunas propuestas, como que el Deportivo Aragón jugara sus partidos en La Romareda.

Cambio de auditores y turno de ruegos y preguntas

La Junta de Accionistas aprobó el cambio de auditor del club. De esta forma, Juan Francisco Morellón Bernar sustituirá a Luis Ruiz-Apilánez Mehave en las próximas tres temporadas, siendo la empresa Auditum-Auditores SL la auditora suplente.

Posteriormente, llegó el turno de ruegos y preguntas. La mayoría de los accionistas coincidieron en un punto: el malestar de que no se encontrara presente el máximo accionista del club, Agapito Iglesias.

 

García Sanjuán: "Esta Junta me parece una auténtica farsa" Javier Láinez preguntó a los tres consejeros presentes si se sentían “preparados” para sacar adelante al Real Zaragoza, respondiendo Paco Checa que “por supuesto”. Otro accionistas minoritario propuso que los tres consejeros trataran de que Agapito cediera una parte de sus acciones, bien a un comprador o bien mediante una hipotética ampliación de capital para que la SAD se volviera más participativa. Y les propuso tanto a Checa, Guerra y a Cuartero que, si no lo consiguen, dimitieran de sus cargos.

Por su parte, Daniel Marcén del Movimiento Avispa, criticó la ausencia de Agapito Iglesias y lamentó que nadie del club se haya disculpado aún del último descenso: “Acudía a esta Junta con la esperanza de que desde la SAD se tuviera la decencia de pedir perdón, al menos, por el descenso del equipo a 2ª División, aunque fuera con 6 meses de retraso. Ya veo que mi esperanza era en vano”.

Aunque, sin lugar a dudas, el más crítico de todos fue el exjugador zaragocista y accionista Jesús García San Juan. “Sinceramente, esta Junta me parece una auténtica farsa. Y me duele que Paco y Carlos estén en esa mesa”, comentó.