Desde que Agapito Iglesias llegó al club aragonés se están sucediendo una serie de operaciones que están llevando al Real Zaragoza a endeudarse cada vez más y con diferentes instituciones y clubes. Según informa el Periódico de Aragón, en este caso es la FIFA la que ha establecido que el Real Zaragoza tendrá que abonar 486.000 euros por el jugador Diego Estrada, y otros 20.000 por las costas del proceso legal. El jugador llegó en febrero de 2011 y jugó doce partidos con el filial zaragocista, anotando dos goles. En enero de 2012 se marchó, sin ni siquiera haber debutado con el primer equipo.

El Alajualense, equipo del que procedía Diego Estrada, decidió denunciar al Real Zaragoza, tras negarse el club aragonés a pagar los derechos de formación del jugador (580.000 euros). El equipo maño tiene la intención de apelar esta resolución, aunque son conscientes de que en estos casos el máximo organismo internacional no suele dar marcha atrás, y solo les quedaría recurrir al TAS.

El Real Zaragoza entiende que el pago de esta cantidad está incluído en el concurso de acreedores, por lo tanto se reduciría al 50% y a pagar en ocho años, tal y como se estableció cuando el conjunto aragonés salió del concurso. Al encontrarse el equipo en Segunda División ese convenio está suspendido hasta 2016, o hasta que el equipo ascienda.

El jugador costarricense llegó al club con Antonio Prieto, como Director Deportivo del Real Zaragoza, y con Javier Aguirre de entrenador, pero fue Agapito quién realizó las negociaciones de ese fichaje. A los dos meses de haberlo fichado, el máximo accionista quiso rescindir su contrato porque consideraba que el representante no le había avisado de que tendría que pagar sus derechos de formación si quería ficharlo. Una vez más, el máximo accionista del Real Zaragoza realizó otro desembolso en un jugador que no aportó lo que se esperaba de él.