Visitaba el Real Zaragoza B el campo de L'Hospitalet con la imperiosa necesidad de sumar los tres puntos y huir del último puesto de la tabla. Y a punto estuvieron de conseguirlo, tras completar un buen partido que se vio empañado en el último minuto, cuando el colegiado pitó un penalti muy dudoso que convirtieron los catalanes para colocar en el marcador el 2-2 final.

El Real Zaragoza B golpea primero

Con un césped prácticamente impracticable, saltaron ambos equipos al terreno de juego. La lluvias caídas durante todo el día impedían que el balón rodase con facilidad y, por tanto, el buen juego era inexistente. Pese a ello, en una jugada a balón parado en el minuto cinco, Bonilla conseguía rematar el fondo de las redes para poner el 0-1.

Ante ese primer tanto, los catalanes reaccionaron e intentaron generar peligro sobre la portería defendida por Víctor Ibáñez. En el minuto 20, llegó la primera acción de verdadero peligro, cuando el meta zaragocista tuvo que emplearse a fondo para detener un disparo de David Haro.

Sin embargo, cuando se llegaba a la media hora de juego, L'Hopitalet consiguió el premio del empate. Un indecisión de la defensa aragonesa, servía a Rubén Alcaraz para llevarse el balón y marcar a puerta vacía. El empate volvía al marcador y tocaba empezar de nuevo.

Con la igualada, el equipo local empezó a dominar el balón todo lo que era posible dadas las malas condiciones del césped. Pese a ello, las ocasiones no eran demasiado claras y ninguno de los dos conjuntos daba sensación de peligro, hasta que en el minuto 44, la oportunidad se decantó para el bando aragonés. Una entrada de José dentro del área era señalada como penalti, que tranformaría Diego Suárez instantes después para dejar a su equipo marcharse al descanso con ventaja.

Desconexión catalana que los maños no aprovechan

Tras el descanso, el filial zaragocista salió más enchufado que el rival. L'Hospitalet no conseguía hilar las jugadas, este hecho beneficiaba a los hombres de César Lainez, que lo intentaban de todas las maneras.

Nada más comenzar la segunda mitad los maños dispusieron de tres claras ocasiones. En la primera, Kilian Grant enviaba un centro que se paseaba por el área pequeña sin encontrar rematador. Poco después, era Nacho Lafita el que llevaba el peligro tras ejecutar una falta que se envenenaba y se convertía en córner, en el que Jorge Guti a punto estaba de anotar el tercer, esta vez de cabeza.

Pese a los numerosos intentos zaragocistas, el gol de la sentencia no llegaba, y fueron los locales los que empezaron a aprovecharse de algunos fallos defensivos. Un Víctor muy activo desbarató hasta dos claras ocaciones de gol en apenas 10 minutos, cuando David Haro e Iván Carril se lanzaron hacia la portería visitante con convicción.

Castigo inmerecido para el Zaragoza B

En los últimos minutos de partido, L'Hospitalet lo intentaba con todo, pero el conjunto catalán no mostraba acierto en los metros finales. Por aquel entonces, los maños achicaban las llegadas, pero nada pudieron hacer cuando cumplido el tiempo de añadido (cinco minutos), el árbitro señalaba un dudoso penalti a favor de los locales. Además, expulsaba a Nacho Lafita por dirigirse a su asistente en términos de "¡Vaya robo, vaya robo!".

Los maños aún podían salvarse y regresar a Zaragoza con los tres puntos, pero esta vez David Haro no fallaba y mandaba el balón al fondo de las redes desde los 11 metros, para dejar un punto en feudo catalán y el mal sabor de boca a un conjunto aragonés que mereció ganar.