El mundo del zaragocismo siempre recordará aquella final de la Copa del Rey, un 17 de marzo de 2004 en Montjuic frente a 'Los Galácticos' del Real Madrid. Corría el minuto 5 de la segunda parte de la prórroga, el partido se iba a decidir en los penaltis, pero aquella jugada iba construir una leyenda. Movilla conduce el balón, la deja atrás para Galletti y este lanza un zambombazo desde fuera del área que introduce la mítica roteiro en la portería de César; la sexta ya era zaragocista.

Un villano "diferente"

Cogiendo el testigo de su padre, Rubén Galletti, y los de su ídolo, Rubén Capria 'El Mago', nuestro protagonista también se vestiría de corto. Luciano debutaría en 1997 con Estudiantes de la Plata, equipo donde se había formado como futbolista pese haber pertenecido a las categorías inferiores del Tolosano. Tras su debut contra Lanús en el que salió derrotado, Vélez fue la primera víctima de los goles del platense, Argentina ya veía como se estaba forjando el entrañable jugador; sin embargo, no permanecería mucho tiempo con los 'pincharratas'.

A finales de 1999 su intento de irse al Parma se esfuma, convirtiéndose así en una cesión al Napoli con opción de compra. Consigue el ascenso de categoría al Calcio italiano con el club napolitano, que no hizo uso de su opción debido a una pésima situación económica. Luciano tardaría seis meses en volver a Estudiantes en la temporada 2000/2001. Disputó 28 partidos marcando nueve goles, destacando como una de las piezas mas sólidas del equipo.

Muchos equipos ya deseaban hacerse con los servicios de la joven promesa y entre ellos, un Real Zaragoza que ya contaba con figuras compatriotas del argentino como Pablo Díaz, el 'Toro' Acuña (nacido en Buenos Aires pero nacionalizado Paraguayo) o Gastón Montenegro "Rolfi". Su fichaje por el conjunto aragonés fue bastante sonado y cuanto menos interesante debido a la ley argentina de 'Patria Potestad'. Esta ley consistía en que el padre de un menor de 21 años en Argentina, puede dar la negativa a que su hijo se convierta en trabajador profesional, por esta razón, Galletti podía haber firmado gratis su contrato con el club aragonés o con el italiano años atrás. Sin embargo, Luciano no lo hizo y el Zaragoza tuvo que pagar 5 millones. Un 'Hueso' duro de roer llegaba a la capital aragonesa.

En el mercado veraniego de 2001 certificaba su regreso a Europa, aunque esta vez no cruzaría el Mediterráneo. El delantero argentino pasaría a jugar de extremo en un Zaragoza plagado de jugadores importantes. Acompañaría a Milosevic y Juanele en la línea ofensiva. Buen equipo el que había formado el club maño entrenado por Rojo que en cambio, descendería de categoría.

Debutó un 26 de agosto con derrota por 2-1 en casa del Espanyol. Galletti no comenzó con buen pie y los blanquillos bajarían a Segunda División junto a los dos conjuntos canarios, quedando en la última posición con 37 puntos. En la temporada siguiente el equipo dirigido por Paco Flores recuperaría la categoría. Esta vez, el argentino firmaría una buena campaña jugando casi todos los partidos y marcando 8 goles. Los años siguientes estarían cargados de éxito y se convertiría en un ídolo para la afición zaragocista.

Temporada de ensueño

Hace nada más y nada menos que diez años de la última temporada en la que el Real Zaragoza, siendo fiel a su historia, se colocaría entre los grandes de España. La Copa del Rey, con su respectiva clasificación a Europa y la Supercopa de España se sumarían al palmarés blanquillo tras vivir unos años difíciles. Para Galletti, esta temporada cambiaría su vida, y con ella la de los aficionados maños. El rumbo del zaragocismo recuperaría el lugar que merecía en la historia.

La temporada 2003/2004 transcurría de manera normal en Liga, el Zaragoza no ocupaba puestos de descenso y los partidos de copa ilusionaban a la afición. El conjunto aragonés cerraría su campaña liguera con 48 puntos en el puesto 12ª; mediocre actuación que no empañaría las portadas deportivas. Mirandés, Salamanca, Betis, Barcelona y Alavés fueron las víctimas arrolladas por un Zaragoza que llegaba a la final de Copa y se enfrentaría al Real Madrid.

El equipo merengue precisaba de una galaxia compuesta por estrellas como Raúl, Roberto Carlos, Zidane, Figo, Beckham o Ronaldo Nazario. Una gran plantilla con espectativas de arrasar y que 'El Hueso' en media hora iba a desmantelar.

Una avispa en las estrellas

De manera inesperada Víctor Muñoz dejaba en el banquillo al 7 argentino en la final, lo que le hacía ser el revulsivo en un partido igualado en casi todos sus tramos. Galletti entraba al campo en el minuto 60 sustituyendo al autor del primer gol zaragocista, Dani. El encuentro estaba empatado con dos tantos para cada finalista, Cani y Guti dejaban con un hombre menos a los equipos para la disputa de la prórroga. "Ganar era imposible, por suerte en el fútbol no existen los imposibles" aseguraba el argentino 6 años después de esa noche.

"Las cosas en el fútbol, suceden", el zaragocista platense era el encargado de convertir lo imposible en un hecho. Corría el minuto 110 cuando la diestra de Galletti pasaba por encima del Madrid para llevar la Copa a Zaragoza. La "épica de Nayim" volvía a dar su zarpazo.

"Ese gol me ha marcado" aseguraba el argentino, que ya se había hecho un bonito hueco en la historia del Real Zaragoza. Así es como relataba el momento Galletti:"Movilla me dejó el balón y yo golpeé. En un momento parecía que se iba a ir hacia fuera, pero luego hizo una comba hacia dentro. A partir de ahí fue una explosión de alegría".

Los éxitos con el Real Zaragoza no acababan aquí, y en la temporada siguiente el conjunto aragonés se hacía con la Supercopa de España del 2004 tras ganar la eliminatoria frente al Valencia.Esta vez, Galletti volvería a acaparar protagonismo siendo uno de los goleadores de la final contra el campeón de Liga. Ese año, la UEFA era una de las novedades en la capital del Ebro y se vivía con fervor. El argentino no defraudó y realizó auténticos partidazos. En total, Galletti jugó 135 partidos con el Real Zaragoza convirtiendo 15 goles, no muchos pero sí importantes.​

La carrera continúa

Es evidente que Luciano estuvo muy cómodo en Zaragoza y siempre recibió el cariño y apoyo de los aficionados. También, encontró un gran apoyo en su compatriota Gaby Milito, quien aseguró que "Galletti es uno de los mejores delanteros con los que he jugado". Según declara su mujer, Sole, Luciano fue muy feliz en Zaragoza, quizá donde más. “El día que nos marchamos lloró y yo he visto muy pocas veces llorar a Luciano”.

Galletti abandonaba las filas zaragocistas en 2005, firmando su fichaje por el Atlético de Madrid, donde disputó 66 partidos y marcó 5 goles. Su paso por el Manzanares no hizo mucho ruido y fue vendido por la cifra de 2,5 millones de euros a Olympiacos en 2007. Grecia le recibiría con los brazos abiertos donde también se convertiría en un ídolo para la afición.

Luciano empezaba una aventura de lo más exótica en el fútbol griego, "aquí se vive el fútbol de manera diferente" aseguraba el recién incorporado. Firmaba para 4 años con el equipo de Piraeus que debido a su fabuloso redimiento renovaría con los "Thrylos" hasta 2013. Galletti ganó la Supercopa griega en 2007, 2 Super Ligas griegas en 2008 y 2009 respectivamente y 2 Copas de Grecia en los mismos años. La apasionada hinchada "Kokkini" tardó muy poco en ofrecer su cariño al argentino gracias a sus goles y trabajo. Además, cumplió uno de sus sueños, debutar en Champions. Reto que se le dio bastante bien y pudimos volver a verle marcar goles al Madrid entre otros.

Las botas de Luciano también jugaron con la selección albiceleste. Fue internacional con Argentina en 13 ocasiones. Hay que destacar la fecha del 26 de marzo de 2005 en las eliminatorias del Mundial de Alemania 2006; Argentina ganó 2-1 a Bolivia y cortó una racha de 32 años sin victorias en La Paz. Castillo abrió el marcador para el local, Figueroa empató y Galletti le dio el triunfo al elenco de Pekerman. Por otro lado, jugó la Copa Confederaciones en 2005.

Para disfrutar de las mejores actuaciones de Galletti con la selección hay echar la vista atrás. Fue campeón y máximo goleador con 9 tantos en 8 partidos en el campeonato Sudamericano Sub 20 que se jugó en Mar del Plata. Entre otras figuras estuvieron el brasileño Ronaldinho o el uruguayo Forlán. También disputó el mundial de Nigeria.

"Piedras" en el camino

Galletti se toparía con la mala suerte en 2010, una insuficiencia renal trastocó los planes del argentino. El delantero venía de jugar tres partidos seguidos con Olympiacos y su médico le dijo que habían salido mal unos análisis. Un virus en el riñón, que ya había aparecido muchos tiempo atrás pero que por suerte se había frenado, volvía a brotar trece años después. Luciano estaba en uno de sus mejores momentos de su carrera: había renovado hasta 2013, ganaba títulos y hacía muchos goles; sin embargo, los médicos recomendaron su retirada de los terrenos de juego. Con 32 años, Galletti se sometió a un trasplante de riñón en una clínica de Buenos Aires en octubre de 2012. El donante fue su padre, que también había sido deportista y las opciones de que todo saliera bien eran muy altas.

"Siempre pensé que podía jugar, pero los médicos me dijeron que deje el fútbol para no correr ningún riesgo. Por ejemplo, mi último partido lo jugué con casi 20 de presión, pero no lo sentí. Me podría haber pasado algo jugando el partido, pero yo no tenía síntomas", explicaba Galletti en una entrevista para Rock and Pop. "Ya me ofrecieron entrenarme en Estudiantes y Zaragoza, pero lo más importante es que en este momento se acuerden de uno" agradecía Galletti una vez operado.

Tras recibir el alta, comenzó su recuperación en Estudiantes de la Plata, club donde Galletti cumpliría un sueño si colgara allí las botas. Zaragoza y otros clubs también ofrecieron sus instalaciones y servicios a Luciano para que tuviera una pronta y eficaz recuperación pero decidió realizarla en su tierra. Sin embargo, el entrenador pincharrata, Mauricio Pellegrino, no contó con sus servicios para la temporada y el argentino volvió a Grecia. Galletti llegó al Ofi de Creta en una sorprendente y buena forma física, había ganado el partido más difícil de su carrera. La carrera del jugador está dando sus últimos coletazos en el Club Atlético Carlos Casares del fútbol amateur argentino.

"El Hueso hasta la médula"

Futbolista, aventurero, humilde y también escritor. Galletti relató los mejores momentos de su vida en un libro biográfico de lo más entrañable. En su regreso a Zaragoza para la presentación de su libro, aseguró que le encantaría volver a la capital maña; sueño de él y de todo el zaragocismo.