El Real Zaragoza de Popovic ha comenzado el año con derrota. Era su quinto partido en el banquillo zaragocista y estaba exento de derrota, hasta ayer. El conjunto vallisoletano salió a darlo todo y en quince minutos finiquitó el partido con dos tantos del ex zaragocista Óscar González.

Un duelo de históricos, pero que no dejó de tener jugadas muy polémicas que pudieron influir en el resultado. El colegiado De Burgos Bengoetxea del comité vasco no tuvo un partido fácil de arbitrar. Gran culpa de ello la tuvieron los asistentes que no estuvieron muy acertados con los fuera de juego. El primer gran error el segundo gol de Óscar González:

Foto: captura del vídeo-resumen de la Liga Adelante

"Nunca tenía que haber subido al marcador por estar en claro fuera de juego", afirma rotundamente Bueno Grimal. El asistente concedió el gol al creer que el balón que recibía Óscar era del rival que rompía ese fuera de juego, pero en las imágenes se puede ver como recibe el balón de su compañero. En la imagen no se aprecia la jugada en la que el balón que recibía era de su propio compañero, pero sí se puede ver que en todo momento el jugador se encontraba en posición antirreglamentaria.

El segundo gol no debería haber subido al marcador por fuera de juego

Una jugada que también dio mucho de qué hablar fue la mano de Álvaro Rubio en el área. Los jugadores pedían penalti, pero el colegiado no señaló nada y continuó el juego. Bueno Grimal considera que acertó porque viene rebotado del cuerpo. Pero sin duda una de las jugadas que más enfurecieron a la afición zaragocista fue un agarrón a Galarreta que quedó impune:

Foto: captura del vídeo-resumen de la Liga Adelante

Grimal lo tiene claro: "Debió sancionar con penalti y expulsión por ser ocasión manifiesta de gol".

Continuaron los errores arbitrales para el conjunto aragonés y esta vez el linier anulaba un gol de Borja Bastón por fuera de juego. Bueno Grimal afirma que no acertó, ya que por centímetros no estaba en posición antirreglamentaria:

Foto: captura del vídeo-resumen de la Liga Adelante

Un arbitraje muy polémico y difícil en un partido entre dos rivales que necesitaban la victoria. "Lo encontré falto de criterio. Debió cortar el juego alguna vez y no conceder la ventaja para sancionar disciplinariamente. Hubo jugadas que lo requerían", asegura Bueno Grimal. Por todo ello, el ex árbitro no puede dar más que un 6,5 ante un arbitraje con tantos errores.