El Real Zaragoza no ha podido sacar un buen resultado frente a Las Palmas y ha caído en el Estadio de Gran Canaria por 5-3 en un partido que se ha decidido en la segunda mitad. Los fallos defensivos le han vuelto a costar caros a los de Popovic, que han llegado a ir perdiendo por 4-1. Las expulsiones de tres jugadores locales dieron algo de emoción al final, pero los puntos se han quedado en las islas.

Ranko Popovic introdujo varias novedades en el once inicial, aunque la principal se produjo en la portería con el debut de Bono en lugar de Whalley, que se veía doblegado al banquillo. El serbio decidía también mantener a Lolo en el centro de la defensa y Basha era titular por primera vez con el equipo acompañando a Dorca y dando mayor libertad a Galarreta. Jaime Romero también le ganó la partida a Álamo para aprovechar su velocidad.

Igualdad en la primera parte

Los dos equipos empezaron con las ideas muy claras el partido, ejerciendo una alta presión que hacía que se produjeran continuas imprecisiones y costara generar oportunidades. Los locales fueron los primeros en avisar con una cesión de Pedro a Bono, que cogía con las manos. El saque de falta, tras un rechace, termina por encima de la portería. Los maños no se amedrentaron y, tras una buena combinación entre Jaime y Pedro, el centro de éste era despejado por la zaga. Ninguno de los dos conjuntos tenía el control del partido, pero los locales demostraron la razón por la que lideran la clasificación a los diez minutos. Un centro desde tres cuartos del campo del conjunto aragonés lo recogió Araujo, aprovechándose de la permisibilidad de la defensa, controló con el pecho y, de primeras, la puso en la cepa del poste haciendo estéril la estirada de Bono.

Este gol dejó tocado al Real Zaragoza, que veía como en la primera aproximación con peligro del rival ya iba por debajo en el marcador. Los canarios, por su parte, dieron un paso hacia delante y, aunque no creaban oportunidades, si tenían un mayor dominio del juego. Pero los aragoneses no se iban a rendir tan fácilmente y, aprovechando un rápido saque de una falta de Lolo en campo aragonés, Borja Bastón realizaba un magnífico control y, mano a mano ante el portero, la cedía para que Pedro Sánchez la empujara en boca de gol para que estableciera el empate a los quince minutos de juego.

Las Palmas se adelantó por medio de Araujo, pero los maños reaccionaron rapidamente e igualaron el partido

Los locales reaccionaron inmediatamente a este gol y monopolizaron la posesión y dominio del juego. El Real Zaragoza se vio obligado a dar un paso atrás y buscar la velocidad de los atacantes, especialmente la banda de Jaime. El jugador cedido por  el Udinese llevó el mayor peligro de su equipo, y lo intentó en dos ocasiones, primero con un centrochut que se introducía en la portería y, posteriormente, con un disparo lejano tras un gran control con el pecho, pero en ambas Casto intervino con éxito. Esto no influyó al conjunto de Paco Herrera, que tuvieron la mejor oportunidad para volverse a adelantar gracias un pase al espacio de Araujo para Nauzet Alemán que, solo ante el portero, la picaba ante la salida de Bono pero no conseguía engañarle y la paraba en dos tiempos.

Los fallos defensivos condenan a los de Popovic

Las Palmas empezó con mucha intensidad la segunda parte, teniendo claro que el único objetivo era la victoria, algo que demostraron a las primeras de cambio. Tan solo habían pasado dos minutos cuando un balón en largo de la defensa a Araujo en el que Lolo tenía ventaja la perdía casi en la línea de fondo tras una entrada del argentino y, mientras Lolo se dolía en el suelo pidiendo falta, su centro llegaba a Nauzet que, de volea, la cruzaba y hacía imposible el intento de Bono por detenerla.  Este tanto afectó a los de Popovic, que no conseguían hilar pases con precisión, algo que aprovecharon los locales. En el minuto 55, un lanzamiento de falta desde el centro del campo lo paraba Marcelo Silva y, a la media vuelta, se sacaba un fuerte disparo que perforaba las redes de la portería.

El técnico serbio se vio obligado a cambiar algo en el equipo para buscar una reacción e introdujo a Álamo en lugar de Basha, pero la fragilidad defensiva se volvió a hacer patente nada más producirse esta sustitución. Una buena combinación en tres cuartos del campo aragonés hacía que el balón llegara a Nauzet que, desde la derecha, ponía un centro raso que pasaba entre las piernas de Lolo y Araujo, a placer, ponía el 4-1.

Las Palmas termina con ocho

Cuando el partido parecía visto para sentencia, llegó la polémica al Estadio de Gran Canaria. A falta de 15 minutos, Nauzet Alemán veía la roja directa al zancadillear a Lolo, algo que el árbitro consideró como agresión. Empezó así una tangana en los banquillos que finalizó con dos expulsiones más de los locales (Culio y Ángel) por diversas protestas y un miembro del banquillo del conjunto aragonés. Con ocho jugadores sobre el terreno de juego,

El colegiado expulsaba a Nauzet por zancadillear a Lolo, lo que dio lugar a una gran trifulca

Las Palmas reculó para intentar no recibir goles de un Zaragoza que seguía cometiendo varias imprecisiones, costándole muchos sustos en la zona defensiva.  Un fallo entre el portero y la defensa permitió a Willian José recortar distancias pero, tras el saque de centro del campo, Hernán se plantaba solo ante el portero, Rico conseguía despejar pero el rebote impactaba en Roque Mesa y anotaba el 5-2. Este tanto fue un mazazo para los de Popovic, que lo siguieron intentando y volvieron a recortar distancias con un cabezazo de Willian José tras un centro de Álamo, pero no dio tiempo a más y el colegiado señaló el final. 

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