Hijo y sobrino de futbolistas, su carrera deportiva ha estado siempre ligada al equipo de su ciudad natal, el Real Zaragoza. En el 2012 su mala relación con Agapito Iglesias y la situación del club provocaron que el jugador maño hiciera las maletas para emprender una nueva etapa como futbolista en el Getafe CF. Fue una salida triste tanto para el jugador como para la afición; una vez que había conseguido regresar a su casa, “El Lince” tuvo que volver a decir adiós al club que siempre estará en su corazón.

Desde pequeño en el Real Zaragoza

Criado en una familia futbolera, Lafita heredó esa pasión por el fútbol. Además de esa pasión por este deporte, a Lafita se le inculcó ese amor por los colores blanquiazules, muy presentes en su casa. Ángel inició su carrera deportiva en las categorías inferiores del Real Zaragoza, en el 2003 “El Lince” dio el salto al Real Zaragoza B, con el que compitió en la Segunda División B española y donde pudo demostrar su valía.

Desde que Ángel Lafita llegó al filial mostró sus principales cualidades, se ha caracterizado por ser un centrocampista ofensivo que puede actuar en todo el ámbito de ataque, que posee una gran zancada y que sabe aprovechar muy bien los espacios que deja el rival, y sobre todo que es un jugador con mucho sacrificio.

Foto: MARCA

El salto al primer equipo

Lafita pudo cumplir su sueño, convertirse en jugador profesional y hacerlo con el Real Zaragoza era una realidad. El debut de Lafita con la elástica blanquilla llegaría en el primer partido de la temporada 2005/2006, en el que el Real Zaragoza empató a 0 contra el Atlético de Madrid. El sueño del jugador maño se había cumplido, debutar con su equipo en la Primera División española. Durante su primera temporada en la máxima categoría del fútbol español no contó con todos los minutos que un jugador quiere, ya que disputó 13 encuentros de liga sin poder anotar ningún gol. Su segunda temporada en el conjunto blanquillo sería diferente, pudo disputar 32 encuentros de liga anotando su primer gol con el Real Zaragoza.No fueron dos temporadas fáciles para Lafita, pero no pasaría desapercibido para otros equipos de la liga española.

Rumbo a La Coruña

En el mercado de fichajes del año 2007 el Deportivo se hizo con los servicios de Lafita, llegando a un acuerdo con el Real Zaragoza para el traspaso del jugador blanquiazul. El Real Zaragoza se guardó una opción de recompra que sería clave en la vuelta del jugador a casa.

No fue fácil para Lafita dejar por primera vez el club donde había pasado toda su vida, pero esta decisión le iba a ayudar a crecer como jugador y a que el Real Zaragoza se arrepintiese de dejarle salir y por ello volver a hacerse con sus servicios.

Su primera temporada en el conjunto coruñés fue un poco discreta, dando muestras en algún partido de que podía ser un jugador importante para el club. Fue en su segunda temporada en el Deportivo cuando “El Lince” explotó como jugador. El jugador maño se convirtió en un fijo para Lotina, el entrenador que dirigía el Depor en esa etapa. En esa temporada Lafita disfrutó de muchos minutos disputando prácticamente todos los partidos de liga y en la firmó 8 dianas, convirtiéndose en el máximo goleador del conjunto coruñés. Lafita no pasó desapercibido y clubes muy importantes se fijaron en él, se llegó a especular incluso que Vicente Del Bosque pensó en él para la selección española.

Vuelta "in extremis"

El 31 de agosto de 2009 iba a convertirse en uno de los días más intensos e importantes en la vida de Ángel Lafita. El jugador no había pasado desapercibido tras su última temporada con el Depor en la capital maña. El Real Zaragoza se guardó una opción de recompra que iba a resultar fundamental para la vuelta de “El Lince” a casa, y es que a falta de unos minutos para el cierre del mercado de fichajes el Real Zaragoza abonó los 2 millones que eran necesarios para conseguir el retorno del jugador maño al club aragonés.

Los dos "títulos" con el Real Zaragoza

No se puede decir que Lafita ha sido un jugador fundamental en la historia del Real Zaragoza, pero si ha sido uno de los pocos jugadores que ha vestido con dignidad y ha defendido allá donde ha ido la camiseta del club de sus amores. Las tres próximas temporadas que Lafita iba a pasar en el Real Zaragoza no iban a ser nada fáciles, pero con fuerza e ilusión logró salvar al equipo en dos ocasiones.

No hay ningún trofeo en el palmarés de Ángel Lafita, pero seguro que para él la salvación lograda en Levante y la conseguida en Getafe valen como tal. Después de lograr dos salvaciones milagrosas y de dejar al club en la categoría donde se merece, debido a su relación con el máximo accionista y la situación del Real Zaragoza el jugador maño iba a tener que abandonar de nuevo a su club para poner rumbo hacia una nueva aventura, Getafe, donde Lafita pasó dos años muy buenos personalmente y logró convertirse en un jugador importante para el club azulón.

Desgracia para "El Lince"

El 2014 estaba siendo un año magnífico para el zaragozano. Atravesaba uno de los mejores momentos futbolísticos de su carrera deportiva, pero la mala suerte se ha cebado con el ex zaragocista. Durante un partido de Liga, Lafita se lesionó de gravedad por un esguince en el ligamento cruzado de su rodilla derecha. Esta lesión le tendrá apartado de los terrenos de juego seis meses.

Foto: Miguel Ángel Molina. EFE

Fuerza maña

Seguro que todos los zaragocistas le desean una pronta recuperación, y es que Lafita siempre va a ser un jugador muy querido en el club que lo vio crecer, un club donde Lafita lucho cada balón como si fuera el último, donde hizo todo lo que pudo, y donde sobre todo demostró que es un zaragocista de corazón. No va a ser un jugador que aparezca en los museos del club o en fotos históricas, pero puede estar seguro que va a ser un jugador que estará en todos los corazones de los zaragocistas que lo hayan visto jugar.