Recibir a un equipo de la zona alta con la situación del Real Zaragoza B no era tarea sencilla. La imperiosa necesidad de ganar casi elevaba el partido a la categoría de una final, porque no conseguir los tres puntos podía suponer empezar a alejarse mucho de la lucha por la permanencia en la división de bronce.

De hecho, el partido empezó como se presuponía: dos filiales en busca de dominar el choque y desplegar su juego, para conseguir hacer suyo el partido y el marcador. Pese a su condición de visitante, fue el Espanyol B el que tuvo el esférico durante los primeros compases, si bien es cierto que las ocasiones de gol brillaban por su ausencia.

No fue hasta el primer cuarto de hora cuando Jairo, muy activo en la zona de ataque, buscó el palo corto de Víctor Ibáñez para batirle, pero el meta blanquillo aguantó muy bien la jugada y consiguió atajar el disparo.

Las ocasiones comienzan a llegar

A partir de entonces, el partido se animó en cuanto a ocasiones de peligro se refiere, pero ninguna de las dos escuadras lograba materializar sus ocasiones. Los espanyolistas tuvieron sus opciones a balón parado, pero en la más clara de ellas, la defensa local provocó inteligentemente un fuera de juego. Poco después, Kilian Grant recibió un gran pase y disparó con potencia, pero el balón se marchó desviado.

A partir del cuarto de hora, las ocasiones comenzaron a sucederse por parte de ambos conjuntos

Con el choque en pleno vaivén de ocasiones, el filial zaragocista sufrió un pequeño contratiempo. En el minuto 25, Santigosa tenía que retirarse al sufrir unas pequeñas molestias, para dejar su lugar a Tarsi. Sin embargo, esto no provocó un cambio en el partido, y las oportunidades se siguieron sucediendo.

De nuevo Jairo, por parte visitante, y Carlos Javier por el bando local, dispusieron de dos buenas ocasiones para abrir el luminoso. El perico recogió un rechace y se plantó solo frente al meta zaragocista, pero éste aguantó de manera extraordinaria en el mano a mano y detuvo la ocasión. Por su parte, el capitán zaragozano se internó en el área y chutó, pero la defensa visitante se percató con acierto y consiguió desviar el envío.

Poco antes del descanso, el mejor hombre de los visitantes, Jairo, enviaba el balón al fondo de las redes en su tercera ocasión, pero el colegiado anuló el tanto por fuera de juego del delantero perico.

Segunda parte de mucha intensidad

La segunda mitad comenzaría siendo un calco de la primera, aunque en esta ocasión fueron los pupilos de César Lainez los que se hicieron más con la posesión. Sin embargo, las ocasiones de nuevo se las repartieron entre ambos equipos.

En una acción de ataque de los aragoneses, Pombo no se lo pensó y probó fortuna desde la zona del medio campo. Su disparo a punto estuvo de convertirse en uno de los goles del año, pero finalmente se marchó desviado. Pero con cada ataque de un equipo, respondía el rival, y en esta ocasión la réplica llegó pronto por parte de Cristian, que recibió un balón en el área pequeña y lanzó el balón fuera rozando el palo.

Tras una buena jugada entre Carlos Javier, Esteve y Kilian, éste último conseguía anotar a placer en el tramo final del choque

Con la gran intensidad reinante en el partido, los minutos pasanban rápido y cualquiera de los dos equipos podía ponerse por delante en cualquier momento. Fue entonces cuando el Real Zaragoza B arrimó más el hombro y se marchó decidido a por la victoria. Avisaron Kilian y Carlos Esteve, que había entrado en sustitución de Isuardi, pero el disparo del primero fue atajado por el portero en línea de gol, y al segundo le invalidaron la acción por fuera de juego.

Sin embargo, esta vez sí que sucedió aquello de "el que la sigue, la consigue", y el filial aragonés logró el esperado tanto. Carlos Javier recuperó un balón y cedió rápido para Esteve, que se marchó de la defensa para asistir a Kilian, quien, solo frente al meta visitante, anotó a placer.

Con el tanto local, el Espanyol B lo quiso intentar, pero se quedó noqueado y eso le pasó factura, ya que Joan Jordán fue expulsado por doble amarilla. Este hecho ayudó a que el filial aragonés, jugando con uno más, cerrara bien las líneas para salvaguardar el valioso resultado.

Así quedan en la tabla

Con estos tres importantes puntos, el Real Zaragoza B suma 25 puntos, aunque sigue décimonoveno, y recorta puntos respecto al puesto de promoción, que ahora se sitúa a dos, no así a la permanencia, que sigue a seis. Por su parte, el Espanyol B es séptimo con 36 puntos, tres por debajo de los puestos de playoff de ascenso.