El Real Zaragoza ha sufrido una dura dura derrota frente al Deportivo Alavés por 4-0 en Mendizorroza. Los vitorianos han sido dueños del encuentro durante prácticamente los noventa minutos de juego, mientras que los visitantes tan apenas han sido capaces de poner en problemas la portería de Manu Fernández. 

En el once inicial, Ranko Popovic daba la oportunidad a Willian José de reivindicarse tras sus buenos minutos frente al Sabadell, mientras que Galarreta ocupaba el lugar de Basha en el centro del campo. En la defensa, el técnico decidió dar descanso a Vallejo, por lo que Rico volvía al lateral izquierdo y Cabrera formaría pareja con Mario en el centro de la zaga.

El Alavés avisa de sus intenciones

Dos equipos en tendencia positiva se veían las caras con distintos objetivos: los vascos, alejarse del descenso y los aragoneses, mantener la distancia con los perseguidores y recortar puntos con los puestos de cabeza. Los locales salieron mejor en los primeros instantes, y tardaron poco en dar el primer aviso. Lanzarote filtraba un buen balón entre la defensa, permitiendo que Barreiro se plantara solo ante Bono, pero el guardameta aguantaba bien y lograba despejar el peligro. Más allá de esta ocasión, era el Real Zaragoza el que intentaba llevar el dominio del juego, pero tan apenas eran capaces de acercarse con peligro a la portería rival. Únicamente un disparo lejano de Pedro Sánchez puso en tensión a la afición vasca, pero se fue por poco.

El Alavés, sabedor de las carencias defensivas del Real Zaragoza en el lateral zurdo con Rico, comenzó a volcar su juego ofensivo por esa zona, con un Lanzarote que empezaba a adquirir un protagonismo especial, buscando continuamente encarar a un Rico que intentaba achicar el peligro como podía. El jugador catalán ya había avisado en un par de ocasiones de cuáles eran sus intenciones, pero en el minuto 22, un centro raso suyo que no era capaz de despejar la zaga llegaba al segundo palo y era rematado por Toti en boca de gol. El conjunto aragonés, que intentó reaccionar a ese contratiempo con un buen centro de Eldin desde la derecha para Borja Bastó al que no llegaba a la acción cuando ya se cantaba el gol, estuvo a punto de encajar el segundo gol con un remate de cabeza de Juanma que obligaba a Bono a despejar de puños.

Lanzarote fue  una continua pesadilla para Rico durante la primera parte

Conforme pasaban los minutos, el conjunto vitoriano había empezado a hacerse dueño del encuentro. Los jugadores aragoneses tan apenas eran capaces de acercarse con peligro a tres cuartos del campo rival, y el centro del campo, que echaba enormemente de menos la ausencia de Basha, perdía el esférico con una extrema rapidez. El Alavés, por su parte, se mostraba cómodamente sobre el terreno de juego dominando la posesión y buscando los espacios en la defensa para ampliar distancias en el marcador, pero no pudo generar grandes ocasiones hasta que llegara el descanso.

Debacle zaragocista

Ranko Popovic introdujo a Vallejo por Mario para intentar dar una mayor seguridad a la defensa maña, pero a los pocos segundos de que comenzara la segunda mitad llegaba el segundo de los locales. Fernández perdía la marca de Toti permitiendo que el atacante, sin oposición, pudiera centrar el balón a Lanzarote, Cabrera y Rico eran incapaces de despejar y el jugador catalán anotaba el segundo del choque. Este gol obligaba a los maños a reaccionar inmediatamente para volver a meterse en el encuentro, pero los intentos de Pedro y Borja Bastón no encontraron portería.

Estas ofensivas del cuadro aragonés las aprovecharon los locales, que vieron una gran oportunidad para buscar las contras y sentenciar definitivamente el partido. Toti, rememorando la jugada del segundo gol, volvía a superar a Fernández en velocidad y sacaba un buen centro para que Barreiro, en boca de gol tras anticiparse a Rico, aumentara la renta con un remate de cabeza. A partir de este momento, los de Ranko Popovic desaparecieron del terreno de juego y los locales gozaron con innumerables oportunidades para hacer más sangre aún, pero Bono y la mala puntería evitaron que el cuarto llegara al luminoso.

Las cosas se complicarían más aún para los aragoneses con la expulsión de Diego Rico por roja directa tras una dura entrada en el centro del campo a Sangalli. Para más inri, Alcolea debutaba en la portería zaragocista en Segunda División por las molestias de Bono. Los vascos, pese a que seiguieron controlando el juego, levantaron el pie del acelerador y evitaron no hacer sangre. A pesar de ello, Toti hacía el segundo de su cuenta goleadora cuando faltaba un minuto para llegar al final después de recortar al guardameta aragonés. Con esto, el colegiado señalaba la conclusión del choque, llevando la euforia a las gradas.

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