La abultada derrota por 4-0 sufrida ante el Alavés ha dejado helado tanto al zaragocismo como a su entrenador. Ranko ha admitido que no han podido salir con la cabeza alta porque no han estado en el partido desde el principio.

El serbio ha acusado la dificultad de competir tras una semana influida por las lesiones: "Si entrenas toda la semana con la mitad de los jugadores estando pendiente de si unos pueden y otros no, se refleja el día del partido".

"Entrenar toda la semana siete contra siete se paga"

Ranko ha valorado como insuficiente la actitud de sus futbolistas: "En el fútbol tienes que estar siempre al 100% y nosotros no lo hemos hecho". Para Popovic, "la derrota ha sido justa" y ha reconocido sentir vergüenza por el estrepitoso resultado.

Sobre las bajas, se ha acordado de Basha pero ha aclarado que "no se puede responsabilizar de esta derrota a la falta de un jugador". Durante el encuentro se han producido las sustituciones de Bono, que arrastraba molestias esta semana, y la de Mario, por "problemas en el isquio", según Popovic. En cuanto a la situación de Vallejo, que acumulaba buenas actuaciones y hoy comenzaba el partido desde el banquillo; Ranko ha afirmado que el defensa ha estado toda la semana con cargas musculares pendiente de si podría disputar el encuentro. También ha comentado la expulsión de Rico y ha declarado que el lateral "tiene que estar más concentrado en otras jugadas, sobre todo en la de su expulsión".

El técnico del conjunto aragonés espera recuperar jugadores de cara al próximo partido ante el Llagostera en La Romareda.