Los sueños están para cumplirse, y en la tarde de ayer, dos canteranos del Real Zaragoza hicieron el suyo realidad.

Corría el minuto 80 de partido cuando Ranko Popovic decidió sacar a Sergio Gil en lugar de un desaparecido Galarreta. Con el 27 a la espalda y con tan sólo 18 años, el jugador del Real Zaragoza B, que la temporada pasada pertenecía al División de Honor Juvenil, debutaba con el primer equipo blanquillo.

Pese a los pocos minutos que tuvo, aportó seguridad y creación en el centro del campo, además de tener una ocasión de cara a gol. Sin duda, Sergio Gil demostró que no le quedaría grande ser titular en este Real Zaragoza.

Tras el partido, el centrocampista aseguró: “Es un sueño poder debutar con la camiseta del equipo de tu ciudad”, y añadió: “He intentado hacerlo lo mejor posible y ayudar al equipo en todo lo posible”.

Nueve minutos después, fue Álvaro Meseguer el protagonista. El capitán del filial blanquillo saltó al terreno de juego con el 36 a la espalda en lugar del lesionado Diego Rico. El central, que esta temporada está actuando más en el lateral derecho, y que incluso una vez jugó de interior diestro, tuvo que jugar ayer a pierna cambiada, en el lateral izquierdo. Pese a ello, fue valiente y no se escondió. Aunque tuvo muy pocos minutos, fue tiempo suficiente para generar una ocasión de peligro. Meseguer puso un buen centro desde la banda izquierda al que no llegó a rematar ningún jugador blanquillo.

Tras el pitido final y el paso por vestuarios, el de Alcañiz mostró su felicidad en zona mixta: “Llevo diez años aquí, es el sueño de toda una vida y se ha hecho realidad”.

Los canteranos no pudieron estrenarse con victoria, y, tras un mal partido del conjunto maño, el choque ante el Lugo finalizó en tablas (0-0).