El central andorrano, que llegó al Real Zaragoza B en el pasado mercado veraniego, marcó el pasado sábado el gol de la tranquilidad para el conjunto que dirige César Láinez.

El filial maño se marchó al descanso con ventaja en el marcador, gracias a un gol de Diego Suárez. Tras la reanudación, los aragoneses salieron muy enchufados, y en el 48’, Marc Vales hizo el segundo y último tanto del choque. Nacho Lafita botó un córner que el andorrano remató de cabeza, consiguiendo, de esta forma, su primer gol con la elástica blanquilla. Y lo hizo en un lugar inmejorable, La Romareda, donde jugó su primer partido, ya que se perdió el encuentro ante el Eldense.

El central, que ante el CD Olímpic de Xàtiva actuó de lateral izquierdo, como ya ha hecho en varias jornadas, cuajó una gran actuación durante los 90 minutos. Y lo hizo en una posición que no era la suya. Los jugadores visitantes vieron cómo era imposible generar peligro por su banda derecha, donde esperaba un Marc Vales que cortó jugadas, robó balones y fue un auténtico quebradero de cabeza para el extremo derecho del Olímpic.

Tras 21 partidos defendiendo el escudo del león, el defensor zaragocista vio puerta por primera vez, poniéndole, así, la guinda a su buen partido.

César Láinez quizá no pueda contar con el andorrano para el próximo compromiso del filial, el domingo a las 12h en casa del Elche Ilicitano, ya que podría ser convocado con la selección absoluta de Andorra, que juega la noche de antes un partido clasificatorio para la Eurocopa de 2016 ante Bosnia-Herzegovina.