El Real Zaragoza continúa ofreciendo una pobre imagen esta pretemporada. El conjunto blanquillo visitaba este sábado al Nàstic de Tarragona en su cuarto partido (Deportivo Aragón, CD Ebro y Cagliari) este verano. Tras la derrota en tierras italianas, el equipo aragonés tenía una oportunidad de oro para mejorar sensaciones ante uno de los equipos con los que se verá las caras esta temporada.
Popovic sorprendió desde el inicio con un inusual esquema hasta ahora donde destacaba la inclusión de Pablo Alcolea bajo palos, ya que Manu Herrera no viajó con el equipo por motivos médicos. Tampoco viajaron Bono, Mario, Jorge Díaz, Jorge Ortí, Fernández, Javi Álamo y Adán Pérez, estos tres últimos por decisión técnica. El equipo blanquillo saltó al terreno de juego con un sistema de 4-1-4-1 con Lolo y Rico en el centro de la defensa y en los laterales Bertrán y Abraham. Más adelantado estaba Wilk y por delante de este se encontraba Dorca, Diamanka, Pedro Sánchez y Kilian. El hombre más adelantado era Ortuño quién tuvo alguna oportunidad en los primeros minutos, pero con el paso del tiempo y del gran marcaje catalán se disolvió.
A pesar de que en los primeros minutos se vio a un Real Zaragoza que quería dominar la situación, lo cierto es que el Nàstic se posicionó muy bien en el campo y supo marcar perfectamente los espacios a los aragoneses. De esta forma, a los diez minutos de comenzar el encuentro Ferrán se aprovechaba de un error defensivo y ponía el 1-0 en el marcador. El Real Zaragoza intentaba reaccionar, pero el desorden defensivo creaba muchos a puros, sobre todo a balón parado donde han recibido muchas jugadas de peligro que podrían haber aumentado el marcador a favor de los locales.
En la segunda parte, el técnico serbio daría entrada a Rubén, Cabrera, Isaac y Aria por Lolo, Abraham, Marc Bertrán y Kilian. Más tarde entrarían Erik Morán y Ángel, lo que cambiaría el sistema de juego (4-4-2) con Ángel y Ortuño arriba. Pero pese a los cambios en defensa, el balón parado volvió a dejar en evidencia uno de los problemas que viene arrastrando el conjunto aragonés desde hace tiempo. Rayco ponía el segundo en el marcador, ante la impotencia de la defensa blanquilla tras un córner en el que el jugador se encontraba solo en línea de gol.
Con el paso de los minutos, el juego se endurecía por ambas partes y el colegiado comenzaba a amonestar. Muchas faltas y entradas a destiempo que han deslucido en gran medida el segundo tiempo. El Real Zaragoza seguía por detrás en el electrónico, pero a falta de diez minutos del final el conjunto de Popovic mejoraba notablemente. De esta forma llegaba el primer gol zaragocista de las botas de Dorca, uno de los jugadores más destacados del partido que además ha lucido el brazalete de capitán. Y solo un minuto después, Ángel ponía el empate en el marcador consiguiendo arrancar un empate de un partido para olvidar para el conjunto aragonés.
Todavía quedan varias semanas hasta el inicio liguero, pero el equipo blanquillo necesita mejorar la tarea defensiva donde se siguen mostrando muy débiles.
Próximo partido ante el Alcorcón
Continúa la preparación en esta pretemporada y el siguiente partido tendrá lugar el martes 4 de agosto en Calatayud a las 19:00h ante el Alcorcón. Pero el equipo guardará descanso el domingo y volverá a los entrenamiento el lunes en la Ciudad Deportiva a las 9:30h.