El poderoso jugador Polaco llega a la capital del viento para apuntalar un centro del campo carente de músculo y sacrificio. Es el sexto fichaje del Real Zaragoza. Su ídolo: Gennaro Gattuso.

Cezary Stefan Wilk, nacido un 12 de febrero de 1986 en Varsovia, Polonia. Jugador de corte puramente defensivo que desempeña una labor oscura pero necesaria en el equipo. El polaco de 1,8m de estatura aporta músculo y sacrificio en el centro del campo de los equipos en los que ha jugado. La labor de un buen mediocentro defensivo es fundamental. Debe ser el ancla del equipo, el apagafuegos. El encargado de desarticular los ataques de los equipos rivales, recorriendo muchos kilómetros a lo largo y ancho del verde. Cortar balones e iniciar las jugadas de ataque como nexo de unión entre los centrales y los jugadores más creativos del equipo. El bueno de Wilk ostenta muchas de esas cualidades, lo que permitirá a Ranko Popovic disponer de una alternativa más en el centro del campo.

Trayectoria profesional

Formado en las categorías inferiores del Polonia Varsovia, equipo natural de su ciudad. Cezary Wilk hizo su debut profesional en la Liga Ekstraklasa (Polonia) vistiendo la elástica del Korona Kielce. Apenas tuvo protagonismo durante su primera etapa como profesional, por ello, en su 2ª temporada fue cedido al LKS Lódz donde sí pudo demostrar su valía.

Su buen hacer durante su periodo de cesión le permitió volver a su club de origen y hacerse con un puesto en el once titular. Wilk disputó 76 partidos como jugador del Korona Kielce hasta que en el año 2010 llamó la atención de uno de los grandes clubes de Polonia, el Wisla de Cracovia. A sus 24 años llegaba a la plantilla de un equipo histórico, habitual de las competiciones europeas y tercer club con más títulos del fútbol polaco. Durante su primera temporada a las órdenes del técnico holandés, Robert Maaskant, lograría proclamarse campeón de liga, disputando 22 partidos en la competición doméstica. Wilk permaneció en el Wisla hasta el año 2013 jugando un total de 106 partidos y anotando 7 goles. Habitual en las convocatorias nacionales Sub-21 y Sub-23, lograría alcanzar la mayor meta a la que un futbolista profesional puede optar. Defender los colores de su país con la selección absoluta.

El buen rendimiento de Wilk llamó la atención de Fernando Vázquez, quien por aquel entonces era el técnico del Deportivo de la Coruña, recién descendido a la Liga Segunda División española. Wilk aceptó el reto del ascenso y firmó su contrato con el conjunto gallego. El centrocampista polaco disputó 19 partidos en el conjunto coruñés, siendo una pieza importante en el engranaje del equipo. Sin embargo, no logró hacerse con la titularidad debido al buen rendimiento de Álex Bergantiños, su rival en la posición de mediocentro. A pesar de ello, el jugador polaco siempre era uno de los destacados cada vez que pisaba el césped. Asumió su rol en el equipo y cada vez que el técnico le daba la oportunidad él no la desaprovechaba. Esfuerzo, sacrificio, sudor en el campo; Wilk lo daba todo por su club. Expeditivo en el corte, firme en la marca pero sin complicaciones en la salida del balón. Un jugador que siempre salía al campo con una sonrisa en la cara y dispuesto a disfrutar de cada minuto sobre el campo. Wilk lograría el ascenso a la Primera División durante su primera temporada en el Deportivo.

La pasada campaña 2014-2015 fue muy dura para él. En marzo tuvo que pasar por el quirófano al fracturarse el quinto metatarsiano del pie derecho, lo que le hizo decir adiós a la temporada. Wilk disputó únicamente 11 partidos y en junio finalizó su compromiso con el club de A Coruña. La lesión ya ha quedado totalmente olvidada.

Aportación al Real Zaragoza

Las cualidades defensivas del polaco son del agrado de Martín González, director deportivo del Real Zaragoza. Además la condición de agente libre ha hecho que su incorporación sea factible. El fichaje de Cezary Wilk permite duplicar la posición de mediocentro defensivo, algo de lo que carecíamos la temporada pasada.

A priori el rol que desempeñara Wilk será de suplente de Albert Dorca, entrando como recambio en las segundas partes o en algunos partidos para dar descanso al jugador catalán. Las cualidades físicas y defensivas del jugador polaco le darán una alternativa a Ranko Popovic en sus alineaciones, pudiendo juntar a ambos mediocentros a la vez y desplegar un fútbol más ofensivo.

Autor: Alejandro Bueno