El conjunto blanquillo afronta su último choque en Palamós sin certificar su plaza en play off. A pesar de que los gerundenses ya descendidos a Segunda División B y el ánimo de la afición por volver a ver a su equipo luchar por ascender, no será nada fácil para los de Lluís Carreras: “Hay que jugar y hay que ganar el partido para depender de uno mismo. Sabemos de la dificultad pero no hay excusas”.

Como máximo solo pueden optar a la cuarta plaza, la que lucharán con sus rivales más directos: Córdoba, Girona, Osasuna y Alcorcón. “El trabajo no está hecho. Saben de la dificultad del partido porque para nosotros nunca hemos tenido un partido fácil”, ha comentado.

Son varios los jugadores blanquillos que están en peligro de ver la quinta amarilla por lo que se perderían, si se llega a jugar los puestos de promoción, el encuentro de ida. Lluís Carreras lo ha dejado claro en rueda de prensa: “No podemos reservar nada porque es una final. No lo hemos hecho en toda temporada, no lo íbamos a hacer ahora. Sería desmerecer el trabajo de los jugadores que saben gestionar esta situación”.

“Los jugadores me transmiten seguridad, firmeza y ganas”

Y es que el partido ante el Llagostera es de doble filo, puesto que el equipo catalán ya descendido, no tendrá presión en el terreno de juego. Al contrario que los visitantes que se juegan mucho en la última jornada: “Han obtenido buenos resultados como locales, si hubiesen aprovechado la situación fuera de su casa, estarían dependiendo de sí mismos. Espera que el equipo se sepa aislar sabiendo lo que pueda a hacer el Llagostera”.

Para finalizar, el Real Zaragoza no ha cosechado buenos resultados a pesar de conseguir en varios la victoria, ya que casi siempre ha sido por la mínima: “Sería perfecto volver a ganar cómodamente. Convenciendo, siendo superiores, no pasando apuros, eso es lo que buscamos”.