Alberto Guitián no vestirá la elástica blanquilla el próximo curso. El jugador cántabro estará vinculado al Real Valladolid las próximas tres temporadas y se pondrá a las órdenes del técnico exzaragocista Paco Herrera. El central acababa contrato el 30 de junio y la entidad aragonesa negoció su ampliación de contrato que, finalmente, no aceptó.

A pesar de su intención por seguir en el Real Zaragoza sin conocer el trágico desenlace, Guitián se convirtió en el punto de mira de varios equipos de Segunda. Levante, Alcorcón, Valladolid, entre otros, eran los pretendientes del defensa tras su buena actuación en el club maño.

Titular indiscutible

Desde que llegó a la plantilla en el mercado invernal, Guitián ha disputado 18 partidos en los que ha logrado anotar a dos goles y un buen trabajo en defensa. Su participación en la mayoría de partidos ha sido de las mejores y ha sido clave de la mejoría del equipo en la recta final de la campaña. Por ello, Lluís Carreras contaba con él en el once inicial de cada partido disputado. Únicamente, se perdió el choque ante el Numancia por sanción. Fue a partir de ahí cuando empezó el declive del conjunto blanquillo.

A empezar de cero

El cansancio físico mermaba en la plantilla y se notaba la presión con todo lo que estaba en juego. Dejaron escapar una oportunidad de oro para ascender a Primera División. Tragedia que se consolidó con la tragedia vivida en Palamós. Un encuentro transcendental que suponía el fin de la temporada y el futuro de varios jugadores del equipo.

Hinestroza fue el primero en abandonar el barco dirección al conjunto mexicano Santos Laguna. El siguiente ha sido Alberto Guitián al equipo vallisoletano. Pero aún quedan muchas situaciones que resolver. Por ejemplo, si Jesús Vallejo permanecerá cedido otro curso más en el Real Zaragoza, la continuación en el equipo de Lanzarote y Ros o las salidas de Diego Rico y Leandro Cabrera.