La Mareona dio color a la mañana de domingo y demostró ser grande. Con la visita del Sporting, el Di Stéfano mostró una de las mejores entradas de la temporada al registrar un lleno. La afición rojiblanca despierta poco a poco de la pesadilla que supuso el descenso y de la mano de Sandoval quieren recuperar su puesto en Primera. Los primeros compases del encuentro dieron buena cuenta de ello y se vio a un equipo renacido.

El exentrenador del Rayo ha alterado la fisionomía del equipo en apenas una semana y sus jugadores salieron con una fuerza inusitada. La presión y la precisión del equipo asturiano es de otra categoría y el Castilla se resquebrajaba ante la superioridad de los de Sandoval.  En el primer cuarto de hora el Sporting firmaba dos tantos que atestiguaban su superioridad. El primero, tras un balón suelto en el área pequeña, lo firmaba Carmona de cabeza y el segundo, Bilic, tras una acción individual. Los inexpertos canteranos se batían el cobre pero se encontraban con la expulsión de Jesé. El canario recuperó su carácter ciclotímico y reaccionó de manera desproporcionada con una patada sin balón. La estrella castillista abandonó merecidamente el terreno de juego y ahora le toca reflexionar. Su nivel futbolístico está fuera de toda duda, pero su carácter le perdió antaño y hoy volvió a aparecer para asestar un duro golpe al choque.

La reacción de Toril no se hizo esperar y en el minuto 21 reordenó a su equipo tras los dos goles y la expulsión. Óscar Plano salió por Borja y con él abandonaron el terreno de juego los dos mejores jugadores del equipo en apenas unos minutos. Golpe casi mortal sobre la línea de flotación de un conjunto que se caracteriza por su coraje. A pesar de las circunstancias, intentó reaccionar y Mosquera buscó a Plano que casi remacha ante Juan Pablo.

Los blancos se asentaron sobre el terreno de juego, aunque quién sabe si por mutuo acuerdo con los asturianos. Los de Sandoval, con la renta obtenida y la superioridad numérica, retrasaron líneas dejando hacer a los locales. La contra del equipo visitante acechaba en cualquier oportunidad, pero con esa circunstancia dieron vida al filial que antes del descanso entraba de lleno en el encuentro tras el gol de Alex. El pelirrojo se erigió como líder del equipo y estuvo en todas. En defensa y ataque, el mediocentro demostró un nivel sensacional que permitió a su equipo marcharse al vestuario con alguna esperanza.

Tras la reanudación el partido pareció seguir por los mismos derroteros y los visitantes cedieron terreno, permitiendo al Castilla llegar a su área con peligro. Denis tuvo el empate ante Juan Pablo pero su disparo se perdió por encima de la portería asturiana y acto seguido, Bilic hizo otro golazo al soltar un latigazo de la frontal. El 1-3 y la superioridad numérica sentenciaría a cualquier equipo, pero el Castilla está hecho de  otra pasta y su arrojo le permitió recortar de nuevo gracias a un penalti sobre Denis. La pena máxima la transformó Alex y firmó su doblete.

El 2-3 devolvió al Castilla la fuerza y los asturianos volvieron a recular. La fuerza de filial les parapetó atrás y la grada empujó a los jóvenes madridistas, pero De las Cuevas cortó de nuevo la reacción, nada más entrar al campo, marcando el cuarto. De este modo se acabó toda la historia y el Castilla bajó los brazos después de haberse levantado en infinitas ocasiones. Los blancos pagaron el comienzo dubitativo que aprovechó el Sporting para poner tierra de por medio. Ese espacio sería demasiado para los de Toril.

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Sobre el autor
Adrián Orzáez
Editor. Redactor del Real Madrid. Licenciado en Economía y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Email de contacto: [email protected]