Encontramos al presidente del Barakaldo, Alberto Romero, aparcando su pequeño utilitario en las inmediaciones de Lasesarre en una mañana lluviosa y fría. Abandona el coche acompañado de Pita, su fiel Jack Ruseel Terrier. Romero, tocado con una gorra negra que le protege de las inclemencias metereológicas, nos invita a acompañarle a su despacho, una oficina situada en las entrañas del estadio. Tras saludar a un empleado del club y a varios directivos que echan un cable en las tareas cotidianas de éste, comprueba cómo va la marcha de aficionados apuntados al autobús que el Baraka fletará para llevar a la fiel hinchada gualdinegra a su próxima cita liguera, Tudela. "Ayer había apuntadas veintipico personas", confiesa. Y concluyó: "De seguir así, es muy probable que salga un segundo autobús". Una sonrisa se dibujó en su rostro ante tal perspectiva.

Desde luego, son días de vino y rosas para la entidad de la margen izquierda. El Barakaldo CF, siendo como es un club recién ascendido, ocupa el cuarto lugar en la tabla clasificatoria, una posición que pocos habrían vaticinado al inicio de la temporada. Buena parte de la culpa de esta situación se le puede atribuir a la siguiente persona que nos encontramos de camino al despacho presidencial: Boluka, el director deportivo de la entidad. Una vez llegamos al habitáculo, Alberto Romero nos invita a tomar asiento, como él hace. Sube a su perra a su regazo, conecta la calefacción y da el visto bueno para que se proceda a presionar el rojo botón de la grabadora, la cual recogerá sus impresiones sobre esta liga a la que le quedan tres partidos, así como otros asuntos relacionados con el club que dirige.

PREGUNTA: Quién le iba a decir a Alberto Romero que, a falta de tres encuentros, el Barakaldo dependería de sí mismo para clasificarse a los playoffs de ascenso a Segunda.

RESPUESTA: Creo que estamos viviendo un sueño muy bonito que yo, personalmente, no me esperaba. Pero bueno, ahí estamos y hay que aprovechar el momento. Ahora mismo está claro cual es el objetivo y no queda otra que meterse en la fase de ascenso. Estamos a falta de tres jornadas, dependemos de nosotros y tenemos que hacernos fuertes en esa posición.

P: ¿A qué le atribuyes el éxito de esta campaña?

R: El club es todo: es la grada, los jugadores, el cuerpo técnico, la junta directiva... Todo hace uno y ese "todo" ha funcionado muy bien. Pero bueno, yo creo que el secreto es el equipo, el ambiente que reina en ese vestuario y la unión que ha conseguido el cuerpo técnico con Iñaki Zurimendi a la cabeza. Van todos a una. Es exactamente igual que lo que ocurrió al año pasado, cuando ascendimos de 3ª a 2ªB. Me gusta mucho destacar eso. El equipo funciona como un grupo de amigos y eso hace mucho en un vestuario y esa sensación la estoy observando en estos 2 años y eso hace a un equipo mucho más fuerte. Además, evidentemente, los chavales tienen mucha calidad y el cuerpo técnico ha demostrado que ha sabido llevar este grupo, le ha dado una solvencia, tanto arriba como atrás, tremenda.

P: Ciertamente, los números defensivos son espectaculares, de los mejores de todas las categorías del fútbol español.

R: Sí, todo el mundo lo dice. Es de alabar el trabajo defensivo que ha conseguido Iñaki y así también se hace un equipo. El objetivo de este año era afianzarse en el grupo, intentar no pasar apuros y, en mi opinión, eso empieza desde la zaga. De modo que si consigues una fortaleza defensiva tienes mucho ganado.

“No podía ser que, de la noche a la mañana, el cuerpo técnico pasara de ser Dios por subirnos a 2ªB a no valer para nada.”

P: A pesar del buen momento que vive el Barakaldo, se han pasado algunas fases complicadas o menos buenas a lo largo de esta temporada.

R: Recuerdo como momento duro y, sobre todo, clave de la temporada, el partido de justo hace una vuelta, contra el Bilbao Athletic en Lezama. Fue un punto de inflexión conseguir aquel empate ya que nos dio tranquilidad porque estábamos pasando un mal momento de resultados, que no de juego, bajo mi punto de vista. De hecho, tampoco es que tuviésemos muchas dudas con respecto al cuerpo técnico. No podía ser que, de la noche a la mañana, pasaran de ser Dios por subirnos a 2ªB y, de repente, no valgan para nada.

A falta de tres partidos para el final de la temporada

P: Volviendo a la actualidad, aunque la campaña pueda calificarse de notable alto, se está muy cerca de conseguir que sea de sobresaliente. En este sentido, ¿cómo ves a la plantilla?

R: Les veo convencidos pero cautos, yendo partido a partido. Ahora sólo piensan en el partido contra el Tudelano, aunque, evidentemente, no pueden evitar hablar de los playoffs. Faltan 9 puntos y estamos ahí. No sería lógico que no lo hablaran, pero siguiendo la línea que marcó el cuerpo técnico hace tiempo, que es ir partido a partido y jugarlos todos a muerte, hay que ser conscientes de que se han hecho los deberes y de que todo lo que venga es un premio y bueno, éste puede ser el premio gordo. El partido del pasado sábado ha sido clave y, además, los resultados han sido muy positivos para nuestros intereses. No recuerdo un cúmulo de resultados tan positivos en muchos años del Barakaldo. En fin, siendo sincero, sí veo al equipo capaz de hacerlo, capaz de alcanzar los playoffs, aún siendo muy difícil.

P: De los tres partidos que quedan, ¿cuál ves más complicado?

R: El del Tudelano. El equipo navarro sigue persiguiendo la Copa y van a darlo todo. Es muy buen equipo. A mí me gustaron mucho en Lasesarre y es una escuadra con unos números extraordinarios en su estadio, aunque los nuestros fuera también lo son. Pero bueno, puede que si me preguntas la semana que viene, te diré que el rival más difícil me parece el Izarra, que es el siguiente.

“No he mirado posibles rivales de cara a los playoffs”

P: ¿Has echado ya un vistazo a posibles rivales en los playoffs?

R: La verdad es que no. Me gusta leer cosas de otros equipos y, más o menos, sé qué rivales hay pero no he mirado nada pensando en quién nos vendría mejor o peor o cosas así.

P: Dentro de dos semanas, frente al Izarra, se celebra el último partido de la temporada en Lasesarre. ¿Se está pensando en preparar algo especial?

R: Este tema se va a tratar en junta directiva, pero ideas hay y es muy probable que se haga algo especial de cara a ese encuentro, pero de momento no hay nada fijo.

P: ¿Y si se llega con opciones a Logroño?

R: Habrá que teñirlo de gualdinegro.

Planificando la temporada 2013-2014

P: A pesar de que la temporada aún no ha acabado, ya estáis trabajando y planificando la próxima campaña. Ahí están las renovaciones del míster o de jugadores como Garrido y Arriaga, que se confirmó ayer mismo. ¿Cómo se está perfilando la plantilla para el año que viene?

R: A mí me gustaría que fuesen muchos los jugadores que se queden pero es una parcela que gestiona completamente el área deportiva, es decir, Iñaki y Boluka. El equipo lo hacen ellos y nosotros sólo ponemos los límites a nivel económico. En ese sentido, yo sé que la idea de ambos es tratar de renovar a mucha gente, la cual coincide con la de la directiva. Estaría muy bien mantener el bloque pero entendemos que va a ser muy difícil porque, al fin y al cabo, no hay más que ver cómo lo están haciendo los chavales. Eso les hace llamativos para otros equipos. Pero bueno, de momento, Garrido ha firmado por dos años, Arriaga por uno y esperamos que estas firmas puedan arrastrar a hacer lo mismo a otros compañeros.

P: ¿Qué bajas crees que se pueden producir?

R: Sinceramente, ahora mismo, no lo sé.

P: Precisamente el director deportivo, Boluka, es uno de los nombres a los que la rumorología le atribuye más novias.

R: Boluka tiene contrato con el Barakaldo. Se está especulando mucho con este tema pero el año pasado firmó por dos temporadas. Eso sí, siempre hemos dicho que nunca vamos a cortar una trayectoria profesional a alguien pero, en este caso, el tema Boluka no nos preocupa lo más mínimo. Además de ser un profesional como la copa de un pino, es una persona comprometida con el Barakaldo, que está a gusto en el club y que está haciendo un trabajo fabuloso, el cual le puede servir de espaldarazo de cara a futuro.

“Si llegamos a playoffs, ¿por qué no nos va a acompañar por una vez la buena suerte?”

P: Si seguimos mirando al futuro, ¿qué objetivo os marcáis desde la directiva de cara a la próxima campaña?

R: Hace un mes te contestaría rápidamente pero ahora, en ese sentido, sólo puedo pensar en los tres partidos que quedan, pensar que tenemos una oportunidad muy bonita y que, si llegamos a playoffs, ¿por qué no nos va a acompañar por una vez la buena suerte? Lo que sí está claro es que el objetivo no va a ser el mismo que nos marcamos a principio de este año.

Económicamente, sí te puedo decir que va a ser durísimo, seguramente mucho más que éste pero, aún con todo, intentaremos hacer un equipo bonito. El Barakaldo no sólo ofrece dinero, aún siendo muy importante, si no también el hecho de jugar aquí, en este campo, de que esto sea un club en el que los jugadores están muy cómodos, algo que también gusta al jugador. 

Deuda a cero

P: Ahora que sacas a colación el aspecto económico, ¿cómo está el Barakaldo en ese ámbito? Cuando os hicistéis cargo del club, la situación era complicada.

R: No nos podemos quejar. Los jugadores están al día. Desde el primer momento que entré como presidente una de mis principales preocupaciones fue esa. Considero fundamental que un trabajador perciba al día su salario y, en ese sentido, el Barakaldo está cumpliendo.

Dándole la estabilidad y la tranquilidad al jugador de que todos los meses cobra, al final, como cualquier trabajador, se le genera confianza y provoca un mejor rendimiento. La previsión económica con todo, no es mala, ya que se han aumentado las taquillas, el número de socios, etc.

P: Precisamente hoy finalizaba la campaña de socios en la que se regalaba el importe del carnet en bacalao. ¿Qué tal ha ido?

R: Bueno, se ha superado la centena de socios con esta campaña y, junto con la anterior, volvemos a rebasar la barrera de los 2.000 socios, un número casi psicológico ya que hacía años que el Barakaldo no pasaba de esa cifra.

P: ¿Y la deuda que arrastraba el club?

R: Creo que acabando el año vamos a dejar el club a deuda cero, al menos esa es la previsión. Luego se te puede caer algo de publicidad o cosas así pero, en principio, eso es lo que estimamos. Si no solventamos toda la deuda muy cerca vamos a andar.

P: En estas fechas, un 3 de mayo de 2011, resultabas elegido por las socias y socios del Barakaldo como máximo responsable de la entidad. ¿Qué valoración haces de este período?

R: La verdad es que no puedo pedir más. Muchos amigos me dicen que tengo mucha suerte. Y sí, como deporte que es, la suerte es necesaria, pero también creo que se ha buscado, que hemos ido a por ella. Y es que, para ello, ha habido mucho trabajo. De hecho, me gustaría ensalzar la labor de esta directiva porque, más allá de lo deportivo, en dos años quitar la deuda que había es algo muy difícil y eso responde a la intensa dedicación de mis compañeros de junta, que han currado a destajo y hemos conseguido ahorrar de donde casi no se podía  y bueno, en ese sentido, hemos de estar muy contentos y orgullosos.

“No tengo ninguna duda de que la grada va a empujar al equipo, como lo ha hecho siempre”

P: En fin, quedan tres finales que serán vividas a flor de piel. No sé si te apetece dedicar unas palabras o animar a la masa social gualdinegra de cara a estos encuentros.

R: No hace falta decir mucho a esta afición de cara a estas tres finales. Nuestra grada nos ha vuelto a sorprender con su inmejorable respuesta. Lo del otro día, contra el Bilbao Athletic, en un horario que era el peor posible respondieron de forma extraordinaria. El público entendió la importancia del partido y, desde el minuto menos 3, la grada estaba a muerte con el equipo en todas las tribunas. La grada ya percibe las claras opciones de playoffs y en esta fase esta hinchada empuja muchísimo. Saben de la importancia de ayudar al equipo cuando las fuerzas fallan por todos lados y ese es el plus que nos va a dar nuestra afición. Cuando el equipo no pueda más la afición lo va a empujar. No tengo ninguna duda de que va a ser así, como lo ha demostrado siempre, por lo que no puedo hacer otra cosa que agradecerles su apoyo.