Para el entrenador mazarronero, “es importante después de un parón”, seguir con una eficacia tremenda, además contra un equipo del potencial del Granada B que además había sido el único que había ganado al conjunto lorquino.
Contra 10 más difícil
Para Campos había sido un partido con muchos condicionantes que han hecho que el partido fuera muy trabado. Según él, su equipo había tenido “persistencia y constancia”, ante un equipo que "con diez no se había descompuesto”. Aunque reconoció que la victoria llegó con un “golpe de fortuna” al final. Según Campos, hay que seguir trabajando, sabiendo que la “segunda vuelta va a ser más complicada porque todos los equipos, incluidos los de abajo, van a vender cara la derrota”.
Reconoció que no fue un buen partido de cara al espectador, porque había habido muchas pérdidas, con errores evitables. De hecho habían tenido “dos errores” que habían supuesto las dos ocasiones más claras del rival, una de ellas de Machis. Comentó que el Granada B con uno menos, había “juntado líneas”, y analizó que “aunque no lo parezca”, cuando un equipo se queda con uno menos, “se hace más homogéneo”.
Una expulsión justa
Respecto a las críticas del entrenador visitante al árbitro, dijo, desconocer el porqué de las mismas porque “la expulsión es clarísima” e incluso, comentó, el árbitro había podido expulsar a Fatau, y finalizó diciendo que pensaba que el árbitro no había influido en el resultado.
Sobre el rival, Campos comentó, que era un equipo que venía de ganar 1-4 en Écija y 1-3 en Lucena y “en un buen momento”, con jugadores que algunos han debutado en Primera División y que sabían que era “un partido psicológicamente difícil por el cambio de año”, que sólo lo habían preparado el partido desde el jueves, “con dos días de descanso en Nochevieja” y su equipo no había estado “bien con el balón y con los movimientos”. Y deseó que en casa no pasen los apuros que habían pasado contra el filial del Granada.
Dos delanteros
Con respecto a jugar, en las últimas jornadas, con dos delanteros, Campos, comentó que están “jugando igual”, pero las bajas les habían hecho contar con “Pallarés en la línea del centro del campo” en lugar de un jugador más de “equilibrio táctico” como Álvaro o Armando. Porque Pallarés les da “mucho juego aéreo”, remate en las estrategias, y liberar a Ortuño del marcaje de los dos centrales.