Hace unos meses la esperanza carbayona vagaba solitaria, melancólica, recordado viejas tardes de gloria. Una nueva temporada finalizaba y otra vez un fracaso iba quedar grabado a fuego en la retina de los aficionados.

Los jugadores, más que cuestionados, se despedían de un Carlos Tartiere que esperaba mejor suerte. Ni siquiera Diego Cervero, que había vuelto al club como un héroe, había sido capaz de revertir la situación e imponer su garra goleadora, que otros años el Oviedo había disfrutado. La figura del nueve se encontraba vacante y por lo que parece, el club carbayón ya ha encontrado a un nuevo punta que pueda luchar codo a codo con Diego para devolver al club carbayón al fútbol profesional.

Miguel Linares es el hombre elegido por el Grupo Carso para formar parte de la delantera en la plantilla que espera ser la del ascenso. Linares, delantero procedente del Recreativo de Huelva, es un jugador con amplia experiencia en Segunda División y Segunda División B que finalizó la temporada pasada con 12 tantos en su casillero (10 en liga regular y 2 en Copa del Rey), habiendo disputado 39 partidos.

El delantero zaragozano consiguió anotar poco más de diez goles pero arrancó la temporada de una manera espectacular. De sus 12 tantos anotados, marcó 11 desde el inicio de temporada hasta diciembre: Sporting (2), Alavés, Jaén, Girona, Murcia (2), Barcelona B, Zaragoza, y Mallorca (2).

En el primer mes del año el jugador perdió a su madre y desde ese momento encadenó una mala racha en lo deportivo. Solo consiguió volver a ver puerta en el mes de marzo, en el empate a dos de su equipo contra el Zaragoza.

Ágil, con buen desmarque, luchador, con carácter, buen disparo... Así es el nuevo jugador del Real Oviedo que espera este año ayudar al club asturiano en su propósito de volver al fútbol profesional.