Olaizola dirigirá al Mallorca B en su retorno a la Segunda División B, después de pasar una temporada por el grupo 11 de Tercera División, en el cual fue campeón y consiguió el ascenso por la vía rápida venciendo al Atlético Granadilla. La historia de Olaizola está muy ligada a la disciplina del Mallorca. Tras jugar 9 temporadas con la elástica bermellona, consiguiendo una Supercopa y una Copa del Rey, se retiró en 2004 en el club isleño. Como técnico debutó el pasado año en las filas del cadete del Mallorca, pero la delicada situación del primer equipo, muy cerca del descenso a Segunda División B, hizo que se encargara de él en las tres últimas jornadas, consiguiendo finalmente permanecer en la Liga Adelante. 

Las primeras incorporaciones del filial llegan de equipos que el año pasado ya jugaron en la categoría de bronce del fútbol español y descendieron a Tercera División. Nico Baleani ya formó parte de las categorías inferiores del Mallorca. Vuelve a la disciplina bermellona después de pasar por La Roda, equipo que lo fichó el pasado invierno. El centrocampista disfrutó de bastantes minutos en el club albaceteño, llegando a jugar 12 encuentros, ocho de ellos como titular. Por otra parte, Connor Ruane llega al Mallorca B procedente del Constància. Juega en la posición de lateral izquierdo. 

A parte de las incorporaciones, el Mallorca B también ha hecho públicas las primeras renovaciones de la plantilla que consiguió el ascenso a Segunda División B. Se trata de Martí Amer, que cumplirá su cuarta temporada en las filas del filial bermellón; Gabri Izquier, que también tiene experiencia en el Mallorca B en la división de bronce; Jaume Vidal y Juan Cifre