El próximo jueves 31 de julio tendrá lugar el sorteo de las dos primeras eliminatorias de la Copa del Rey, una competición en la que participarán este año todos los equipos vizcaínos encuadrados en el grupo II de 2ªB, a excepción del Bilbao Athletic por su condición de filial.

¿Premio o castigo? Su clasificación la temporada pasada les hizo merecedores a participar en el torneo del K.O. Pero Sestao River, Barakaldo, Amorebieta y Leioa aguardan con intranquilidad su debut, fijado para el próximo 3 de septiembre, pendientes de un sorteo que puede ser decisivo para sus intereses en esta competición. Sin duda el formato de partido único otorga al equipo local una importante ventaja en el plano deportivo, pero no hay que olvidar los kilómetros de distancia, en caso de jugar como visitante, que pueden pesar como una losa no sólo en las piernas de los jugadores, sino en las más que ajustadas arcas de los cuatro equipos vizcaínos.

Categoría y "proximidad geográfica" condicionan el sorteo

Hay que recordar que el sistema de competición establecido por la RFEF contempla, a la hora de efectuar el sorteo, una separación de los equipos participantes en esta primera ronda en dos grupos, según la categoría en la que jugaran la última campaña.  De tal forma, la SD Leioa entraría en el grupo A, formado por los 18 equipos campeones de Tercera División, mientras que Sestao River, Barakaldo y Amorebieta lo harían en el grupo B, integrado por los 25 clubes mejor clasificados de la Categoría de Bronce.

Teniendo en cuenta que la idea es emparejar a un equipo de cada grupo, se procederá a un sorteo previo para excluir a siete equipos del grupo B, que se considerarán exentos de esta primera eliminatoria. Esta clasificación directa y sin desgaste alguno será sin duda el principal deseo de los tres representantes vizcaínos en este grupo.

Una vez realizada la exclusión, el sorteo entre los equipos restantes seguirá “hasta donde sea posible” los mismos criterios de proximidad geográfica que la Federación estableció a la hora de fijar los cuatro grupos de liga. En virtud de esta peculiar disposición, los representantes vascos podrán tener como posibles rivales a los equipos de Madrid, Castilla-La Mancha, Aragón, Navarra o Canarias.

Así las cosas, el Leioa de David Movilla podría enfrentarse a Toledo, Guadalajara, Fuenlabrada o Huesca, además de cualquiera de los tres representantes vizcaínos, mientras que a Sestao, Barakaldo y Amorebieta le pueden tocar a su vez el Leioa, además de Trival Valderas, Atlético Granadilla, Izarra, Teruel o Puertollano.

La importancia de jugar en casa

Visto a priori, complicado panorama para el recién ascendido Leioa, que apelará a que la suerte quiera que su bola salga en primer lugar para poder contar al menos con el arma de Sarriena a su favor ante equipos de mayor potencial. Para los demás vizcaínos, en cambio, serán los kilómetros el principal enemigo a evitar, ya que salvo Leioa o Estella, el resto de rivales supondrían a domicilio grandes distancias por recorrer, que en el caso del Granadilla implicarían el traslado en avión a Canarias.

Más aún, teniendo en cuenta que el grupo geográfico en el que se encuadran los equipos vizcaínos, si no lo remedia la exención de alguno de ellos en el sorteo previo, forma un número impar, el equipo sobrante podría llegar a quedar emparejado con otro sobrante de un grupo diferente.

Cabe recordar que justo a continuación se procederá también al sorteo de la segunda eliminatoria, en la que se emparejarán de forma independiente, por una parte los 25 supervivientes de esta primera fase, y por otra, los 20 equipos de Segunda División que participan en esta edición de Copa.