Se enfrentaban Cádiz Club de Fútbol y Club Deportivo Lealtad en el Ramón de Carranza con el único objetivo de clasificarse para la tercera ronda y acercarse a los dieciseisavos de final. Los goles de Gerardo Navarrete y Airam Cabrera dieron la clasificación al conjunto amarillo. 

El encuentro iba a comenzar con dominio del cuadro local, que en el primer minuto de partido estrellaba en el poste derecho una muy buena volea de Airam Cabrera, tras un saque de esquina botado por Migue García. El Lealtad intentó quitarse este dominio amarillo, pero la intensidad con la que salió el equipo gaditano introdujo al conjunto asturiano en su propia área.

El Cádiz empezó con buen pie

Fue tal el dominio cadista que en el minuto 4 de partido, Gerardo Navarrete se hacía con un balón perdido en la frontal del área para poner el primer tanto con su pierna derecha. Un auténtico golazo que hizo estallar la alegría del público gaditano. 

Tras el gol del centrocampista chileno, los que vestían de amarillo seguían con la portería visitante entre ceja y ceja, gozando de ocasiones como un centro de Migue García que fue rematado por Óscar Rubio a las manos de Javi Porrón, o un balón al hueco de Machado a Airam que tuvo que ser despejado a saque de banda, fuera del área, por el portero visitante. 

Con la inoportuna lesión de Fran Machado, que obligó a Calderón en el minuto 18 a realizar el primer cambio del partido, entrando en su lugar Juan Villar, el conjunto amarillo perdió equilibrio en el centro del campo, y ello propuso que el cuadro visitante adelantara líneas en el campo. Pablo Espina, hasta en tres ocasiones en menos de ocho minutos, puso en peligro la portería de Ricky Alonso, que se mostró certero en sus intervenciones.  

Pasada la media hora, un disparo de Jorge desde fuera del área, tras una larga posesión del Lealtad, hacía estallar el enfado en las gradas del Ramón de Carranza, provocando que los amarillos volvieran a trenzar jugadas para luchar por el segundo gol. Una falta directa que botó Josete por encima del larguero, y un disparo de Óscar Rubio a puerta vacía, que sacó un defensa a córner, fueron las jugadas más peligrosas de los cadistas en la recta final de la primera parte.

Los amarillos sentenciaron

La segunda mitad comenzaría con el mismo guión que la primera, con un Cádiz lanzado a por el segundo gol que se imponía en cada jugada al equipo asturiano. Tan solo dos minutos después de la reanudación, Airam Cabrera se entendía a la perfección con Josete para sorprender a la defensa tras el saque de una falta en la frontal del área. El ariete canario, con su pierna izquierda, la cruzó para poner el dos a cero en el marcador. 

Con el segundo tanto, el combinado visitante bajó los brazos, otorgando al Cádiz el papel de protagonista sobre el césped. Ya en el minuto cincuenta y seis, Migue García llegaba a un centro medido de Kike López para chutar a portería tras realizar un magistral control. Javi Porrón se vio obligado a enviar el balón a saque de esquina. 

El resto del partido fue de puro trámite, pues solo un disparo alto de Dani Peláez tras una falta puso en peligro la meta de Ricky Alonso. Minutos después, el recién incorporado  José Mari, jugador de la cantera del equipo cadista, dispararía desde la frontal del área, siendo esta la última jugada peligrosa del cuadro local. 

En el minuto 88, un saque de esquina iba a ocasionar el dos a uno en el marcador. Óscar Rubio, que no pudo despejar correctamente, dejó completamente solo en línea de gol a Piniella, que solo tuvo que empujar la pelota. 

Con el 2-1 en el marcador, el Cádiz Club de Fútbol se clasificó para la segunda ronda de la Copa del Rey. De esta manera, el conjunto amarillo estará en el bombo del sorteo de la tercera ronda, que se celebrará el próximo 22 de septiembre en Las Rozas. De RB Linense, UCAM Murcia, L'Hospitalet, Mirandés, Cornellà, Huesca, Lleida, Leioa, Real Oviedo, Izarra, Alcoyano, Alcoyano y Barakaldo saldrá el último escalón que deberá superar el Cádiz para enfrentarse a un equipo que dispute competición europea en dieciseisavos de final.