Los goles de Dani Pevida, Carlos Martínez y Borja permitieron al Fuenlabrada reencontrarse con la victoria en el Fernando Torres a costa de un Sestao River que encajaba su segunda derrota en lo que llevamos de temporada. El duelo matutino entre equipos candidatos a estar en la zona alta del grupo a final de temporada se resolvió, con más diferencia de la prevista, a favor del cuadro local, que se desquitó así de las dos derrotas cosechadas ante el equipo de la Margen Izquierda la pasada temporada.

Saltaban los dos conjuntos al campo con escasa novedades en sus formaciones. El Sestao de Ángel Viadero con el mismo once que derrotaba al Getafe B la jornada anterior, y el equipo que dirige Emilio Gerreras con la presencia de Guti en el mediocempo en lugar del lesionado Tello.

Desde el principio se vio a un Fuenlabrada intenso y agresivo, con ganas de dar una alegría a los suyos, y que muy pronto iba a encontrar premio a su decidido arranque de partido.

Apenas se llevaban disputados seis minutos de encuentro cuando un balón de Guti desde el centro del campo con destino a Pachón, era cedido por el capitán a Dani Pevida, quien, ganándole la espalda a la defensa rival, entraba por banda izquierda solo y resolvía con facilidad el mano a mano ante Raúl Domínguez.

El tempranero gol hizo mella en los visitantes, pero no tanta como la lesión de Jito Silvestre antes del minuto 20. Sin su pichichi y referencia ofensiva sobre el césped, el juego del River se resintió en demasía.

La movilidad de los atacantes azules ponía en aprietos a la defensa y el centro del campo verdinegro. Sin embargo el buen juego local no se tradujo en más goles hasta el descanso.

Por su pàrte Yacine y Maestresalas formaron la improvisada y casi desapercibida dupla atacante verdinegra, bastante inofensiva ante el buen hacer de la línea de contención fuenlabreña.

Ángel Viadero decidió adelantar la línea defensiva en busca de recuperar balón en campo contrario, pero

Ferreras, técnico local, demostró tener bien estudiado a su rival

. Los balones medidos a la espalda de la zaga rival seguirían dando quebraderos de cabeza a los visitantes. Raúl Domínguez, su guardameta, ejercía de improvisado línero en alguna de sus acciones para desbaratar con rapidez diversos avances locales.

La segunda parte comenzó por los mismos derroteros. Casi en el mismo minuto que en el primer tiempo el Fuenlabrada volvería a marcar, esta vez de penalti. Un balón largo de Omar mal medido por los centrales verdinegros caía a los pies de Pachón que se inernaba solo en el área. El veterano delanero al frenar su avance para rematar encontraba el derribo por detrás de Mikel Méndez, en una acción que el colegiado valenciano Rives Leal sancionaba con pena máxima y expulsión del zaguero vizcaíno.

Ángel Viadero recomponía su zaga con la entrada de Cacho en el lateral, y, aprovechando el conformismo con la ventaja en el marcador adquirida por el equipo azulón, refrescaba su ataque con el joven Yanis. Fueron los mejores minutos del River en la nefasta mañana fuenlabreña, aunque sería uno de los jugadores de refresco de su oponente, Borja Pérez, el que sentenciaría el choque a los cuatro minutos de su entrada al campo tras una bonita jugada personal.

De aquí al final, poco más daría de sí el encuentro del Fernando Torres, entre un Fuenlabrada que no consiguió devolver la "manita" sufrida en Las Llanas hace justo un año. pero se marchaba como colíder del grupo junto al Barakaldo, y un River que, ante el cúmulo de adversidades y los pinchazos del resto de equipos de la zona alta, daba por bueno rel pitido final sin recibir un mayor castigo.