Año nuevo, vida nueva. Y esta nueva vida que conduce a 2015 lleva al Amorebieta y al Trival Valderas a cruzarse en el último partido de la primera vuelta, con tres puntos de una importancia capital para los dos contendientes. Casi una nueva vida en los albores del nuevo año, mediado el ecuador de la competición. Porque al final la competición pone a cada uno en su lugar, y a medida que se acerca el final, las urgencias por alcanzar los objetivos van apareciendo.

Es el caso de un Amorebieta que sabe que ganar sería dar un paso muy importante, y de paso alejar mucho al conjunto madrileño en su intento por salir del farolillo rojo. También es la situación de un Trival Valderas que necesita ganar para mantener con vida la llama de la ilusión por la permanencia. Una llama que ha revivido en las últimas semanas gracias a un futbolista que ya no estará más en las filas del Valderas.

Nanclares será baja después de marcharse a la disciplina del Levante UD y deja huérfano el ataque alfarero, que pierde a su máximo goleador esta temporada y al futbolista más en forma de la plantilla en los últimos dos meses de competición, después de que le costara entrar en las alineaciones de Marcos Jiménez. Sin duda, una baja muy complicada de tapar para una plantilla ya de por sí limitada.

El fortín de Urritxe

El conjunto vasco ha hecho de su estadio el lugar donde asegurar su tranquilidad esta temporada. Decimosegundos con 24 puntos, a tres del descenso y a cuatro del playoff de ascenso, los vascos han ganado cinco de sus últimos 10 partidos en casa, además de empatar en otras tres ocasiones y sólo ceder la victoria en dos de ellas. De hecho, los azulones llevan 17 puntos de los 24 que tiene en la actualidad gracias a la influencia de jugar como local.

Este sábado querrán aprovechar el factor campo para volver a imponerse a un Trival Valderas que viaja a localidad vizcaína con la intención de llevarse los tres puntos. Todo apunta que el técnico Josué Atela contará con su once de gala para tratar de mantener muy alto el nivel de dificultad para ganar en Urritxe y seguir con la buena senda de resultados de los vascos como locales.

Para el Amorebieta, ganar supondría dejar al Trival muy herido y lejos de ellos. Doce puntos con toda la segunda vuelta por disputar es casi un cuarto de la cantidad de puntos en juego en la segunda vuelta, por lo que sumar los tres puntos sería empezar a alejarse de la parte baja de la tabla y comenzar a pensar en cotas mayores para la escuadra vasca. Orbegozo, una semana más, es la principal amenaza local para derribar la resistencia del Valderas.

Altas y bajas para el nuevo año

Se prevé que vaya a ser un invierno movido en el Trival Valderas para retocar la plantilla que empezó la temporada en el mes de agosto. Ya se han perfilado las dos primeras salidas, con Sergio Nanclares rumbo al Levante y Edu Ruiz, que no ha jugado todo lo que esperaba con destino al San Sebastián de los Reyes. Por otra parte, Basilio, que fuera guardameta del Atlético de Madrid y Fuenlabrada, ya es futbolista del Trival Valderas para reforzar uno de los puestos que ofrece más dudas, aunque parece complicado que viaje esta semana con su nuevo equipo.

Una salida notable la del ex futbolista del Rayo Vallecano, que con siete goles era el máximo goleador de los alcorconeros de forma destacada, a pesar de no ser delantero. Esto trastoca seriamente los planes de un Marcos Jiménez que tendrá que buscar opciones que le permitan tener gol y no echar en falta al mediapunta vallecano.

El lugar de Nanclares podría volver a ser para Joaquín, que no ha tenido mucho protagonismo tras su lesión de rodilla contra el Toledo. El resto del equipo, salvo sorpresa, parece muy definido. Kike bajos palos, con la habitual línea de cuatro para Mario, Propín, Herrero y Raúl, con Mancera y Cruz en el mediocentro madrileño, Gonzalo y Óscar a las bandas, y el dúo Joaquín-Palacios en la dupla de ataque.

Posibles alineaciones