El Cartagena coge oxígeno a costa de El Palo

El Fútbol Club Cartagena dormirá hoy, 14 de marzo, fuera de los puestos de descenso, gracias a la victoria por 2-1 que ha conseguido contra el CD El Palo, conjunto que encadena su segunda derrota consecutiva y, por ello, se aproxima peligrosamente a la zona baja. Nacho Aranda adelantó a los visitantes, antes de que se cumpliera la primera media hora de partido, pero, ya en la segunda mitad, Sebas Ribas y Chus Hevia obraron la remontada.

Justo tras el pitido inicial, los jugadores del Cartagena se abrazaron, durante los primeros 30 segundos, en el centro del campo y le dieron la espalda al palco, en protesta por las cuatro nóminas que se les adeudan. Los integrantes del cuerpo técnico hicieron los mismo, junto a los suplentes, al borde de la línea de cal, mientras los jugadores visitantes, aguardaban pacientemente, antes de devolver el balón.

El partido comenzó de una forma muy equilibrada en cuanto a posesión e intensidad, pero sin que ninguno de los dos equipos se acercase al área rival. Al cumplirse el primer cuarto de hora de juego, el único disparo que se había producido, fue un cabezazo de Sebas Ribas (quien hoy apereció por primera vez sin la máscara protectora, tras su lesión de mandíbula), que se marchó desviado.

Justo tras el pitido inicial, los jugadores del Cartagena se abrazaron, durante los primeros 30 segundos, en el centro del campo.

Pibe fue el primero en probar un lanzamiento entre los tres palos, tras una contra en la que su disparo cruzado, fue despejado a saque de esquina, con el pie, por Jesús Limones. Marín ejecutó dicho saque de esquina al punto de penalti, dónde el disparo del propio Pibe volvió a ser blocado por el meta local. En el siguiente saque de esquina, se produjo una carambola, en la que el ex del Lucena, volvió a salvar a su equipo, llevándose una ovación.

En el minuto 23, Marín ejecutó un lanzamiento de falta, desde el centro del campo, colgado al área, dónde el capitán, Nacho Aranda, consiguió desviar el esférico y que este se introdujera en la portería rival, abriendo así el marcador.

El gol fue el punto de inflexión, desde el cual, los de Palomeque se hicieron los dueños del partido. Carlos Martínez dispuso de varias ocasiones, como un disparo al palo, una chilena que se fue desviado por muy poco o un disparo cruzado que fue blocado por Adrián. También Sebas Ribas dispuso de un disparo en el frontal, en el que apenas tuvo puntería. En dicho saque de puerta, Adri cayó al suelo y el propio uruguayo cazó el balón, pero su disparo lejano se marchó fuera.

Antes del descanso, Pibe pudo haber aumentado la ventaja, con un disparo cruzado, a pase de Damián Zamorano, quien había protagonizado una contra. Sin embargo, Limones volvió a frustrar las intenciones del interior paleño. El rechace le llegó a Jaime, pero su intento de chilena no resultó efectivo.

La remontada

Tras el descenso, los locales salieron a morder y, ya en el primer minuto, Jorge Luque realizó un disparo que Rafita evitó que se colase en la meta rival. El propio capitán ejecutó el saque de esquina que, cabeceó Javier Tarantino, para que Sebas Ribas solo tuviera que colgarla y volver a poner las tablas en el marcador.

El empate no hizo bajar la guardia a los locales, aunque los de Muñoz bien que pudieron dar algún susto. Marín dispuso de otra falta, en un posición similar al del primer gol, pero el lateral diestro probó un disparo directo que atrapó Limones sin problemas.

Sin embargo, Chus Hevia, conseguiría el gol de la tranquilidad. El asturiano, acostumbrado a salvar a su equipo de distintos apuros, cazó un balón en el pico del área grande, sirviendo una vaselina que se coló en la escuadra del segundo palo.

Los locales midieron bien los tiempos del partido y no pasaron especiales apuros hasta el pitido final, a pesar de que pudieron llevarse algún susto, como un cóner, ejecutado por Zamorano, que se paseó por una portería vacía. También Ribas pudo haber dado la tranquilidad a su equipo, con un disparo que se estrelló en el lateral de la red.

La mala noticia para el equipo de Palomeque son las bajas que acumulan, de cara al próximo encuentro, en una plantilla ya de por sí corta. Mikel Robusté aún no habrá terminado de cumplir sus cuatro partidos de sanción y a él se le suman Sergio Jiménez y Migue García, quienes han visto, respectivamente, la quinta amarilla de la temporada. Además, el interior Gato se retiró por lesión en los minutos finales.