La liga de Claudio Barragán

La jornada treinta llegó a la categoría de bronce del fútbol español. Una jornada para analizar la trayectoria de los equipos, así como la proyección de cada uno de cara a las ocho finales que aguardan a los veinte equipos del grupo. Los objetivos de cada conjunto, las ilusiones de cada afición, provocan que el fútbol ponga las emociones a flor de piel. La meta ya se ve, y con él llega el siempre peligroso sprint final. En Cádiz, el liderato se llama "objetivo" y se apellida "licencia para soñar".

Hacerse con la primera plaza del grupo cuarto de la Segunda División B le ha costado sudor y sangre al Cádiz Club de Fútbol, que desde la llegada de Claudio Barragán en el mes de noviembre comenzó la escalada desde la quinta posición. Tras caer el cuadro cadista en el Municipal de La Línea de la Concepción, por dos goles a uno en la jornada catorce (23 de noviembre de 2014), la Directiva del club gaditano decidió cesar a Antonio Calderón del banquillo amarillo, dando su paso al que fuera entrenador de la Ponferradina temporadas atrás, Claudio Barragán. El Cádiz caía a la quinta posición, con una distancia de ocho puntos con el primer clasificado, la UCAM.

Debutaba entonces el nuevo técnico en el banquillo del Nuevo Ramón de Carranza ante el Lucena, conjunto al que el equipo cadista venció sin dificultades por tres goles a cero. Los amarillos comenzaban a mostrar otra cara, otra versión. La victoria alzó al conjunto gaditano a la tercera plaza, con una distancia de seis puntos del conjunto universitario, que empataba en La Condomina ante el Cacereño.

Con diecisiete goles en contra, el Cádiz es el equipo menos goleado de la categoría

En la siguiente jornada, la victoria por un gol a tres en Cartagonova alzaba al cuadro amarillo a la segunda plaza, que aprovechaba el tropiezo de la UCAM en la Ciudad Deportiva del Sevilla Fútbol Club (1-1 ante el Sevilla Atlético) para conseguir una distancia de solo cuatro puntos. Solo una semana después, dicha distancia se vería reducida a dos, al vencer el Cádiz al filial cordobesista en el coliseo gaditano por tres goles a nada, y volver a empatar el equipo universitario. Esta vez lo hacía en casa, por dos goles a dos, ante el San Roque de Lepe.

Llegaba entonces el primer tropiezo de la "era Barragán". Un despiste defensivo en un saque de esquina, en el estadio Romero Cuerda de Villanueva de la Serena, daba los tres puntos al Villanovense, permitiendo que el equipo de fútbol de la Universidad Católica de Murcia, que volvía a cosechar un empate, lograra aumentar a un punto las distancias. En esta ocasión, con empate a cero en casa del filial almeriense.

El año 2015 se iniciaba con la victoria cadista por cuatro goles a cero ante el Arroyo. El festín de los amarillos no sirvió para recortar distancias con la UCAM, que volvía a la senda del triunfo derrotando en Murcia a El Palo por dos goles a nada. A la siguiente jornada, los pupilos de Eloy Jiménez volvían a lograr una victoria en casa, ante la Real Balompédica Linense por un gol a cero, mientras que el Cádiz continuaba haciéndose gigante venciendo al filial bético en el Benito Villamarín.

Mientras el encuentro ante el Real Jaén de la jornada veintiuno quedaba aplazado por las fuertes lluvias que azotaron la Ciudad de Cádiz, el UCAM Murcia volvía a tropezar, y lo hacía empatando a cero ante el colista, el Lucena, en el municipio cordobés. La virtual distancia de cuatro puntos en la tabla dio fuerzas a los amarillos, que a la semana siguiente derrotaron a La Roda en su feudo. El equipo murciano, por su parte, humillaba al Cartagena por tres goles, ante su afición.

Llegaba entonces el golpe definitivo del equipo de Claudio Barragán. La trabajada 'manita' que el Marbella encajaba en el Ramón de Carranza, sumado a la sorprendente derrota del UCAM Murcia ante el filial del Córdoba Club de Fútbol por un gol a cero en tierras cordobesas, situaba al equipo de la Tacita de Plata a solo un punto del equipo universitario. El Cádiz, con un partido menos, comenzaba el asalto al liderato.

El Estadio Nuevo Los Cármenes de Granada era testigo de los frutos del trabajo del entrenador de Manises. Jona Mejía remataba con la cabeza al fondo de las mallas una gran jugada combinativa que ponía la guinda al gran partido realizado por el más fiel perseguidor del equipo universitario. Mientras tanto, estos derrotaban al Villanovense en Murcia por un gol a nada. El cambio de líder estaba a punto de producirse.

El equipo cadista sumó siete victorias consecutivas para llegar a ocupar la primera plaza

El partido aplazado ante el Real Jaén se jugó el miércoles 11 de febrero, día en el que Jona hacía el gol que le daba el liderato al Cádiz al rematar un gran centro raso de Juan Villar, un liderato que, hasta la fecha, sigue en poder del conjunto amarillo. Tenía la UCAM la oportunidad de recuperarlo en la jornada 25, pero los de Claudio Barragán, con la lección más que aprendida, lo defendieron con uñas y dientes. Una espectacular volea de Juan Villar daba la victoria por un gol a cero al equipo de la Tacita de Plata, que celebraba el primer puesto en pleno domingo de coros. La distancia pasaba a ser de cinco puntos, y la moral amarilla sobrepasaba límites inimaginables en el mes de noviembre.

No bajaba el pistón el equipo universitario, que derrotaba por dos goles a cero al filial bético en La Condomina para recortarle puntos a un Cádiz que pinchaba en el Artés Carrasco, ante La Hoya Lorca, con empate a dos. Volvía la emoción a la lucha por el liderato. Una semana después, el estadio de La Victoria de Jaén sufría la victoria murciana por un gol a dos, mientras el Cádiz imponía su calidad y contundencia sobre el Melilla, al que venció por dos goles a nada en el estadio gaditano.

Llegaba en la jornada veintiocho la sorpresa. La Roda realizaba su mejor partido de la temporada y vencía a la UCAM en La Condomina por dos goles a cuatro. El Cádiz, por su parte, había sometido al Cacereño en el Príncipe Felipe, donde logró la victoria por cero goles a tres tras un recital de oficio de los cadistas. Seis puntos separaban al equipo de Barragán de los pupilos de Eloy Jiménez. El equipo intenso, ordenado y con actitud que tanto reclamaba el entrenador valenciano a los suyos desde el primer entrenamiento brillaba en tierras extremeñas.

El fuerte colchón del que disponía el Cádiz Club de Fútbol le salvaba de la dura derrota que sufrió en el Ramón de Carranza, ante su afición, contra el filial del Sevilla Fútbol Club por cero goles a dos. Tropiezo que aprovechaba el equipo universitario para ponerse a tres puntos al vencer al Marbella en su feudo por un gol a tres. Seis días después, los gaditanos demostraron que la caída ante el Sevilla Atlético fue, tan solo, un accidente.

"Intensidad, orden y actitud", las claves de Claudio

La jornada número treinta obligaba a la escuadra gaditana a dar un golpe sobre la mesa para seguir mandando en la clasificación del cuarto grupo de la Segunda División B. El siempre complicado campo del San Roque de Lepe sufría la tiranía de la pegada cadista, que en quince minutos dejó el partido visto para sentencia al ir venciendo por cero tantos a dos, resultado que acabaría siendo definitivo a pesar de las numerosas ocasiones de las que dispusieron los hombres de Claudio. No pudo seguir la estela amarilla el equipo de la UCAM, que caía derrotado por un gol a cuatro ante el filial granadinista en La Vieja Condomina.

A falta de ocho jornadas, el equipo de la Tacita de Plata afronta la recta final con optimismo, con ganas, con una gran comunión con la siempre fiel hinchada cadista, con sesenta y dos puntos en su casillero y una diferencia de seis puntos más la diferencia de goles con el segundo clasificado. A quince puntos del quinto. Con Claudio Barragán en el banquillo, el Cádiz Club de Fútbol ha obtenido trece victorias, un empate y dos derrotas, consiguiendo treinta y cuatro dianas y recibiendo solo seis.

Las visitas de Almería B, Real Balompédica Linense, Cartagena y Villanovense al Ramón de Carranza, y los viajes a El Palo, Lucena, Córdoba B y Arroyo de La Luz marcarán el devenir del liderato del grupo cuarto, con la siempre mirada atenta de la UCAM Murcia, único perseguidor del cuadro gaditano. Es evidente que, desde la llegada de Claudio Barragán al Cádiz, la zona alta del grupo cuarto ha dado un cambio radical.

De contar solo las jornadas en las que el ex entrenador de la Ponferradina ha dirigido al 'submarino amarillo', es decir, desde la decimoquinta hasta la trigésima, esta sería la tabla clasificatoria: