Tras mucha incertidumbre en la parroquia guipuzcoana, el Real Unión logró un cómodo 2-0 contra un Amorebieta que, lejos de la tranquilidad, se asoma cada vez más al precipicio de los puestos de descenso. 

Tarde de fútbol pasada por agua la que se vivió en el Stadium Gal de Irún el pasado sábado a las 16:00. El ambiente estaba intranquilo. A pesar de haberse confirmado el pase a la final de la Copa Federación, el equipo llevaba cinco jornadas sin ver la victoria en liga. Aitor Zulaika sorprendió a su público con un 11 sin Ozkoidi ni el pichichi navarro Galán. Comenzó el partido sin mucho juego y sin que ninguno de los conjuntos brillara. Aún así, se percibía más solidez en el conjunto irundarra.

Llegó el minuto 20 y con él la primera ocasión de gol. Eneko Romo robó la cartera en el centro del campo y dio un pase en profundidad por la banda derecha para Silas, que la puso templadita para Goikoetxea, pero la defensa cortó el centro.

En el minuto 30 un balón que llegó a Juan Dominguez acabó en el fondo de las mallas. El veterano unionista se zafó de dos rivales antes de enganchar un zapatazo cruzado que no pudo detener el meta del conjunto vizcaíno.

Desde ese momento y hasta el final de la primera mitad, el Amorebieta tuvo más protagonismo con dos ocasiones claras que detuvo la joven promesa irundarra que defiende la meta txuribeltz cedido por la Real Sociedad este año, Jon Tena.

La segunda parte comenzó como la primera, con dominio local. Las acometidas irundarras para penetrar la portería del Amorebieta no cesaban, la mayor parte por la banda izquierda, por mediación de las botas de Seguín. Aún así, no crearon demasiado peligro porque los balones de Seguín no encontraban rematador.

En el minuto 80, Aimar Sagastibeltza recibió a 5 metros de la frontal y puso un balón mediante su pierna izquierda que, con ayuda de un defensa, se coló por la escuadra de la portería rival.

El Real Unión ganaría 3 puntos de oro con los que dormiría en primer puesto, aunque el Huesca hizo sus deberes y le arrebató esa primera plaza el domingo. 51 puntos y segundo clasificado. Volverá a jugar contra un vizcaíno la semana que viene, pero como visitante, en Barakaldo.

Sin embargo, el Amorebieta mira con peligro como la diferencia de dos puntos respecto al Atlético de Madrid B le salva momentáneamente del puesto de promoción de descenso. La semana que viene intentará respirar sacando tres puntos en casa frente al Sestao.