El sol brilla en la capital almeriense, el viento arrecia por las transitadas calles de la ciudad de la orilla del Mediterráneo. En la cafetería Burana del Paseo de Almería nos espera el míster malagueño, que ha logrado imprimir un grado de competitividad altísimo en el filial rojiblanco, con el claro objetivo de luchar por todo en las últimas jornadas de la competición regular. Miguel Rivera Mora (Málaga, 1961), con el rostro calmado y la sonrisa dibujada de forma permanente, responde a nuestras preguntas con la tranquilidad propia de un auténtico veterano de guerra, curtido en mil batallas tanto en Tercera División como en Segunda B, categoría que conoce con los ojos cerrados.

Su gesto afable nos invita a pensar en la gran unión que reina en el vestuario almeriense en estos momentos, máxime cuando el equipo se juega absolutamente todo en estas últimas jornadas, de cara a la posible disputa de los playoffs de ascenso a Segunda División. Sus 26 años de carrera en los banquillos del mundo del fútbol le avalan como firme candidato para llevar al filial rojiblanco a la cúspide. La posibilidad está ahí.

Pregunta: ¿En qué momento decide Miguel Rivera convertirse en entrenador de fútbol?

Respuesta: Estaba ya en el tramo final de mi carrera como futbolista en el Club Deportivo Lauro en la categoría de Regional Preferente. Un día, el equipo infantil de este club se quedó sin entrenador y me ofrecí al presidente para empezar a entrenarlo. Recuerdo que me acerqué a los chavales y les pregunté que de cuantos balones disponían. Desde ese día, fue como un veneno que me entró dentro.

P: El equipo almeriense se ha convertido en una de las revelaciones del grupo IV de Segunda B. ¿Qué balance hace de lo que lleva de temporada en el club?

R: El balance es positivo, hay momentos en los que nos hemos tenido que poner un poco autocríticos, pero si hacemos un contexto general hay que ser muy positivos, después de todo lo que sufrimos la temporada pasada y con la conciencia de lo que costó. La idea era hacer una temporada tranquila, una temporada que nos hiciese olvidar todo el sufrimiento de la pasada campaña. Nosotros teníamos un gran objetivo, independientemente de formar jugadores que puedan dar el salto al primer equipo, no queríamos empezar en los puestos de abajo, porque había mucho miedo dentro de la organización del club, lo cual conseguimos. Logramos establecernos en la parte media de la tabla, llegando a coquetear con los puestos de playoff de ascenso, una vez que hemos conseguido mantener una cierta estabilidad competitiva, no nos ponemos ninguna barrera y vamos a intentar mejorar en todos los aspectos posibles.

P: Actualmente el Almería B ocupa la tercera posición del grupo IV. ¿Cuáles cree que son los máximos rivales del filial en la lucha por el playoff de ascenso?

R: Nosotros mismos. Primero tenemos que olvidarnos del playoff, siempre que hemos ido a competir sin la obligación, desde la ilusión, centrando la energía de todos los compañeros exclusivamente en el partido que nos toca, ha ido bien. No nos viene bien la distracción, porque se convierte en nuestro peor enemigo, hay grandes equipos que evidentemente tienen la obligación como el Cádiz, el Jaén, etc. Que a nadie le extrañe la actual situación del UCAM, pese a ser un recién ascendido, somos conscientes del potencial que hay detrás y del magnífico trabajo que están haciendo. La gran verdad nuestra es que nos hemos metido ahí por trabajo, porque estábamos disfrutando, sin embargo cuando tu te ves ahí, que has conseguido alcanzar ese objetivo siguiendo un camino concreto, y te sales de ese camino, es cuando se convierte en tu peor enemigo para poder disfrutar.

"El balance de esta temporada es positivo aunque hay que ser autocríticos"

P: ¿Qué película refleja la actual situación del Almería B?

R: "Cinderella Man". Es la historia de un boxeador, que tuvo que resurgir de sus propias cenizas. Hace poco la pusieron en la televisión y se la recomendé a los chavales, sé que no todos la vieron, pero es una película muy recomendable porque es esa etapa de una fuerte recesión económica donde en Estados Unidos se pasa de tener todo a verse sumido en la máxima pobreza. El protagonista es un boxeador cotizado, que se lesiona y desaparece de la primera línea y tiene que trabajar mucho en los puertos, cargando sacos como estibador, es capaz de encontrar otra vez una oportunidad, sacando adelante a su familia con trabajo, constancia, honradez y perseverancia. Es una película que con tantos valores y como acontece todo, tiene un final feliz, que es el que pretendemos todos.

P: El equipo está mejorando las estadísticas de la primera vuelta hasta el momento. ¿Cuál es el objetivo que se marca a corto plazo?

R: Nosotros tenemos que marcarnos objetivos diarios, los que formamos parte del cuerpo técnico, tenemos que ser más formadores que entrenadores, para estar corrigiendo a diario todos los posibles errores. Lamentablemente todos los que tenemos responsabilidades formativas, educativas, lo tenemos bastante complicado. La sociedad, con honrosas excepciones para los que estudiáis, provoca una inconsciencia en la juventud. Normalmente les llega demasiado sin haber hecho los suficiente méritos, los entornos, los familiares, la propia sociedad te publicita la vida sin el mínimo sacrificio, por lo que el tratar de concienciar a la juventud para hacerles ver que lo que tienen es mínimo en comparación con lo que pueden llegar a tener, es un camino arduo, por eso digo que el objetivo más inmediato tiene que ser concienciar al jugador.

P: ¿Qué falló la jornada pasada en Cádiz para encontrarse con un 3-0 en contra?

R: Fallamos todos, yo me siento el primer responsable, porque estuvimos a lo largo de toda la semana tratando de concienciar a todos de que si queríamos tener una oportunidad al enfrentarnos al mejor equipo de la categoría, el Cádiz, había que hacerlo todo bien. Hay que reconocer que el Cádiz es uno de los equipos que nos gana, y además lo ha hecho de forma fácil, porque tampoco tuvimos nuestra mejor versión. Sin embargo, nosotros empezamos a fallar una semana antes, ya nos estaban dando demasiado azúcar, todos decían que éramos muy buenos, nos habían llevado a infinitas tertulias y entrevistas, y daban por hecho que el objetivo estaba más que conseguido, ahí es donde encontramos los mayores obstáculos los técnicos, porque los futbolistas se ven terceros en la tabla, y a veces se olvida el magnífico trabajo que hicimos como equipo ante el Lucena y ante la Balona en el Mediterráneo, donde el equipo demostró solidaridad defensiva, trabajo colectivo y constancia. El día del Cádiz nos faltaron todo este tipo de valores, por lo que nos ganaron con relativa facilidad.

"En el partido contra el Cádiz fallamos todos, me siento responsable"

P: Si tuviera que reforzar alguna línea del Almería B, ¿Cuál sería?

R: Reforzaría las mentes de todas las líneas, lo que me planteo a diario es como reforzar todas las mentes de los jugadores, si desde el cuerpo técnico conseguimos esto, no tenemos por qué reforzar al equipo. Hoy día que todo está mucho más informatizado, creo más en la persona, en el ser humano como tal, y ahí hay un potencial donde los técnicos precisamente tenemos que trabajar.

P: ¿Hay algún jugador del grupo IV que le gustaría tener en su equipo?

R: Hay muy buenos jugadores, pero muy por encima de estar pendientes de lo que tienen otros, creo que ahora mismo podemos disfrutar de lo que tenemos, no soy muy avaro en ese sentido de tener lo que otros tienen.

P: ¿Qué jugador ha sido el que más ha progresado desde inicio de temporada sin que usted se lo esperase?

R: Hay dos o tres jugadores, pero si que es verdad que uno de los que más nos agradó a todo el cuerpo técnico fue Gianfranco, el meta titular, ya que pasó de la no participación competitiva a haberle dado una confianza para adueñarse de la portería. Sé que no se suele hablar mucho de los porteros, pero cuando está bien el es un equilibrio, aunque a veces por la inmadurez comete errores que resultan un tanto infantiles, pero una de las mejores expresiones, de estar en la suplencia y tener dudas de su continuidad en el equipo, ha pasado a ser uno de los principales referentes, independientemente de lo de Dani Romera, que ha sido una eclosión extraordinaria, la llegada de Iván Sánchez, que venía de una etapa un poco irregular y la continuidad de Antonio Marín.

P: ¿En qué posición ve al equipo en la última jornada de Liga?

R: No lo sé, pero seguro que vamos a estar donde nos merezcamos. Todos tenemos nuestros sueños, pero como no me gusta jugar a ser futurólogo, nos tenemos que centrar en estar donde nos merezcamos, pero evidentemente me encantaría terminar lo más arriba posible en la clasificación, pero aún hay mucho trabajo por delante.

P: ¿Teme que la próxima temporada se marchen jugadores importantes del club a otros equipos?

R: Temor hay poco. En el fútbol siempre hay muchos cambios, porque se mueve todo por intereses, un año están unos jugadores, otro año otros distintos. En un filial esto está bastante más acentuado, vamos de criba en criba, todos los años llegan muchos jugadores y no todos tienen la progresión que el club espera, lo que no significa que dejen de ser válidos para ser futbolistas, sino que puede que no sean válidos para el proyecto que tiene en mente el club. También hay que tener en cuenta que van entrando muchos jugadores de las categorías inferiores, nosotros por ejemplo tenemos muchos juveniles. De hecho, el año pasado en el mercado de invierno llegaron unos cuantos jugadores para reforzar el equipo, y luego tuvieron que marcharse de nuevo. Recuerdo que de la pasada temporada a esta hay unos dieciséis jugadores nuevos aproximadamente, doce de ellos con posibilidad de ser titulares: Víctor Ibáñez en la portería, Sergio Iglesias y Jaime Paredes en los laterales, Bonaque de central, Mario Martos, Nico Varela en la banda derecha, Nono en la izquierda, Cristóbal en la mediapunta y Borja Lázaro arriba como punta. Lo que realmente tiene mérito es haber formado un equipo prácticamente nuevo y que haya resurgido con tanta fuerza.

P: En caso de que el equipo ascendiese a Segunda, ¿dónde les llevaría de viaje?

R: Habría que preguntárselo a ellos porque seguro que no se quieren venir de viaje conmigo, porque estaría mirando la comida, estaría observando todas las pautas de comportamiento, etc. En ese caso dejaría que ellos decidiesen, seguramente elegirían un sitio que tampoco me apetecería mucho a mi. Casi preferiría que ellos lo disfrutasen por su cuenta, mientras que yo me iría con mi señora a un sitio tranquilo, aunque puede que fuera algún día a visitarlos.

P: En estos momentos el primer equipo está pasando por momentos difíciles, usted tuvo un pequeño paso como entrenador. ¿Qué carencias observó?

R: Las preguntas sobre el primer equipo tendrían que responderlas el cuerpo técnico del primer equipo. Es verdad que tuve la suerte de poder disfrutar con ellos tres días y competir en un partido extraordinario ante el Real Madrid, pero es lo que yo he dicho siempre, hay los suficientes recursos, tenemos todos una muy buena relación, y tenemos que remar en la misma dirección. Sabemos cual es nuestro papel y el papel de este entrenador es dirigir el filial sin dejar de apoyar en ningún momento al primer equipo. Ayer por ejemplo entrenaron siete integrantes del Almería B con el primer equipo, nosotros tenemos que tener siempre una predisposición para ayudar en todo lo posible.

P: ¿Ve posible la permanencia del Almería en Primera División?

R: Por supuesto, tenemos que empujar todos en la misma dirección para que se consiga de una vez por todas.

"Nuestro principal objetivo es ayudar al primer equipo en todo lo que podamos"

P: Hay ciertos sectores de la afición almeriense que reclaman la presencia de más jugadores del filial en el primer equipo ante las carencias demostradas en las últimas jornadas. ¿Qué tres jugadores subiría al primer equipo?

R: Creo que ya han subido, de hecho ya han debutado muchos de ellos. El año pasado estuvo Hicham, que por cierto hizo un gol en el encuentro ante la Real Sociedad, que sirvió para darle la victoria al Almería y convertirse en corresponsable de la permanencia en Primera. Por otro lado, Antonio Marín ha debutado con el primer equipo, Dani Romera, Iván Sánchez, Antonio Puertas, Carlos Selfa, José Ángel y Gaspar, que lo hizo el año pasado. Ese es nuestro verdadero y gran objetivo, ir buscando ese trabajo que te lleve a ayudar al primer equipo, y lo más importante, que cuando se nos necesite estemos ahí.

P: ¿Cuáles son los jugadores más tímidos del vestuario? ¿Y los más extrovertidos?

R: Hay un poquito de todo. Si tuviera que destacar a alguien por ese aspecto introvertido sería Antonio Marín, pero es una persona muy educada y comedida. En el lado opuesto, los más extrovertidos serían José Ángel y Akrong, que son personas que también les viene bien al equipo. A mi también me gusta darles una cierta privacidad en este sentido. El año pasado me llevé una sorpresa muy agradable con un jugador, del que tenía un concepto totalmente diferente al que tengo ahora, fue un descubrimiento extraordinario, estoy hablando de Jaime Paredes, que al parecer era uno de los más tímidos del vestuario, pero lo que realmente estaba haciendo era comportarse como una auténtica esponja, mirando todo lo que hacíamos y decíamos, para luego imitarnos a cada uno de nosotros. Recuerdo el viaje de vuelta de Extremadura, que cogió el micrófono y dio un auténtico ejemplo de monologuista, nosotros nos quedamos totalmente asombrados ante ese cambio de actitud tan repentino. Este año seguramente nos llevemos una sorpresa en ese aspecto, pero lo que si es cierto es que hay un muy buen nivel de compañerismo, de trabajo diario, por lo que estamos muy contentos.

P: ¿Se llevaría a algún jugador a un viaje cultural?

R: La verdad es que no tengo ni idea, pero siguiendo con el concepto de cultura, he aprendido y sobre todo he conseguido actualizarme. Trabajar con la gente joven logra rejuvenecerte en ese aspecto, ellos me ponen merengue, reggaeton, y yo no tengo ningún problema mientras se mantengan unos parámetros mínimos de decencia, porque hay cosas que son insoportables.

P: Imagínese que se encuentra a un jugador de fiesta un día previo a un encuentro liguero. ¿Cuál sería su reacción?

R: Ellos lo saben. Nosotros tenemos nuestro pequeño régimen interno y buscamos sobre todo compromiso, si algún día un jugador se equivoca pues lo tendrá que pagar.

P: ¿Cuál fue el último libro que leyó?

R: Me he leído pocos libros pero ahora nos estamos leyendo 'El símbolo perdido' de Dan Brown. Te voy a recomendar 'La Décima Sinfonía' de Joseph Gelinek.

P: De todos los entrenadores mundialmente conocidos, ¿Cuál es el que mejor refleja su filosofía del fútbol?

R: Miguel Rivera. Llevo muchos años siendo muy autodidacta, si bien es cierto que de todo el mundo se puede aprender, hay determinados aspectos de algunos entrenadores que me gustan y otros que no. Para encontrar a alguien que se parezca a Miguel Rivera tiene que ser solo y exclusivamente Miguel Rivera. Soy un compendio de carácter, de aceptar los errores, contrario a la hipocresía y a la mentira. A mi me gustaba mucho Luis Aragonés, porque yo creo que ha sido una de las personas que al final ha sido reconocido, pero le han dado más mérito a otros que le han copiado en diversos aspectos que a el mismo. Quien comenzó a jugar al fútbol de toque, a agrupar a gente pequeña en el centro del campo y sobre todo quien nos dio ese nivel mundial con la consecución de la Eurocopa 2008 fue Luis, lo demás fue una continuidad. Lo que pasa es que Luis mediáticamente era un desastre, un hombre que perdía los nervios con facilidad, si el se encontrara en mi lugar en este momento soltaría alguna aberración y no pasaría nada. Era un tipo con una integridad y una grandeza increíbles.

P: ¿Va a hacer cambios en el once respecto al de la pasada jornada?

R: Nosotros no tenemos secretos, es verdad que hay disponibilidad de casi todos. Iván Pérez está entrenando con cuidado por unos problemas en el tobillo, todo dependerá de los jugadores que estén con nosotros finalmente. Hay veces que está Dani, otras veces que no, hay veces que también Antonio sube al primer equipo, etc. Carlos Selfa, por otro lado, ha estado dos semanas lesionado, el otro día reapareció en Cádiz pero con cuidado para que no recaiga de la dolencia. El once va a ser prácticamente el mismo.

P: El equipo realizó tres incorporaciones en el mercado de invierno: Aitor García, Rubén Sánchez y Mario Martos, que ha vuelto un año más al equipo almeriense. ¿Qué rendimiento están dando?

R: Rubén es un juvenil, aunque entrena con nosotros y suele jugar con nosotros para que vaya cogiendo rodaje competitivo. Por otro lado, está Mario, un futbolista que vino con un problema de tobillo, pero que poco a poco lo hemos ido incorporando al once. Con Aitor tenemos esperanzas, es un poco inmaduro, pero tiene muchos aspectos positivos, es un chaval polivalente, y contando con que nosotros necesitábamos a un jugador que pudiese jugar en ambas bandas, el lo hace a la perfección, tiene gol, pero posiblemente tenga que corregir algunas pautas de trabajo defensivo, y ordenar definitivamente su cabeza. En definitiva, nosotros no hacemos fichajes por el simple hecho de fichar, sino que buscamos un perfil con proyección de cara al futuro como por ejemplo Rubén Sánchez, que se fichó en edad juvenil porque entendemos que es un futbolista muy prometedor.