Almería B y Guadalajara empataron en un encuentro marcado por la igualdad, donde el filial almeriense dominó la primera mitad y el conjunto alcarreño hizo lo propio en la segunda parte. Tanto Miguel Rivera como Carlos Pérez Salvachúa alentaron a los suyos para lograr un resultado positivo, de cara al encuentro de vuelta, que tendrá lugar en el Municipal Pedro Escartín, feudo de los blanquivioletas. 

En el partido del Mediterráneo destacó un futbolista por encima de todos, ese futbolista que es capaz de desnivelar la balanza para un lado o para otro , ese futbolista que se echa el equipo a las espaldas en las situaciones más complejas, ese futbolista que tiene la capacidad de contagiar a sus compañeros de la intensidad suficiente como para competir aunque el rival lo haga mejor sobre el terreno de juego, ese futbolista en el día de hoy ha sido Iván Sánchez, el ex canterano del Atlético de Madrid, que se ha convertido en una auténtica pesadilla para la zaga alcarreña, que se ha visto obligada a colocarle a un zaguero que hiciera las veces de lapa, para desbaratar las posibles ocasiones que generara por la banda izquierda. 

Iván Sánchez empezó el encuentro desbordando con su calidad y velocidad por la banda, sobrepasando en todo momento a la retaguardia blanquivioleta, que no conocía la fórmula para pararle los pies. El joven canterano rojiblanco ha sido el encargado de materializar el penalti cometido sobre Dani Romera, con una tranquilidad propia de un veterano en estas lides. Con el gol de los almerienses, se ha echado el equipo a las espaldas para comandar el ataque junto con Antonio Puertas y el ya mencionado Dani Romera. Sin embargo y con el paso de los minutos, se ha ido viniendo abajo por el cansancio y por la presencia permanente de Dani Gómez, que se ha convertido en su particular pesadilla. Pese a ello, Iván Sánchez ha completado un encuentro modélico, confirmando lo que se ha visto a lo largo de la temporada, que es una de las joyas de la cantera rojiblanca.