Un importante punto de inflexión en la eliminatoria de los playoffs de ascenso a la Liga Adelante, en el que el Villanovense cayó contra el Bilbao Athletic, fue la expulsión, en el partido de vuelta del lateral zurdo, José María Tapia, por doble amarilla, a falta de media hora para cumplirse el tiempo reglamentario. Los de Julio Cobos habían ganado la ida por el resultado de 2-1 y, en la vuelta, el filial del conjunto vasco remontó con un 2-0. Ambos goles llegaron con el equipo extremeño en inferioridad numérica.

Hoy, 3 de junio, se ha hecho oficial que el comité de competición ha retirado la segunda amarilla que le fue mostrada al hijo del presidente de la entidad, ya que las pruebas videográficas que aportó el club, demuestran que el jugador rojiblanco fingió la agresión y que, en consecuencia, el colegiado balear, Santiago Varón Aceitón, erró en su decisión.

En consecuencia, el natural de Villanueva de la Serena, quien previsiblemente seguirá vistiendo la elástica verde la próxima campaña, no tendrá que perderse el primer partido de la temporada, aunque al conjunto extremeño siempre le quedará la duda de cómo hubiera sido el devenir de la convocatoria de no haberse producido el fallo arbitral.