Difícilmente podía presagiar Jon Gaizka Apraiz Argintxona que el intrascendente partido a nivel clasificatorio con el que su equipo, la SD Amorebieta, despedía la temporada en La Canaleja de Alcorcón el pasado 17 de mayo iba a ser el último de su carrera futbolística. En la antesala de sus vacaciones de verano unas primeras molestias en el ambulatorio provocarían el ingreso del jugador eibarrés en el hospital, donde varios días entre tratamientos y pruebas médicas han derivado en la drástica decisión, aconsejada por los médicos, de abandonar la práctica del fútbol a nivel de competición.

"Afortunadamente los médicos me han dicho que no ven nada y que estoy bien, y yo, a pesar de que me encuentro aún con medicación, me siento normal", reconoce el propio Apraiz, que trata de asimilar el inesperado cambio en su vida que supone dejar el fútbol: "Es un palo, sobre todo por la forma en que llega. Está claro que la vida no se acaba en el fútbol y que tengo que enfocarla de otra manera, pero ahora mismo me centro en terminar de recuperarme, hacer mi rehabilitación, y luego ya iré pensando poco a poco lo que voy a hacer en el futuro".

"Pediré permiso al Amorebieta para que me dejen entrenar en Urritxe."

Apraiz, que confesaba estar muy cerca de renovar con la SD Amorebieta, lamenta sobre todo lo imprevisto de la situación: "Las conversaciones con el nuevo Director Deportivo, Fernando Arana, estaban muy avanzadas. Llevo toda mi vida jugando al fútbol y no sé que voy a hacer. Tendré que hacer deporte de otra manera, pero el fútbol no lo puedo dejar. Tampoco me veo por el momento sentado en un banquillo, aunque quién sabe…Al menos disfrutaré julio y agosto enteros de vacaciones, tomando el sol en la playa,  como hacía tiempo que no podía".

El defensor eibarrés confesaba a VAVEL que seguirá jugando a fútbol aunque a otro nivel: "Quiero volver a salir a correr en cuanto pueda, y pediré permiso al Amorebieta para que me dejen entrenar en Urritxe. Puedo jugar a algún otro deporte, a palas por ejemplo, pero de alguna forma tendré que quitarme el ‘mono’ de fútbol".

"Los amigos y la gente que he conocido en el mundo del fútbol es lo mejor que me llevo". 

Preguntado por qué es lo que le  ha aportado el fútbol a su vida, el futbolista guiouzcoano lo tiene claro: "Los amigos y la gente que he conocido en el mundo del fútbol es lo mejor que me llevo. Unas vivencias que se quedarán siempre para el recuerdo en todos los sitios donde he tenido la suerte de jugar. Estoy satisfecho con lo que he hecho, he dado todo en el campo para cada uno de los equipos que he defendido, y sólo me quejo por dejarlo así. Por supuesto que a Urritxe iré a algún partido, pero me va a costar ver el fútbol desde la grada".

Apraiz, forjado en la cantera del Eibar, y que desarrolló su carrera en Segunda B en tres equipos vizcaínos, Lemona, Sestao River y SD Amorebieta, se queda cerca de completar la cifra de 200 partidos en sus siete temporadas en Segunda B, categoría en la que debutó un 7 de septiembre de 2008. Lateral o centrocampista, preferentemente desde el carril derecho, consiguió ocho goles en su carrera – el último de ellos en el Alcoraz de Huesca – y este año llegó a ejercer como capitán del Amorebieta luciendo su brazalete en un par de ocasiones.