El recién ascendido Gernika quiere conformar cuanto antes la plantilla con la que afrontará la temporada de regreso a 2ª División B, y para ello, además de renovar a más de la mitad de la plantilla que consiguió el brillante ascenso esta temporada, pretende atar ya las necesarias incorporaciones para apuntalar las líneas a priori más carentes de efectivos como es la delantera, a fin de buscar complemento y alternativas a su pichichi Imanol Etxabe.
En este sentido se puede avanzar los fichajes de Josu Santamaría, delantero porcedente del Bermeo, y Endika Bordas, centrocampista del Amorebieta, además del interés por el atacante Ander Franco, todos ellos jugadores bien conocidos por el técnico Jabi Luaces.
Josu Santamaría tiene 25 años y a pesar de provenir también del grupo IV de Tercera, acredita en su curriculum experiencia previa en la Segunda B, además de otros clubes vizcaínos como Zamudio, Gernika o el propio Bermeo, donde ha jugado esta última campaña. El ariete, hermano del actual jugador del Bilbao Athletic, Gorka Santamaría, también se formó en Lezama, de donde salió cedido en 2010 al Ciudad de Lorquí primero y Barakaldo después. Tras un efímero paso en 2013 por Urritxe, ahora espera asumir en Urbieta el protagonismo del que no gozó en sus anteriores clubes en la categoría de bronce.
Por su parte Endika Bordas es, a sus 33 años, el más veterano de las incorporaciones. Natural de Bermeo, progresó por las categorías inferiores del Athletic, hasta su debut en Primera División con el primer equipo. Tras su salida de Bilbao hace diez años, Bordas ha militado por diferentes equipos españoles, entre ellos Córdoba y Salamanca, además de una experiencia en el fútbol georgiano. Regresó hace tres años a Vizcaya para jugar en su Bermeo natal, lo que le permitió ser captado por el Amorebieta, club donde ha jugado estas dos últimas temporadas de forma intermitente a causa de sus problemas físicos.
Finalmente Ander Franco Tejerina es un futbolista vitoriano de 26 años, que además de jugar en punta puede caer a bandas. Tras jugar en los filiales de Recreativo de Huelva y Alavés B, despuntó en el Haro Deportivo, lo que le valió para llamar la atención de Ángel Viadero y hacer la pretemporada con el Sestao River la pasada campaña, aunque a finales de verano la SD Eibar lo captaba para cederlo al Lagun Onak.