Algeciras y Balompédica Linense se enfrentaron el domingo, pero de algún modo el partido, en el terreno extrafutbolístico, sigue en marcha. La culpa de ello la tiene el asalto a la sede del Algeciras, situada en el mismo estadio Nuevo Mirador, que se produjo el domingo horas antes del partido, del que se hicieron eco algunos diarios de ámbito nacional.

En un primer momento se acusó directamente a hinchas de la Balona de haber protagonizado dicho ataque. El duelo siempre se juega en un ambiente bastante caldeado y, de hecho, se había declarado como de alto riesgo, pero nadie esperaba que unos encapuchados armados con bates y bengalas entraran en la sede social del club albirrojo. Aproximadamente, unas treinta personas irrumpieron en el lugar y provocaron daños en el mobiliario.

Horas después, medios de la zona publicaban que la Policía Nacional había detenido en Marbella a varios aficionados del Cádiz como presuntos responsables del suceso. El Cádiz, que se había enfrentado al Algeciras la semana anterior, jugaba ese día ante el Marbella, por lo que era posible que, de camino a la ciudad malagueña, algunos Brigadas Amarillas, grupo de hinchas del Cádiz, hubiesen parado en Algeciras. En cualquier caso, la Policía Nacional desmintió estas detenciones, lo que hizo que esta teoría quedara en entredicho.

Sin embargo, la cosa no ha acabado ahí. Alfredo Gallardo, presidente de la Balompédica Linense, declaró que el equipo que preside romperá relaciones con el Algeciras hasta que su presidente y su vicepresidente se disculpen por haber acusado a aficionados balonos de haber perpetrado esa acción violenta sin prueba alguna. Declaró que su acusación va contra ambos, "no contra el Algeciras como entidad, porque ésa y su afición, que tuvo un comportamiento muy correcto, nos merecen los máximos respetos". También dijo que el hermano del presidente, que posee la concesión del bar de la sede social, sabía que los agresores no eran de La Línea.

El Algeciras ha emitido en las últimas horas un comunicado, tendiendo la mano a la Balona a acabar con las polémicas, que, según ellos, no deben ir más lejos de lo deportivo. Además, en el comunicado se asegura que el club no se pronunciará hasta que la autoría de los hechos quede claramente establecida.