Una vez más La Florida volvió a ser propicia para el River, que aprovechó la visita al vecino Portugalete para reivindicarse con su primer triunfo en 2016. Fue un partido que no defraudó al buen número de espectadores que se congregó en la matinal de La Florida por su intensidad, su emoción y por supuesto la incertidumbre del resultado hasta el inesperado desenlace final. La lógica alegría de los verdinegros contrastó con la decepción de los locales, que vieron volar en el descuento tres nuevos puntos en un momento de máxima necesidad para sus esperanzas de mantener la categoría.

Dispuestos a la ’batalla’

Esa obligación de sumar de tres en tres para conseguir salir del fondo de la tabla quedaba reflejada en la apuesta de su técnico, Axier Intxaurraga, que ante las bajas de dos de sus piezas claves en la mediapunta, optaba por salir con dos delanteros centros natos dando la oportunidad a Iker Zárate de formar dupla con su paisano Galder contra el equipo de su pueblo. Un sistema 4-4-2 con Valín e Ioritz en un doble pivote dispuesto para destruir juego, renunciando a elaborar en la zona ancha, y recurriendo a desplazamientos de balón en paralelo de sus laterales para las caídas en banda de sus puntas . Una apuesta sencilla pero que resultó bastante efectiva en el primer tiempo,  ya que tanto Galder como Zárate fueron capaces de bajar buena parte de esos balones y generar juego de espaldas a la portería.

Silas se sacrificó en tareas defensivas
Silas se sacrificó en tareas defensivas

 En el bando contrario Txus Pinedo no alteró a pesar de las numerosas bajas su habitual 4-2-3-1, aunque llamó la atención la posición retrasada de Riki como lateral izquierdo, a fin de que Tarantino ayudara a Neira en la incómoda tarea de fajarse en el cuerpo a cuerpo con las ‘torres gemelas’ gualdinegras. Los problemas que durante el primer tiempo crearon tanto Beltrán y Gallego por la derecha, como Galán por la izquierda, parecieron justificar la aparición como interior izquierdo de Silas y el debut como titular del recién fichado Agirrezabala por la derecha, con la clara intención de sacrificar profundidad por más intensidad y ayudas en defensa. Los verdinegros buscaron a Jito como referencia de su juego ofensivo, aunque las ayudas de Valin a los centrales cortocircuitaron la posible conexión con Abaroa o con Rodri, el único sestaoarra que intentaba jugar el balon con criterio los primeros cuarenta y cinco minutos.

El Portu ‘masca’ el gol

Con estos planteamientos y con un viento racheado de invitado, molesto pero en absoluto decisivo como fuese hace siete días ante el Amorebieta, transcurrió el juego de inicio sin un dominador claro, y con la reclamación de penalti por mano en el área local como única acción polémica reseñable. Las ocasiones se repartieron, destacando un cabezazo de Zárate que salía rozando la cruceta izquierda de la portería sestaoarra, a la que replicaba el River con un disparo al larguero de Rodri tras una buena jugada colectiva.

Conforme pasaban los minutos el equipo local parecía animarse más, imponía su estilo de juego, y gozaba de nuevas ocasiones en un centro-chut de Germán Beltrán que Raúl Domínguez resolvía sin problema, o en un balón que, tras dejada de Zárate, Ioritz enganchaba desde la frontal, obligando al buen meta del River a repeler no sin dificultades. Poco antes del descando un centro más de Adrià Gallego propiciaba el remate de volea de Galder desde dentro del área, que se marchaba algo por encima del arco rival.

Los balones colgados al área de Raúl fueron una constante
Los balones colgados al área de Raúl fueron una constante

Los equipos enfilaban el camino de vestuarios sin estrenar su casillero de goles, pero con la sensación en el ambiente de que el gol había rondado más cerca de la portería visitante; y así se iba a certificar tras la reanudación, no sin un aviso del River, cuando un fallo de la defensa portugaluja permitía al debutante Agirrezabala presentarse solo ante Giralt. Afortunadamente para la parroquia local la llegada rapidísima desde atrás de Xabi Galán desbarataría la clara oportunidad visitante, permitiendo que del posible 0-1 se pasara al 1-0 un minuto después, cuando Germán Beltrán, haciendo gala de su veteranía y colocación aprovechaba un balón suelto a la salida de un córner para adelantar a los suyos.

Cambios decisivos

Parecía que el Portu había hecho lo más difícil, perforar el muro de la defensa menos goleada de la liga, pero poco le duró la alegría. No habían pasado ni 5 minutos cuando Jorge Hernández, que había saltado tras el paso por vestuarios para ocupar la posición de un lesionado Abaroa, al saque de una falta lateral acertaba a conectar una volea que se incrustaba en las redes de Giralt. Sin duda decisiva la presencia del mediapunta zamorano, que además de estrenarse como goleador, contribuyó a cambiar el guión del partido con su habilidad y movilidad entre líneas.

Pero aunque el Portu sentía la amenaza creciente de su rival, tampoco renunciaba al triunfo. El central Tarantino tuvo que aparecer en dos ocasiones para evitar el segundo gol de los jarrilleros, primero sacando en la línea el cabezazo de Etxaniz a saque de esquina, y luego  evitando providencialmente que Galder fusilara desde dentro del área.

El partido se convertía en la recta final en un toma y daca donde las sustituciones parecían inclinar la balanza poco a poco del lado visitante. La entrada de Canario por Silas dotó de profundidad a la banda izquierda del River, poniendo en varios apuros a David Antón, sustituto de Adrià Gallego. La asociación del extremo palentino con Rodri y Jorge Hernández darían paso a los mejores minutos del equipo visitante, y así llegaba un mano a mano del ‘Duende de Sanzoles’ frente a Giralt, que impedía el recorte final del atacante verdinegro. El Portugalete, que se habia mostrado muy efectivo defendiendo el juego directo, sufría mucho más para defender las combinaciones  y desbordes de Jorge y Canario, y con el obligado cambio de Valin por Merino dejaba entrever grietas en un sistema defensivo que hasta ese momento apenas las había tenido.

La deportividad presidió el derbi
La deportividad presidió el derbi

El Portu no cejaba en su empeño de embotellar con balones colgados al área a su rival, pero ya en los minutos de descuento, y cuando se daba por hecho que el derbi repetiría el resultado y marcador del partido de ida, llegaría el jarro de agua fría para los locales. Jorge Hernández, tras pedir un balón en saque de banda, iniciaba un slalom en vertical librándose de cada rival que le salía al paso, hasta aprovechar el momento justo de dejar solo ante el portero a Jito con un magnífico pase entre líneas. Una última oportunidad que el killer verdinegro, tras casi tres meses sin ver portería, no iba a perdonar, recurriendo a una sutil vaselina, previo engaño incluido, que superaba al resignado guardameta local.

Gran epílogo para un Sestao que sale muy reforzado del ‘derbi txikito’ de Ezkerraldea no sólo por los tres puntos que confirman su buen momento a domicilio, sino por la moral que supone haberlo hecho con un equipo plagado de bajas. Los verdinegros recibirán en un nuevo derbi vizcaíno al Leioa encumbrado en la séptima plaza con 28 puntos, bastante lejos ya de los puestos de descenso en los que sigue sumido el Portugalete. El equipo de La Florida tampoco saldrá de Vizcaya en la siguiente jornada, y cruzará la ría para rendir visita al Arenas de Getxo, con la esperanza de que la suerte no les dé la espalda en Gobela y aumentar esos 14 puntos que lo mantienen como farolillo rojo de la clasificación.

Puntuaciones VAVEL 2B

Portugalete Sestao
Giralt 6,5 Raúl Domínguez 6,5
Adrià 7 Gago 6
Larreategi 6,5 Riki 5,5
Etxaniz 6,5 Neira 6,5
Moya 7 Tarantino 7
Valín 7 Kurbus 5,5
Ioritz 6 Rodri 7
Beltrán 7,5 Agirrezabala 5,5
Zárate 7 Abaroa 5
Galán 7 Silas 6
Galder 7 Jito 7,5
Suplentes
Igor Engonga 6 Jorge Hernández 9
David Antón 5,5 Canario 7
Merino 5 Izurza S.C.
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