El Cornellà sigue soñando a lo grande. Los verdes han logrado vencer con buen juego a un Olot muy inferior en un choque casi perfecto de los hombres de Jordi Roger. Una segunda parte de ensueño ha certificado una victoria que alza a los del Baix Llobregat al segundo lugar de la tabla tras la derrota del Reus en la Nova Creu Alta por 3-1. 

Lucas y su fe dieron el primer paso

La primera mitad del enfrentamiento estuvo marcada por la igualdad entre dos equipos que sabían lo mucho que se jugaban. Pep Caballé y Abraham fueron los primeros que pusieron a prueba a Wilfred que, poco después, tendría que intervenir muy enserio para evitar el primero de Enric. Cerca de la media hora de juego llegó el primer acercamiento del Olot que atrapó Marcos sin muchos problemas. Cuando todo parecía indicar que nos iríamos al descanso con resultado gafas, un buen balón de Lucas dejó a Abraham dentro del área y, tras entretenerse demasiado, disparó mordido y le cayó el rechace. El canario jugó con Lucas que, con mucha fe y creencia en sus posibilidades, acompañó la jugada y él mismo se encargó de mandar el esférico a la red con un zurdazo cruzado. 

Pinchazo del Reus y segunda parte mágica

En el descanso era momento de mirar marcadores y los de Jordi Roger eran conocedores de la derrota del Reus en Sabadell, hecho que les daba la oportunidad de situarse segundos en caso de lograr una hipotética victoria. Más motivación imposible para finiquitar cuanto antes el partido. A pesar de ello, le costó meterse en la segunda parte al Cornellà, hasta el punto en que Jordi tuvo que pedir intensidad a los suyos, sabedor de lo mucho que se estaban jugando. Eso sí, en cuanto se enchufaron no hubo quien les parara. Abraham se fabricó el solo su gol en una jugada de escándalo zafándose hasta de tres hombres, para luego definir con sangre fría ante la salida de Wilfred. El Nou Municipal estalló.

Y por si fuera poca la alegría, Enric Gallego volvió a saborear la sensación de anotar un gol. El ariete del Cornellà había gozado ya de un par de ocasiones para ver puerta pero no había tenido fortuna. A poco más de un cuarto de hora para el final, el nueve aprovechó un buen balón de Lucas en profundidad para batir a Wilfred y acabar con una sequía goleadora de muchos partidos sin ver portería. El Cornellà siguió a lo suyo y, en un balón largo desde el lateral y tras una peinada del capitán David García, Enric anotaría su doblete en un mano a mano ante el meta del Olot. Un severo castigo para un equipo tan necesitado como el Olot.

Era tiempo de dar homenajes a los hombres importantes y Jordi Roger decidió sustituir a Pep Caballé y a Abraham a falta de diez minutos. El estadio les dio una gran ovación a dos de los pupilos más imprescindibles del conjunto verde. Pelegrín, sustituto de Caballé, se sumó a la fiesta y anotó el quinto tanto en un contragolpe del Cornellà. La fiesta podría haber sido mayor si, el colegiado no decide anular el tercer tanto de Enric Gallego y el sexto del Cornellà. En definitiva, un gran Cornellà fue infinitamente superior a un pobre Olot que, se hundió tras el segundo gol local y poco pudo hacer ante el vendaval de los de Jordi Roger.

Octava jornada sin perder y sexta sin encajar

El Cornellà está de dulce y, prueba de ello son los números que destacan en este apartado. Con la victoria de hoy los verdes acumulan ocho jornadas sin perder y seis sin encajar un solo tanto en contra en la, probablemente, mejor temporada de la historia del club. El sueño del play-off cada vez está más cerca y la posibilidad de pelear por la liga, es real. Cornellà sigue soñando en grande.