Crónica de una muerte anunciada. La Peña Sport se encuentra a muy poco de certificar su vuelta a Tercera División. Un 2016 para olvidar ha dilapidado todas las opciones de un equipo al que la mala suerte le ha perseguido durante buena parte de la temporada. El Plantío, Burgos, será el escenario en el que a priori se produzca algo que se venía presagiando en las últimas fechas y que está muy cerca de ocurrir.

Veinticinco puntos en 34 jornadas no parecen ser suficientes para afrontar las últimas jornadas con opciones de salvar la categoría. El claro ejemplo es la Peña Sport, que se encuentra a once puntos del play-out de descenso y con la zona de tranquilidad ya a dieciséis puntos de distancia. De este modo, la próxima jornada, si no lo cambia un milagro, terminará con el primer descendido a Tercera del Grupo I de Segunda División B.

Y es que una única victoria en los últimos once choques disputados hasta la fecha han provocado que las opciones de la Peña Sport desaparezcan con el paso de los partidos. Además, la suerte no le ha acompañado en el último mes en el que ha cedido puntos muy importantes en los compases finales, como ocurrió ante los filiales del Sporting de Gijón y del Real Valladolid, y con el Pontevedra. Mención aparte merece el choque frente a la Cultural Leonesa que se desequilibró muy pronto con el penalti y la expulsión de Tanis Marcellán, que transformaría Aketxe.

El doblete del delantero vasco y los goles de Juan Bardal, Cristobal Gil y Javier Orodea han sido los últimos de este camino de penurias por el que ha transitado la Peña Sport. Después de proclamarse campeón del Grupo XV el cuadro de Tafalla no ha podido mantener la categoría de bronce tras un continuo sube y baja que se extiende ya desde el 2010. Sólo queda pensar en el retorno a Segunda División B, donde el San Francisco se erige como uno de los estadios habituales de la competición.