La temporada 2016/2017 ya ha empezado para el club fuenlabreño. Desde la llegada del nuevo inquilino de la dirección deportiva Juan Luis Mora se han dado multitud de cambios dentro de la plantilla. Unos inesperados, otros más cantados, y otros, directamente, lejos de cualquier tipo de cognitiva.

Jugadores de buen nivel como Borja Díaz, Carrasco, Tello o Tito no continuarán la temporada que viene, algo que habla y mucho (y positivamente) del proyecto que empieza. Otros como Jorge Ortiz o Sergio Pachón -sempiterno delantero al que le llegó la hora de colgar las botas- tampoco continuarán por cuestiones ajenas al club. Solo hubo un jugador que renovó, el zaguero San José.

Borja Díaz, gris final a ocho bonitos años

Ni más ni menos que once bajas se confirmaron en tan solo un día, pero la noticia saltaba con una en especial: Borja Díaz. Uno de los capitanes de la plantilla, el único canterano de la misma y uno de los últimos supervivientes de la plantilla del ascenso. Ni más ni menos que ocho años ligado al club que le vio nacer como futbolista, que terminaron con una simple misiva general (donde también se oficializó el adiós de Cabrera, Dorian Babunski, Javi Robles, Jean Carlos, Borja Sánchez y los ya mencionados).

El propio jugador fue el primer sorprendido. A pesar de que podía ser algo esperado que entrara dentro de los planes del club (no fue un fijo para Visnjic), nadie habló con él antes de oficializar este adiós y, la verdad, sorprende el trato de esta baja. Como a uno más, como a uno de los cedidos recién llegados. El propio futbolista -decepcionado, pero muy agradecido por todo- así lo confirmó con un escrito en las redes sociales. El resumen es fácil: el club no supo estar a la altura del adiós de un jugador importante para la afición; sin embargo, él sí lo estuvo:

Nuevo y ambicioso cambio de rumbo

Con este adiós, el Fuenlabrada pierde un trozito de su escudo dentro del vestuario. Un jugador de la casa que se va que, sumado a la retirada de Sergio Pachón, deja el 'sentimiento azulón' ciertamente maltrecho dentro de la plantilla. Esto puede verse como algo negativo -que lo es-, pero evidencia un cambio de dirección dentro del club: si jugadores importantes de años pasados ya no valen, es que se busca ir a más.

El Fuenlabrada ser puntero en la 16/17

Si jugadores de nivel no valen, es que se quiere ir a por más. Ya no vale el discurso de ''afianzarse en la Segunda B'', ya no vale el 'salvavidas' de la lucha por la plaza Copera y ya no vale mirar más allá que los playoffs. Ese es el mensaje que se lanza con esta limpia absoluta de todo el CF Fuenlabrada.

Ortiz también se desvinculó del club azulón.
Ortiz también se desvinculó del club azulón.

Bien es cierto que una cosa es buscar nuevos y más ambiciosos objetivos, y otra bien distinta es que con lo que tenías en casa no pudieras alcanzarlos. Jugadores como Borja Díaz, Tello, Tito o Carrasco -unidos a uno de los mejores de este año como Ortiz- serían de nivel en la gran mayoría de los clubes del fútbol de bronce. Esta es la parte que más descoloca dentro de la parroquia fuenlabreña. La típica cantinela de mirar fuera -desechando lo que tienes en casa- y teniendo que tirar de cartera para igualar algo que ya tenías. Aunque la cartera no parece ser el problema en este proyecto.

El encargado de lidiar con semejante reto será Juan Luis Mora, director del fútbol base que desde este mes de mayo pasó a ocuparse de la dirección deportiva del primer equipo. Un estreno difícil en un puesto y categoría nueva para él, pero el reto pinta apasionante: reestructurar por completo una plantilla y darla el nivel necesario para seguir en aumento. El tiempo dictará sentencia.